Capítulo 11.

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Creo que me haré pis encima.

No creí que estar a solas con América fuera tan asfixiante, aunque no es que ella provoque eso pero el ambiente está lleno de tensión y okay, ustedes entienden.

De verdad estoy muy nerviosa y cuando sucede eso comienzo a decir estupideces, como en este momento.

Ambas estamos sentadas en una mesa redonda de póker, ella frente a mí cruzada de brazos y luciendo tan elegante como siempre. Estamos esperando a que Venus llegue pero ya van al menos veinte minutos de tardanza y Mer está que explota de la ira.

El viernes Faith llegó corriendo demasiado hiperactiva hasta el salón de mí facultad a comunicarme que a partir del Lunes comenzarían mis entrenamientos teniendo de mentoras a Ve&Ca.

Debo admitir que me emocioné demasiado.

También me invitó a la fiesta del sábado, al parecer la élite se encarga de organizar ese tipo de reuniones cada que comienza el fin de semana. Fue una noche divertida aunque no vi a Venus ni al chico que creo que es su pareja.

Brook bebió hasta terminar recostada en la barra, sumida en un sueño realmente profundo a tal punto en que Blake le dibujó dos penes en sus dos mejillas y ni se inmutó. Me la pasé riendo con la mitad del grupo en el mismo sofá en dónde los vi por primera vez, jamás creí que estaría en un lugar así y es algo nuevo para mí.

Thomas se mantuvo serio ante mí presencia de igual manera que Emily. No les agrado mucho y eso me desanima un poco porque creí que quizás, Emily y yo seríamos muy buenas amigas.

El día siguiente me la pasé encerrada en la residencia terminando trabajos que tenía hechos por la mitad, siempre dejo todo para útlimo momento y luego se me hace realmente difícil llegar a terminarlos. Con mucho esfuerzo pude terminarlos a contra reloj.

Así llegamos hasta este momento. Hoy Lunes, me encuentro a punto de hacerme pis de los nervios y eso me pasa por tener vejiga débil.

Los minutos pasan y Venus no da señales de vida.

Cuando América toma su celular como si la fuera a llamar, la puerta de la habitación se abre de golpe y una muchacha algo agitada entra con una bata blanca en sus brazos.

Oh, se ha cortado el cabello.

Luce diferente y no lo digo en el mal sentido. El corte hace que sus facciones sean mucho más afiladas y delicadas. Avanza en silencio sin dar explicaciones y se desploma en el asiento justo al lado de Mer.

—¿Donde estabas? —Le pregunta echándole una mirada seria.

—En los laboratorios. —responde Venus sin darle importancia.

—¿Se puede saber qué tanto haces en esos lugares? Entiendo que tengas trabajos pero también tenías un compromiso.

—Una vacuna para que dejes de ser un grano en el culo y además de eso, un antídoto para reducir la estupidez humana, genial. ¿Verdad? —musita irónica regalándole una sonrisa falsa.

América permanece callada cómo si tratara de no explotar y mandarla a la mierda, es curioso porque creí que entre ellas dos había una buena relación, pero creo que la actitud de Venus no es muy agradable para la contraria.

—Ya que Venus decidió honrarnos con su presencia, podemos comenzar. —dice la muchacha mirándome. Tengo que parpadear varias veces para centrarme en ella y quitar la vista de la recién llegada.—Lo primero que debes saber es de donde salió la Élite. No puedes participar en algo sin conocer su origen, grábate eso.

Room 207Donde viven las historias. Descúbrelo ahora