¿Y El Final Feliz?

Capítulo 3

Llego sábado y estaba demasiado nervioso por mi cita con Yuri, una cosa es que nos viéramos en la escuela pero ahora nos presentaríamos como una pareja. Estaba en mi habitación pensando que utilizar cuando mi madre llegó.

—¿Iras a algún lado?— pregunto sentándose en la cama.

—Si...llevare al baile de bienvenida a alguien— respondí buscando cosas en mi celular.

—Iras con el chico ¿verdad?— me pregunto curiosa.

—Se llama Yuri...y si...iré con él— respondí sabiendo que ahora vendría su sermón.

—Sabes que tu padre y yo no tenemos problemas con que seas gay pero no me parece buena idea que te mezcles con esa clase de gente— dijo acariciando mi hombro.

—Por favor mamá no empieces...necesito arreglar mis cosas— respondí levantándome.

—¿No sabes que ponerte?— me pregunto mirando hacia mi closet.

—No se que ponerme...necesito verme bien— explique cruzándome de brazos.

—Entonces te ayudare— dijo levantándose.

Pasamos casi dos horas y termine con el vestuario más simple que pude hacer. Solo me puse unos jeans negros, mis botas de siempre y una camiseta blanca.

—Creo que te falta solo un toque especial— dijo mi madre corriendo a su habitación.

La espere en la sala un momento hasta que bajo las escaleras con una chaqueta de cuero negro en las manos.

—Creo que es momento de que te de esto...era de tu padre— dijo ayudándome a ponerla.

—No me imagino a mi padre usando algo como esto— respondí ajustándola.

—¿Como planeas irte?— pregunto sentándose en el brazo del sofá.

—Te iba a pedir el auto...— respondí nervioso ya que no lo había planeado.

—¿Quieres irte en el auto y arruinar tu atuendo?...no lo voy a permitir— dijo arrojandome unas llaves.

—No quiero problemas y que excedas la velocidad Otabek— me advirtió seria.

—¿En serio mamá?— pregunte emocionado.

—De todos modos en un par de meses será tu cumpleaños y esto iba a ser tu regalo...no le veo problema a adelantarlo— dijo comenzando a subir las escaleras.

—Te quiero aquí antes de las 2 ¿de acuerdo?— pidió por último y subió a su habitación.

A veces no entendía a mis padres, eran tan superficiales en ocasiones pero también tratan tan bien a todos. Me fui al garage y quite la sábana de la motocicleta que mis padres me compraron hace tiempo para mi cumpleaños. Probé el motor y luego me fui a casa de Yuri, al llegar fui recibido por su madre de manera muy afectiva.

—Pasa Otabek...¿Quieres algo de tomar o comer?— me ofreció amablemente.

—No muchas gracias señora...es un gusto conocerla por fin— dije sentándome en el sofá.

—Soy Amelia y también es un gusto...Yuri habla siempre de ti...no te preocupes enseguida baja— dijo asomándose por las escaleras.

En ese momento bajo Yuri, traía puesto unos jeans y tenis negros, una camisa con un tigre y una sudadera con estampado de leopardo. En cuanto me vio se quedó congelado y sonrió lentamente.

—Por dios Yuri ¿en serio vas a llevar eso?— lo regaño su madre.

—Es solo un baile mamá...no hay problema— respondió cruzando los brazos.