Segundo Round.

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Peter está en medio de la sala, sostiene el ramo de rosas y una botella de oscuro color, tiene solo tres siglas y un quince dibujado en el frente. Tony se siente aliviado por lo anticuado que es Peter, no le dijo la sugerencia que hizo su padre, pero el alfa lo supuso, y supuso bien.

- Buenas noches.- su voz es ronca y el omega en Tony está temblando.- Señora, me tome la libertad de traerle un presente, espero sea de su agrado.

Es que hasta como lo dice, Jesús, parece sacado de las novelas de Jane Austen. María recibe el ramo y agradece el gesto, le dice que le han encantado. Pero Tony sabe que lo que más le gustó a su mamá, es la caballerosidad que desborda de Peter.

- Señor Stark, esto es para usted.- silencio, hay un silencio aplastante y la tensión se rompería con un afilado cuchillo.-

Entonces ocurre lo que no era posible que ocurrir en este galaxia. Howard recibe el presente y lee el nombre marcado en la etiqueta. Levanta la vista, su rostro no expresa ninguna emoción. Y pasa, estira la mano y se la ofrece a Peter.

Hay más fuerza de la que debería en ese apretón de manos, pero está pasando, ambos alfas se ven fijamente y ninguno parece terminar el saludo.

- ¡Maldición! Tony, ten tus malditos veinte dólares.- que sería de Tony sin su primo, ¿en serio?

El saludo termina y todas las miradas caen en un Tony nervioso, están expectantes.

- Steve, te he dicho que dejes de andar apostando.- es Peggy la que recrimina al rubio.- Y tu también Tony, los vicios son progresivos.

- No es ningún vicio, tía.- pero guarda el billete en las bolsas de su deportivo. No es tanto el dinero, es el saberse victorioso sobre su primo.

- Perdón por la interrupción, pero la mesa esta servida.- Jarvis llega como se va, en silenciosos pasos.

- Bueno, pues adelante Señor Parker.- el alfa le regala a María una de sus sonrisas marca "Buen niño" y le pide que la llame Peter, por favor.

Peggy, María y Peter se envuelven en una animada charla sobre el cambio climático y como la víspera navideña esta casi encima. Steve está concentrado en acabar todo lo que hay en su plato. En cambio a Tony se le ha cerrado la garganta, nervios puros, y Howard tiene su vista clavada en Peter, el alfa no se inmuta.

Después que el postre fue servido, Peggy sugiere ir a la sala y literalmente arrastra a Peter de su brazo.

- Estoy seguro que a mamá le ha encantado Peter.- Steve le murmura a Tony durante el camino a la sala de estar.-

- Incluso más que James.- Tony también lo notó. Peter es sentado entre ambas mujeres, y se ve demasiado cómodo en compañía de las bellas damas.

- Deberían cambiar, Peter con Steve y Tony con James.- el comentario de Howard llega desde su espalda.- Sería mejor.

- De ninguna manera.- los omegas respondes en sincronía.

Howard tiene una risa floja, se ha ido a la mesa de la esquina y abre el obsequio llevado por el presuntuoso alfa. Tony ve como inspecciona el aroma del contenido y casi puede ver el gesto de aprobación que le ha dado. Es un avance.

Llama a Tony y le indica que reparta un vaso para cada uno, incluso le sirve uno a Steve y al propio Tony. El omega ha sido resuelto y bastante rápido.

- Bueno, a lo que vino.- Howard está en su lugar, en el que quince días atrás contenía sus ganas de agredir al alfa que ahora se sentaba recto, con vaso en mano, y le miraba serio.

- Señor Stark, no comenzamos con el pie derecho, sobre todo si retomamos los hechos ocurridos hace ya bastante tiempo.- es elocuente para hablar y ha elegido un buen comienzo.- Pero mi intención nunca ha sido rivalizar contra usted o su compañía.

- Sí, como no.- Howard bufa y es muy bueno escondiendo el gesto de fastidio. La educación no pelea con nadie.

- Considero que es el momento de comenzar de nuevo, limar ásperas.- Peter no se detiene.- Sobre todo que ahora soy un miembro de su familia.

Es que se invita solo en todo, piensa Tony. Se ha bebido su trago muy rápido y ahora no tiene con qué quitar la sensación de hormigueo que habita en su boca.

- Cuando Anthony y yo nos conocimos, supimos de inmediato que estábamos destinados.- mentiroso, pero a lo mejor así fue, Tony sigue sin recordarlo.- Hemos construido una relación y el vínculo tiene fuerza. Sería bueno para todos tratar de llevar esto en paz.

- Sobre todo cuando vengan los nietos.- Peggy lo dice entre risas, se calla de inmediato cuando Howard gruñe en su dirección.- Solo trato de ayudar,  hermano.

- Mejor no ayudes, gracias.- el alfa mayor lo dice saturado de sarcasmo.-  El señor Parker puede hacerlo solo.

- Bueno.- María interrumpe, el rumbo de la conversación va muy bien, todos siguen en su lugar y Howard no ha comenzado a gritar.- Yo creo que tiene razón, dejar rivalidades atrás y darle una oportunidad.

- ¿Ya te ha convencido a ti también?.- Peggy vuelve a hablar y su rostro está adornado por una sonrisa copiosa.-

- No lo digo por Peter.- María se apura en aclarar, pero sí, el joven alfa le ha convencido.- Lo pido por Tony y su omega.

¿Tenías que ser tú?  [STARKER]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora