VIGÉSIMO QUINTO ACTO
Jiwoo extendió su mano, Jae la miró confundió un par de segundos, pero después correspondio el saludo. Jiwoo estrujó su mano con suavidad sin romper el contacto visual.
-Jeon Ji Woo, representante de Matthew Kim, gusto en conocerte -dijo y gesticuló una pequeña sonrisa que duró tan sólo unos instantes, Jae beom sonrió más ampliamente y asintió lentamente.
-¡Andrew! -exclamó con fuerza mientras tiraba de su cabeza un poco hacía atrás, al instante un hombre casi tan alto como Matthew y de piel ligeramente bronceada apareció-. Toma los datos del chico, pase y reservación en zona vip, por favor -soltó en un tono serio para, otra vez, volver sus ojos fríos hasta Matthew en una mirada que claramente decía "te estoy vigilando" para después irse sin voltearse a verlos más.
-Ella generalmente no es así, sólo está estresada -le susurró al oído intentando restarle importancia al comportamiento de su jefa, Jay rió sonoramente acompañado de Matthew.
-Bien, voy a necesitar tu nombre completo... -Andrew llevaba consigo un sujeta papeles. Fue entonces que Jae beom dió un par de pasos al frente.
-Park Jae Beom -dijo, Matthew sonrió enternecido mientras lo miraba. Sus ojos se achicaban mientras su corazoncito parecía hacerce cada vez más grande. Además, estaba feliz, nuevamente se había salido con la suya, a veces se sentía como un niño mimado y suertudo.
Todo era alegría y bienestar hasta que, Andrew, se quitó la gorra, miró con ojos pequeños a Jae beom y dijo:
-¿Te conozco? -tanto Matthew como Jae beom se pusieron alerta, Jae se sentía un poco incómodo y Matthew había borrado su boba sonrisa.
-No creo... -dijo mientras reía temblorosamente, pero Andrew no cambió su expresión. Pensaba en algo, intentaba recordar...
-¡Eres Jay! -el susodicho subió y bajo sus hombros con una expresión que decía "me descubriste" pero no dijo nada en sí. Andrew se encontraba contento, hasta que vió la mirada que Matthew le regalaba y sentía el aura que éste emanaba.
-Nada de decirle a Jiwoo -espetó, casi escupiendo las palabras, confiaba en Andrew, pero no tanto...
El hombre alzó las palmas de sus manos y rió, para después marcharse sin más.
-No entiendo nada -dijo al final el más joven mientras estallaba en risas. Era verdad, no podía asimilar lo completo que tantas cosas hayan pasado en tan poco tiempo. Matthew suspiró pesadamente y volvió a tomarlo por la cintura ligeramente.
-Salgamos de aquí.