Capítulo 13

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POV Ruggero.

Tener los labios de Luna junto a los míos es el mejor de los momentos de los muchos que son espectaculares a su lado pero de pronto, dejó de besarme.

~Es tu turno.-susurro mirándome pícara.

Me levanté de encima de ella, y ella también. Me miro de arriba hacía bajo y se arrodilló en frente de mi, comenzó a bajarme el jean dejándome sólo en bóxer.

~Tal y como me gusta.-dijo mirando mi bulto erectado oculto tras mi bóxer.

Comenzó a dar masajes encima de mi bóxer y era tan placentero, de paso, pasaba su lengua algunas veces.

~Ya, chupamela.-dije con la voz ronca y completamente excitado.

Ella me miró y sonrió de lado. Me bajó de un tirón el bóxer. Tomó mi miembro y lo miró, comenzó a mover su mano de adelante para atrás masturbándome, luego se metió sólo la punta de mi miembro en su boca y movió su lengua alrededor. Quería provocarme para hacer que me enoje. Y si, lo lograría si seguía así y cuando me enojo, soy demasiado, salvaje.

~¡Que me la chupes, Luna!-le grité puesto a que ya me había enojado.

Al parecer le gustó ya que volvió a sonreír de lado.

~¿O si no qué, papi?-me preguntó mirándome con una cara inocente.

Ella quería jugar conmigo, quería enojarme, quería que fuera salvaje y lo iba a conseguir. Pero también me calentó que me llamara así y además con su carita, uff.

~No me retes, preciosa, te castigaré y que mejor que con ese precioso culo que traes.-le dije medio gruñendo mientras la miraba.

Fui algo vulgar pero se notaba que le encantaba, creo que esta es una fantasía que ella quisiera cumplir conmigo.

~Quiero que me castigues, papi.-dijo haciendo un puchero.

~Primero, chupamela.-le respondí.

Tomé su boca, metí mi miembro en ella, tome su cabeza y comencé a moverla para que chupara mi miembro. Ella sonreía y a veces hacía que se atragantara. Gemía bajo puesto a que sentía demasiada excitación tener mi miembro en su boca y como ella se mostraba sumisa. Pero en un momento me mordió, me dolió y me salió un impulso de jalarle el cabello y lo hice. Se sacó mi miembro de su boca y me miró nuevamente como sumisa.

~Au, papi, me dolió.-me dijo con un puchero en sus labios.

Fue muy tierno pero se lo merecía, no debía morderme.

~Más te vale que te comportes, eh, mi amor.-dije alzándole el rostro para que me vea.

Y continuamos, metí mi miembro en su boca, ella lo chupaba y lo lamía, fue hasta que me corrí y ella se tragó todo mi semen. Me encanta mi chica espectacular.

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