XIII. MI ALMA TIENE UN CONFLICTO

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Conforme pasaron los días los alemanes se veían agobiados, preocupados y sospechaba que algo los tenía así, por lo regular los médicos hablaban entre ellos con murmuró, muchos de estos médicos trataban de tener un respaldo de vida es decir trataban de ayudar algún judío y que este al final de la guerra lo ayudará al declarar por su gran heroísmo en la guerra nadie tenía que ser tan inteligente para entenderlo. Pero el odio que ellos nos tenia no los dejaba a ser un acto de caridad y ellos mismos terminaban dándole el último tiro de gracia a quien supuestamente trataban de ayudar.

Cuando Tomás Hess médico alemán que fue transferido a Auschwitz trataba de acercarse a mi yo huía, o lo evadia las veces que podía lo hice así. Una noche vi al miembro de la resistencia y me digo que necesitaba información por que los días transcurrían y yo no ayudaba en gran cosa, que tenía que poner más atención.

Al día siguiente trate de hacer lo que el me pidió pero era difícil no era cuestión de poner atención, si no que Los SS eran precavidos y no era tan fácil saber que preparaban para nosotros. Yo había visto y escuchado que Tomás Hess era diferente a los demás médicos, proporcionaba medicamentos, comida y cobijas a los enfermos y el trato que tenía hacia los judíos era diferente. Pero a pesar de que yo presencie muchas de sus obras se me hacia difícil creer que lo hacía sin ningún interés. Y esto no me permitía verlo distinto, para mi era un alemán del reich igual que los demás bastardos que nos humillaban y asesinaban.

- ¿usted tiene con que cubrirse por las noches? Me pregunto. Yo no le respondí, el volvió a decirme ¿por que no acepta mi ayuda? Y sin dudarlo le respondí..... - ¿esto es su ayuda? O son sobras de lo que nos han quitado a nosotros y nos quiere dar. Mire usted le dije, tal vez esto me cueste la vida pero no importa, si ustedes quieren comprar su libertad con esta "ayuda" para que cuando la guerra termine usted salga bien librado, tal vez lo consiga pero de la justicia divina no creo que pueda reunir suficientes testigos para que no se valla al infierno al igual que todos estos que han asesinado. Se dio la vuelta y me digo:

-vaya, mínimo usted habla, y comenzó a reírse.

Yo sentí un gran frío en mi cuerpo y su risa me ocasionó una sensación de inconformidad y pensé. A este hombre no le importa lo que yo piense ni le interesa el infierno tanto que se ríe.

- Mire srita, quiero que usted sepa que mi ayuda no tiene ningún interés le voy a confesar algo que veo que ustedes los judíos no se dan cuenta, No sólo ustedes han sufrido algo que no fue decisión de nosotros o por lo menos le puedo asegurar que muchos de nosotros nunca estuvimos de acuerdo con esta guerra, ni con la discriminación y asesinatos de muchos de ustedes sin embargo al igual que ustedes nosotros no nos quedó de otra más que hacer lo que nos ordenaban. Sin embargo en mis manos no tengo sangre de inocentes por lo cual me siento sin pena alguna en mi conciencia si usted le arrebataron lo que tenía, no fue la única puedo decirle que yo también perdí a quien más amaba, así que Srita si usted juzga con la misma vara a todos por el solo hecho de portar una insignia y un uniforme esta usted muy equivocada. Se dio la vuelta y se fue. Pero sentí una sensación en mi pecho que no puedo descubrir, sentí que había hecho algo mal y que este podría tener la razón de sus palabras. Pero no era fácil creer a alguien de la SS, ya que todos para mi pensaban y actuaban igual.

Pensé mucho en lo que este médico digo, y tenía razón si yo hiba por el campo juzgando a todos los alemanes como uno solo era hacer y actuar como ellos, juzgando y odiando a los judíos.

-creo que me equivoque le dije una tarde al médico.

- pues que le puedo decir, respondió. La puedo comprender, es difícil confiar en alguien que es el rostro de un asesino y el verdugo de muchos, sin embargo trato de que este uniforme y mi posición ayude a quienes lo necesitan. Debe de tener cuidado no todos son como yo.

Sigame me dijo vamos a revisar a los enfermos, yo caminare adelante de usted y trataremos de platicar.

- le diré srita estamos en un punto crítico de la guerra Hitler, pierde y los aliados avanzan esto es cuestión de tiempo para que termine, me preocupa usted sabe.

-¿por que se preocupa por mi?

-Srita usted es rebelde, intransigente créame si sigue respondiendo a sus impulsos no podrá ver y disfrutar la libertad. De consejo trate de pasar desapercibida estamos a puntos cruciales de nerviosismo y cualquier error que cometa le puede provocar la muerte. Así que por favor por sus seres caídos guarde compostura y sea prudente.

-usted por que actúa así conmigo, ¿Que le pasos? O ¿que necesita de mi o de las internas? ¿Quiere ayuda cuando finalice la guerra?.

-comenzó a reír esta vez capte su sonrisa diferente y vi como los pocos rayos del sol se reflejaba en su rostro, algo hizo que dentro de mi sintiera un calor repentino me vio y dijo: - lo rojo de sus mejillas le hace ver mejor. Y siguio riendo. Yo sentí pena y baje la vista esto era nuevo para mi y malo a la vez, como alegrarme con alguien que es un "NAZI" parte de mi no dejaba que yo creyera totalmente en el. Con el tiempo lastimosamente fui creyendo, se volvió en mi fe y en un amigo. Me ayudaba cuando podía con porciones de comida, brazadas calientes, medicamentos o con lo que pudiera ofrecerme.

El hombre de la resistencia me digo que tenía que utilizar esto para nuestro beneficio que tenía que sacarle información el creí que yo odiaba a este medico y que todo lo hacía para obtener información para ellos, pero no era cierto yo en realidad estimaba a Tomás y si bien el me decía palabras de esperanza nunca me platicaba acerca de lo que los nazis hacían, o como estaban los alemanes organizado. Ni tampoco Tomas sabía que yo era miembro de la resistencia.

Todo este conflicto de intereses por llamarlo de alguna manera me hacia sentir mal, no podía defraudar a la resistencia eran los míos pero tampoco podía traicionar la amistad del hombre que era diferente a lo que representaba.

YO SOY JUDÍADonde viven las historias. Descúbrelo ahora