Capitulo VIII: De la calma a la tormenta

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Casi seis meses habían pasado desde que Kirishima había pedido ser novio de Izuku, durante aquellos meses muchas cosas sucedieron, algunas discusiones menores sobre como entrenar o preocupaciones de cuando se lastimaba por usar más allá de los límites permitidos, porque Izuku sintió tanta confianza con él que se atrevió a contarle su más grande secreto, algo que en un inicio le hizo temer de que pudiera lastimarse en un intento por dominar el One for All, sin embargo con el tiempo entendió y simplemente decidió seguir fortaleciéndose para poder proteger a Izuku de todo peligro que pudiera presentarse.

Durante esos meses igualmente habían sucedido algunos hechos, entre ellos las licencias de héroes que todos portaban a excepción de Bakugou y Todoroki, el rescate de Erina de las garras de Chisaki, de igual manera había acontecido ya el festival escolar, habían sido unos meses muy emocionales y muchas veces provocadores grandes temores e incertidumbres.

Era ya de noche, en la habitación de Kirishima, Izuku estaba semidesnudo reposando sobre el cuerpo de su novio, durante esos seis meses habían hecho muchas cosas juntos pero no al punto de intimar más allá del juego sexual ¿La razón? Izuku aún no se sentía listo, sentía que quería a Kirishima, durante esos meses se sintió protegido a su lado pero aun temía que todo lo bueno que pasaba entre ellos fuera porque no era querido por Bakugou, una parte de él aun creía que estaban juntos por que el rubio le había rechazado hace ya meses, tenía miedo de que pasara algo y que la bella relación que tenían se destruyera. Kirishima por su lado respetaba la decisión de su novio, si no se sentía listo no iba a forzarlo, con lo que hacían para él le era más que suficiente, teniéndolo ya a su lado era feliz.

- ¿Te quedaras hoy a dormir? – Pregunto el pelirrojo mientras acariciaba suavemente una de las mejillas de su novio, actualmente estaban viviendo en el dormitorio de la UA por seguridad, últimamente se temía algún ataque de la liga de villanos.

El peliverde estaba algo cansado, la verdad era que no quería irse de hecho tampoco quería moverse de como estaba, estaba tan cómodo y cansado por cómo habían jugado esa noche que solo se apegó, buscando más cariño por parte de su pareja – Si...la verdad hoy fue un día agotador, además de que no creo que se enojen si pasamos la noche juntos, no es como que fuera todos los días ¿no? –

Al escuchar la respuesta solo pudo reírse un poco antes de darle un beso en la mejilla – Tienes razón...aunque no me molestaría si fuera todos los días...es cómodo – Respondió liberando un bostezo – Por cierto mañana te espero en la salida de la UA, después de clases ¿de acuerdo? –

- ¿Planeas algo? – Pregunto volteándose algo curioso. Kirishima solo sonrió y cerro sus ojos en señal de que iba a dormir – A veces me gustaría saber que tienes en mente...- Agrego Izuku antes de acomodarse y dormir abrazando a su pareja.

A la mañana siguiente Izuku se fue temprano, no le molestaba que los demás le vieran salir del cuarto de su novio, solamente prefería irse a preparar para las clases, además del entrenamiento que tenía junto a All Migth muy temprano, se fue del cuarto no sin antes de darle un beso en la mejilla.

Cuando el pelirrojo despertó sabía bien que estaba solo, conocía la rutina de Izuku y no le molestaba que se marchara, estaba consciente de que su novio se cuidaba en esos entrenamientos y que eran necesarios para hacer suyo el poder que le había sido otorgado por el anterior símbolo de la paz. Kirishima ya en pie se arregló para ir a la empresa de Fat Gum, hacia un tiempo estaba trabajando junto a él por lo que sus planes eran sencillos: iba donde Fat Gum, patrullaba durante el día y ya en la tarde juntarse con su novio para poder entregarle un regalo que había encargado especialmente para la ocasión, no siempre se cumplían seis meses de relación, muchas de hecho podían terminar antes de alcanzar una fecha que podía verse corta pero a la vez simbólica.

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