Tuvimos que anular el capitulo porque habían errores y tuvimos que editar a última hora, espero nos disculpen.
Éste capítulo se lo queremos dedicar a todas esxs lectorxs que interactúan con la historia pero en especial a Amlit3 y a
Albaaaaa_09, chicas recibimos sus mensajes y creannos que nos emociona que esto les encante.◇◇◇◇◇◇◇◇◇◇◇◇◇◇◇◇◇◇◇◇
Esto está siendo más sencillo de lo esperado.
Llevaba ya dos partidas en el nivel intermedio cuando le pedí mi primera copa a Lía.
Voy por la tercera y solo espero que la partida de la última mesa sea mucho más emocionante que las demás. Al principio había sentido cosas que hacia mucho que no sentía y sin saberlo echaba de menos; el nivel de poderío, la tensión del ambiente, el sonido de las fichas al chocar entre si. Incluso el analizar los comportamientos de los rivales me parecía entretenido.
Todo eso se minimizo cuando empece a ganar las partidas consecutivamente. O la gente era muy mala jugando o yo soy muy buena. Yo voto por las dos.
Arrogante.
Me río de mi misma y cuando veo que es mi turno me vuelvo a centrar.
—Doblo la apuesta. —muevo la mayoría de mis fichas hacia el centro de la mesa. A ver si duplicando la cantidad las cosas se ponen más interesantes.
Observo a mis contrincantes. Una chica con el cabello rojo intenso que sonríe cada vez que tiene una buena mano, un chico que comete el error de llevar puestas las gafas debido a que se le reflejan las cartas en los cristales, otra muchacha que mastica chicle a toda velocidad porque esta perdiendo mucho dinero y un pelinegro que esta muy sudoroso y no deja de absorber por la nariz.
Adicto seguramente.
La partida continua y cada vez queda menos para mi victoria. Solo quedamos él chico de las gafas, él sudoroso y yo.
Siento una mirada pesada sobre mi nuca y me giro sin descuidar mi mesa. Nadie está mirando hacia a mi. Me remuevo cautelosa echando unos vistazos a mi alrededor, nadie me esta mirando ahora pero estoy segura de que no fueron imaginaciones mias.
Diez minutos después estoy sonriendo en gran manera. He ganado la partida y con ellos unos maravillosos dos mil euros. Ya he recuperado todo el dinero prestado por la élite e incluso me sobran mil euros de ganancias propias. Sin duda extrañaba jugar.
Brook se vuelve a subir a una silla y silba llamando la atención de los presentes: —Tienen un tiempo de descanso hasta que empiece la partida final.
Aprovecho eso para levantarme de mi puesto y estirar las piernas. Agarro mi vaso de cristal y me encamino hacia la barra para poder pedirle a Lía que me rellene mi copa.
Me sorprendo cuando América y Emily se acercan a mi.
—No deberías pedirte otra copa. Dentro de nada comenzara la partida en la mesa presidencial.
—No te preocupes Em, he estado bebiendo agua con gas. —digo entre risas.— Lo mío no ha sido nunca el alcohol. No te voy a decir que no bebo nunca pero no mucho más que dos cervezas.
—No lo estas haciendo tan mal. ¿Jugabas mucho antes? —viniendo de América me tomo lo primero como un halago.
—De pequeña mis padres me enseñaron a jugar y los fines de semana jugábamos toda la familia.
Ella asiente y puedo percibir en sus ojos una nota de melancolía.
—¡Ey! ¡Los estas machacando Cleo! —Faith me da un empujón amistoso con su cadera.— Eres toda una estratega.

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Room 207
Teen FictionJamás creyó que algo así sucediera en su mundo. Redes de apuestas y juegos de azar debajo de las universidades, sobornos a directivos, discusiones y algún que otro disparo al aire. Pensó que entrar a la Universidad Lund sería estudiar una carrera co...