✨Resplandor✨

Capitulo 31

Maldiciendo en mis adentros por interrumpir volteé para saber que quería Quil quien ya estaba lo suficientemente cerca de nosotros.
- Jacob, Tienes que ir por Paul - dijo rápidamente con cara de disgusto
Sin decir más solté a Renesmee y empecé a seguir a Quil quien me guió hasta el patio trasero donde ya había una pequeña bolita rodeando a mi amigo, que en efecto necesitaba ayuda
- Jake, amigo, estás aquí - empezó a parlotear mientras se sostenía de Seth quien ayudaba a que no cayera. Podía oler como le apestaba la boca a licor
- ¿Que paso? - lo ignore y me dirigí a Seth quien tenía mala cara por cuidar a su amigo borracho
- No lo sé, tal vez nunca había tomando tanto y se emocionó - frunció el ceño
- Yo, estoy mu-y bi-en. No deben preocuparse, mejor relájense y disfrutemos de la fiesta. - empezó a reírse como idiota
- No se calmará - dijo Quil avergonzado
- Llévenselo a su casa, si quieren después regresan - dije notando que algunos empezaban a murmurar sobre nosotros.
- ¡No! Yo quiero seguir bailando, ya hice amigas, verdad Hanna - empezó a saludar con la mano a la chica que se encontraba entre el público mirándonos mal
- Es increíbles esa chica - rio
- Cállate la maldita boca y vete a casa Paul - me acerque a él para que fuera el único que oyera
- Vaya, por eso no hay que invitar a gentusa - se oyó una voz atrás de mi. No necesité tiempo para reconocerla. El maldito niñito riquillo estaba alegando. Rápidamente me volteé y lo busqué con la mirada para después fulminarlo con ella.
- Jajaja, ¿Que? Solo digo la verdad - me dirigió la mirada. El solo verlo con su cabello de princesita y su copa en la mano como si fuera el jefe me hacía hervir la sangre poco a poco
- Jack, ya, olvídalo, nos lo llevaremos - escuche a Quil a mis espaldas
- ¿De donde son? De la reservación me supongo - volvió a hablar el tonto chico con una sonrisa burlona que no se le borraba
- Llévenselo ya - fue lo último que pude decir antes de que se me hiciera un nudo en la garganta e inconsciente apretara mis dedos con mucha fuerza en puños
Escuche como Quil y Seth se llevaban rápidamente a Paul a mis espaldas quien no protestó para nada.
- Chicos, creo aún no se conocen - la tal Hanna se acercó irritante entre nosotros - Jared, el es Jacob, Jacob Jared - sonrío ampliamente mientras nos presentaba.
- ¿Jacob? - Dio una risotada - mucho gusto - se acercó más a mi
Cada paso que daba, cada respiro que daba me hacía tener más fuerza para darle un buen golpe en la maldita cara que se cargaba.
Empecé a respirar excesivamente y trataba de pensar en una sola cosa "Piensa en Nessie, no le hagas eso"
- ¿Todo en orden? - mire que ya nos estaba acompañado Edward.
- Todo en orden señor Cullen. Linda fiesta - le dedico una sonrisa y antes de irse me barrió con la mirada
- Maldito ...
- Jacob, tranquilo - me interrumpió tocándome el hombro
Rápidamente me aparte de él y me dirigí a la salida. Todo había salido mal, y aún no me explicaba cómo hice para controlarme y no haberlo matado.
- ¡Jacob! - Oí a Nessie quien me seguía de espaldas. Sin darme vuelta solo me detuve
- Jake, ¿ya te vas? - dijo acercándose a mi
- Ire a ver a Paul, bebió mucho - dije tratando de sonar tranquilo pero sentí como tenía aún el nudo en mi garganta
- ¿Volverás? - dijo rápidamente
Me volteé para mirarla
- No tardaré - le dedique una pequeña sonrisa y me aleje trotando hacia el bosque.

Renesmee
Regrese a la fiesta donde se encontraban mis amigas bailando y tomando un poco más de la cuenta. A la que más se le notaba era a Katie quien no paraba de reír y bailotear de un lado a otro.
- Esta increíble todo - dijo Jenny mientras le daba otro sorbo a su copa - ¿No tomarás? - pregunto al ser la única sin bebida
- No me gusta mucho, estoy bien así - le sonríe
- ¿Que hacen aquí? Hay que seguir bailando - Nos dijo Katie tomándonos torpemente de las manos y llevándonos a la pista de baile
- ¿Ya se fueron Jacob y los chicos ? - dijo Hanna uniéndose a nosotras
- Mmm, no, ahora vuelven - "Espero no quiera también interponerse entre la amistad con mis amigos de la push", pensaba
- Ok - sonrío y empezó a bailar con las demás
Por momento miraba como todos seguían disfrutando de la fiesta, entre ellos Alice y Rosalie que se veían entusiasmadas y orgullosas por todos los alagos que estaban recibiendo esa noche. También notaba a mis padres quienes se paseaban entre la casa checando que todo estuviera en orden, pero se veían un poco serios, me imaginaba era porque no les gustaban las fiestas tan grandes.
Pasaron unas horas y ya estaba exhaustas de tanto bailar
- Nessie, es hora del brindis - se acercó Alice a mis amigas y a mi
- ¿Nessie? - rio Katie - que extraño apodo, pero me gusta - dijo ya pasada de copas
- Tranquila, la trataremos de controlar - dijo Jenny abrazándola
- Bien - dije siguiendo a Alice quien se dirigía a la parte alta de la casa en las escaleras.
Rápidamente mis padres se acercaron a nosotras seguida de mis tíos y abuelos.
- Es hora - Alice dio indicaciones al encargado de luces y la música quien bajo el volumen de la canción que estaba y puso una luz más tenue para poder sobresalir entre la gente
- Bueno, primero quiero agradecerles esta noche, a todos los que están presentes acompañándonos en este gran momento- empezó a hablar Alice en el micrófono que no me di cuenta de donde lo saco.
Todos nos prestaron total atención por lo que desde la posición en la que estaba podía mirar todo. Empecé a reconocer varias caras hasta distinguir como Jacob se acercaba entre la multitud para estar en primer fila. Ya no tenía el saco puesto, se había arremangado las mangas de su camisa y desajustado un poco su corbata mientras tenía el pelo ya despreocupado. Aún así fue inevitable dedicarle una sonrisa al mirarnos, era muy apuesto.
- Asi que dejare que sus padres le dediquen unas palabras - fue lo último que escuche decir a Alice.
Rápidamente volteé a ver a mis padres quien miraron mal a Alice por un segundo al tan repentino plan de un discurso en público. Como era de esperar no rechazaron el micrófono por el gran público que aguardaba y Edward empezó a hablar tranquilamente mientras me miraba con una pequeña sonrisa acompañado de mi madre quien también me miraba algo nerviosa por toda la atención que les prestábamos a ambos