Ulquiorra caminaba por los pasillos de las noches, hacia sus aposentos, ya había terminado una de las sesiones con la humana y ciertamente se sentía muy frustrado. Ya había pasado un tiempo desde que comenzó a realizar esta descabellada misión y la mujer estaba cada vez peor con cada día que pasaba, su estado de salud se deterioraba a cada segundo; sobre todo desde su segundo día de jornada, en la que cayo inconsciente por golpearse la cabeza, desde ese día, ha parecido estar más muerta que viva; ya no gemía como las primeras veces que la tomo; de hecho casi no reaccionaba, solamente se quedaba quieta, dejando escapar un quejido de vez en cuando y llorando silenciosamente, mientras él hacía lo que quisiera con su insignificante cuerpo humano. La situación se volvió tan grave que incluso la llevo con Szayel para que la revisara, pero este le dijo que físicamente estaba bien.
—Debe ser algo psicológico— dijo el espada de cabello rosa con una sonrisa maléfica— si quieres que se recupere, te recomiendo que seas más amable con ella, haz el amor con ella por lo menos una vez— rió— a los humanos les gusta llamarlo así y si ves que ella mejora ¡asunto arreglado!- exclamó sonriente.
Esa conversación lo había hecho enojar de sobremanera ¿hacer el amor? Eso era una expresión estúpida que los humanos habían inventado. Lo nombraron "hacer el amor" para dejarse llevar libremente por sus instintos y para no quedar mal ante los demás, ya que estarían realizando un acto de amor y no solo sexo, que era lo único que en realidad quieren, ciertamente los humanos son desagradables.
No comprendía como octava espada pudo sugerirle algo tan despreciable; además el no abusaba de su fuerza con ella, salvo tal vez, el primer día en el que la poseyó, y le quito la virginidad, se encontraba tan molesto, por todo lo que había ocurrido ese día, que se dejo llevar por sus instintos, los que lo obligaron a penetrar violentamente a la humana, hasta que esta cayo en la inconsciencia. No era algo de lo que se sintiera orgulloso por eso en las siguientes sesiones que tuvieron, él se controló y fue un poco más suave con ella, pero aun así la mujer moría sin que él pudiese hacer algo al respecto, sin mencionar que recientemente su cuerpo se sentía extraño cuando estaba con la pelinaranja.
Orihime se encontraba acostada en el sofá, ya que últimamente Ulquiorra la violaba ahí, no sabía el por que, pero de cierta manera estaba agradecida, era mucho mejor estar en el suave sofá que en el duro y frío piso, podía descansar cómodamente después de su abuso y no tener dolor de espalda en los minutos siguientes.
—¿A caso estaba loca? Como podía estar pensando que era mejor ser violada en un sillón que en el suelo ¡es horrible en cualquiera de las situaciones! O lo sería para la gente con sentido común, pero ciertamente su cordura se iba a cada momento junto con sus ganas de vivir. Aunque de las dos opciones prefería la muerte no quería que sus amigos al encontrarla vieran a una lamentable mujer demente en vez de la típica pelinaranja sonriente... ¿sonriente? Ya hace mucho que no sonreía, incluso pensó que ya no podía hacerlo, ya no sentía felicidad ni siquiera por el recuerdo de sus amigos; sólo sentía dolor, tristeza y desesperación. Lo único que tenía eran sentimientos oscuros que se llevaban su vitalidad y sus expresiones, ahora solo lloraba y se quejaba de vez de repente cuando el pelinegro abusaba de ella, esas eran las únicas expresiones que podía dar. Al parecer su cuerpo ya no pudo más y se dejo vencer por los sentimientos y la mente de la pelinaranja, aunque comía estaba delgada, aunque dormía más de lo normal seguía con sueño. Al parecer su cuerpo se desgastaba con cada segundo que pasaba y así lo deseaba.
—Creo que este es mi fin—susurro con lágrimas en los ojos y se quedó profundamente dormida.
–Orihime—dijo un joven.
—¡Hermano!- grito la pelinaranja, corriendo hacia su hermano y abrazándolo fuertemente— ¡estas aquí!
—Orihime... lo que pasó...-dijo suavemente.
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Nuestra misión
FanfictionLos planes de Aizen están retrasados y para volverlos a la normalidad requiere de la ayuda de Orihime, quien sera parte de un retorcido plan junto a su carcelero y del cual saldrá marcada para siempre." ULQUIHIME. Advertencias violación y lemon (muc...