SIMPLEMENTE YO | 2a TEMPORADA

23.

~ DANIEL ~

Salgo en busca de Michelle, de verdad, no se como he podido ser tan estupido y comportarme así ante semejante situación, hace 4 días le hice llorar cuestionando que si en verdad me quería como ella suponía hacer, se prometió y juro que me amaba y yo no le hice caso.

Ando por los alrededores de la discoteca por si un caso me la encuentro sentada en el bordillo, como suele pasar en las películas, pero no, no está por ningún lado.

Michelle donde estas? Me pregunto desesperado al ver que no contesta mis llamadas.

Por un momento se me enciende la bombilla y pienso en ir a la residencia, seguramente a habrá vuelto a casa, andando, así que lo más seguro es que aún no haya llegado, tiene un largo paseo.

Corro hacia el coche y arranco dirección a la residencia universitaria, conduzco a una velocidad relativamente baja, son las 5 de la mañana y resulta extraño, pero hay bastante gente por la calle andado, lo más seguro es que sea gente que acabe de salir de fiesta y se vuelva a casa.

Lo que realmente me extraña en una calle es que hay un gran grupo de gente concentrando en la acera. Delante de una casa, donde hasta los propios inquilinos han salido ante la situación. Habrá pasado algo?

Aparco a un lado sin molestar, hasta que oigo el ruido de la sirena de una ambulancia acercándose hacia nuestra posición.

No hago caso y me acerco al grupo de personas que rodean algo o alguien.
Me abro paso entre la gente, y ahí la veo, a Michelle, en el suelo, con un gran golpe en la cabeza, sangrando e inconsciente en el suelo.

-Se ha dado con el bordillo en la cabeza al caer -comenta un hombre cuando me ve arrodillarme ante ella-

Visualizo a Michelle sin llegar a creerme lo que está pasando ahora mismo, invadiéndome un gran sentimiento de culpa, ella no estaría así si yo no la hubiese dejado ir enfadada y llorando.

Las lagrimas empiezan a salir mientras acaricio una de sus mejillas con rasguños.

-Que alguien llame a una ambulancia -grito nervioso-

-Ya lo hemos hecho, debe estar por llegar -comenta otra persona-

-La hemos apartado de la carretera para que no la atropelle nadie -Dice la dueña de la casa-

Asiento viendo como en menos de 5 min llega la ambulancia, subiendo a Michelle en una camilla con cuidado, colocándole el collarín de seguridad por si algún caso sufre daños cervicales.

Se la llevan en ambulancia al hospital, a mi no me dejan acompañarla, solo familiares me contestan los imbéciles.

Corro hacia el coche y conduzco al hospital a toda leche, sin importarme nada, sólo Michelle.

Llego al dichoso hospital, donde sin darme más información me obligan a quedarme en la sala de espera hasta que el doctor tenga nuevas noticias.

Y así hago, sentarme a esperar, nervioso, ansioso, deseando que no sea más grave de lo que parece.

Llamo a Yolanda para explicarle lo que ha ocurrido, y en menos de 20 min ya está en el hospital, igual de nerviosa que yo o incluso más.

-Que cojones a pasado Daniel? -grita Yolanda furiosa-

-No tengo ni idea Yolanda, me la encontré así -suspiro nervioso- eso te quería preguntar yo a ti, a Michelle le pasa algo? -pregunto insistiendo-

Yolanda no contesta a mi pregunta, evadiendo el tema y se sienta a esperar.

-Nada -responde después de unos largos segundos en silencio-

Pues nada, a Michelle le pasa algo y no quiere contármelo. Me siento delante de Yolanda a esperar a que salgan a darnos noticias de Michelle.

Pasan dos horas, Yolanda cae rendida, se duerme apoyada en la pared, después de una larga e intensa noche de fiesta.

Al fin sale una enfermera.

-Familiares de Michelle Evans? -pregunta la enfermera-

Me levanto de la silla y despierto a Yolanda

-Nosotros -respondo acercándome-

-El doctor les espera en su habitación, planta 2 habitación 068 -dice la enfermera-

Y así hacemos, subimos rápidamente a la habitación que nos dice la enfermera y entramos después de tocar la puerta.

Nos encontramos a Michelle en la camilla, dormida o sedada, no lo sé, y al doctor junto a ella con unos papeles en la mano.