America:
Levanto la mano a la velocidad de la luz en cuanto el profesor Niklas termina de formular la pregunta.
—Se recomienda realizar una craneotomía en casos como: traumatismo craneal, reparación de aneurisma o inflamación cerebral.
—Deberías levantar la mano como hacen los demás, ¿Quién eres tú para quitarme mi derecho de responder? —no puedo evitar soltar el comentario.
Vanja Orm me devuelve una mirada ácida que va a juego con su personalidad.
Vanja es una sabelotodo y maleducada que desde que entré a la facultad lucha conmigo para poder obtener el primer lugar de la clase. No me hubiese importado si no fuese tan impertinente y estuviese empeñada en fastidiarme delante de todo él profesorado.
—Oh, lo siento Zemog. No sabía que tenías la capacidad de pensar y no creí que fueses a responder correctamente.
—Ahora mismo estoy pensando un montón de palabras que me gustaría soltarte, serpiente venenosa. —sonrío con suficiencia al ver cómo enrojece hasta la raíz del pelo.
—Basta muchachas, —el profesor intenta poner calma entre la guerra de miradas que mantenemos.— la clase ya está acabando así que para la próxima vez quiero que todos hayan leído el capítulo doce y seis; y se lo sepan de memoria.
Cuando el profesor comienza a recoger sus cosas para marcharse todos los estudiantes salen velozmente del aula.
—Señorita Espinosa, ¿puede venir un momento?
Una de las razones por las que el profesor Niklas es mi favorito es porque me llame por mi segundo apellido, me hace pensar en mi madre.
—Dígame profesor.
—Se que usted y la señorita Orm no se llevan bien pero sabe que no me gusta que haya tensión en mi clases, —yo solo asiento con la cabeza en respuesta.— debes entregar un trabajo.
—Lo se, quedan aún cinco días de plazo. —comento con simpleza.
—Suele entregarlos una semana antes del plazo.
Lo único que obtiene de mi es un encogimiento de hombros.
Me mira fijamente, alzando una ceja y pregunta: —¿Va todo bien, America? Te veo muy distraída últimamente.
—Todo perfecto, profesor. Con permiso me retiro, tengo que hacer cosas.
El solo me observa desconfiado y asiente volviéndose a concentrar en guardar sus cosas. Yo tomo eso como vía libre para irme y huyo despavorida del aula.
Últimamente estoy muy ocupada con la Élite y no he tenido tiempo para ponerme hacer trabajos de la facultad. Sin duda, hoy por la noche debo tener todo terminado y perfecto.
Suspiro con cansancio y reviso mi teléfono en busca de algún mensaje nuevo.
Tengo dos.
<3nus: Wyatt me ha comentado que hoy irás a visitar a tu padre, ¿Quieres que vayamos después a cenar juntas?
¡Dios es verdad! Hoy tengo que ir a casa de mi padre, con todo lo de esta semana casi se me olvida.
Yo: Me encantaría.
Abro el otro mensaje que resulta ser de un número que aunque no tengo agregado conozco de quién es.
Número desconocido: ¿Cuándo nos vemos? Tenemos cosas de que hablar, no me puedes esquivar toda la vida.
Dejo el mensaje en visto y lanzo el móvil lo más profundo posible al interior de mi bolso.
No me voy a permitir pensar en ese tema ahora así que masajeando los lados de mi cabeza me dirijo hacia mi auto.
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Room 207
Teen FictionJamás creyó que algo así sucediera en su mundo. Redes de apuestas y juegos de azar debajo de las universidades, sobornos a directivos, discusiones y algún que otro disparo al aire. Pensó que entrar a la Universidad Lund sería estudiar una carrera co...