-P-padre, ¿Q-Qué haces aquí?- Estaba muy nervioso, sabía que ese mismo día podría morir en unas horas, o minutos, inclusive en segundos
-¿Qué que hago aquí?- Exclamé molesto, en verdad molesto -Alfred me habló de TU IMPRUDENCIA con tu hermano Damian, sabías que le pasaba y aún así le diste las llaves de tu auto, ¿Acaso querías que muriera? ¿Lo querías matar verdad Dick?- Le grité al ver a mi hijo menor al borde de la muerte, todo por su culpa, aunque, me dolía haberle dicho eso, sabía que solo lo quería ver feliz con su relación, nunca había tenido ninguna y lo entendía, pero estaba excesivamente molesto
Me fui de ahí porqué si no lo mataría y no dejaría que mis emociones me controlen, soy Batman, eso no me puede pasar
-Perdón por esta aparición tan repentina y grosera Raven, pero me tengo que ir, en un rato hablamos más decentemente, ¿Te parece, nuera?- le sonreí al verla sonrojarse a mis palabras, aunque fuera la hija del demonio interdimensional Trigon tenía que apoyar a mi hijo, no lo había hecho y creo que mejor tarde que nunca así que, empezaría a ser el padre ejemplar que siempre quise tener...
-Ehm, si claro-o señor Wayne- quise ser lo más propia que pude, pero aún así se me notaba el temor y preocupación por Damian
-Vaya, creo que en 1:30 minutos moriré, pero bueno, creo que me lo merezco, Damian esta casi muerto por mi culpa...-
-Amo Dick, no tiene por qué culparse, usted solo abogó por el bienestar sentimental por su hermano menor, como cualquier gran hermandad haría- le puse una mano en el hombro, saben que siempre pueden contar conmigo
-Gracias Alfred, pero este día fue muy pesado, debo de ir a dormir, de hecho, creo que debemos-
-Gracias amo Dick, creo que si necesito un descanso por el día de hoy, también usted, señorita Raven-
-Oh si, pero, ¿En donde esta mi habitación Alfred?-
-Puede dormir en la habitación del joven Damian, no va a estar ahí esta noche-
-Oh, esta bien- susurré -De todos modos ya dormimos juntos casi desnudos...-
-¡Señorita Raven!, más respeto por favor, no quería saber esa información de ambos- Hice cara de asco, la intimidad del amo Damian no era de mi incumbencia ni la de ella
-Oh si claro, perdón, no sabía que me escucharía, lo lamentó Alfred-
-JAJAJA, Alfred tiene ojos y oídos en todos lados, claro, menos en la sala de cuartos y huéspedes-
-Necesito descansar, buenas noches a todos- Abrí un portal y entré a el, me teletransportó a el cuarto de Damian, saqué una playera que hasta a el le quedaba un poco grande, me la puse y desaparecí mi traje con mi magia, era momento de dormir y eso hice, aunque tarde en conciliar el sueño por lo mismo, sabía que Damian despertaría en una hora según lo que dijo Batman, o Bruce, o...
O simplemente suegro, no sabía como llamarle, pero yo le creía, esperaba a que Damian despertará a mi lado y sentí como despertaría dentro de poco.
Me quedé totalmente perdida en mi cansancio y me acosté por encima de las cobijas.
...
Sus ojos se abrieron dejando ver el esmeralda, despertó con una sensación de dolor por todo su cuerpo y cuando comenzó a moverse sintió esa sensación de pesadez por todos los músculos de su cuerpo.
Se sentó en la camilla en la que se encontraba y miró las suturas por todo su cuerpo, todo.
Cubrió su cuerpo con una bata que vio cercana y caminó aún cansado, lo único que tenía claro era que necesitaba su cama para dormir, aún estaba dormido y sentía sus músculos resistirse un poco a sus movimientos pero como pudo llegó después de varios... minutos? Horas? En realidad no lo sabía y no le interesaba saberlo.
Cuando abrió la perilla entró sin más y se sorprendió al notar que Raven lo miraba desde su cama confundida y con los ojos a medio dormir, en realidad había olvidado que ella fue lo último que vio y escuchó cuando cayó.
Su cabello corto revuelto ligeramente, sus ojos a medio dormir, su ropa que nunca pensó le quedaría mejor a alguien que no fuera él le hacía una mala jugada.
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Un amor sin precedentes.
FanficUna historia amorosa sin igual, dos almas tan diferentes que durante su vida han sufrido demasiado, cosa que al encontrarse, los unió de una manera sin igual, el uno para él otro. Una misión en la cual ella su destino era la muerte, aunque el la sal...