Capitulo 13

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Bel: ¡Quítame las manos de encima!

Marshall: No me hables así.

Bel: Tu a mi no me vas a dar órdenes...

Marshall: Bel esto... escúchame porque esto no tiene...

Bel: Suéltame.

Marshall: ¡NO! ¡MALDITA SEA! Deja de hacer escándalo...

Bel: Es que aun no te das cuenta que todo lo que tú haces conmigo.

Ahora el si me soltó y dio un paso hacía tras y vi como se fue agriando su rostro, pero él no volvió a abrir la boca, y como siempre la atenta Jenn estaba allí para defender a su Marshy, pero no solo ella, se acercaron todos y las chicas se unieron en mi contra, ya lo sabía, todos preferían a Marshall... o bueno las chicas, me miraban furiosas y por el radillo del ojo podía ver al profesor venir para la segunda clase de baile del día...

Ashley: El asco lo das tu no Marshy.

Jenn: Vamos Marshy ósea ni la mires esta latina no vale la pena...

Maia: Si alejémonos por qué el olor a establo me está matando.

Bel: Si y bien lejos porque la fragancia de gatas baratas me da alergia...

Casi nunca respondía con este tipo de cosas a esas... las gatas de Marshall Mathers ya me tenían al límite, lo bueno es que venía James entrando y ellas tuvieron que morderse la lengua.

James: Bien chicos tomen sus posiciones.

Y dicho esto encendió la música para comenzar con los pasos, el ejercicio me relajo, aunque procure no mirarlo... o a nadie más bien, ni a mi amiga mire, no quería tener que responder preguntas incomodas pero me fastidiaba tanto tener que dar explicaciones y lo único que quería era desaparecer... y así lo hice cuando termino la clase, estuve el resto del día en los camarines, tumbada en una banca pensando en todo lo que paso... en cómo se me estrujo el corazón... me dolió hasta el alma ver la cara de Marshall cuando me grito que le daba asco, la expresión en sus ojos, maldición él no era cierto, el... él era, es y será Marshall el dios Mathers, el playboy de la academia...

Aly: Hey Deep faltaste a mi clase.

¡Maldición!, como no iba a darme cuenta, pero quería estar desaparecida al menos, me levante y quede sentada mientras miraba a Aly Hudg la profesora de canto.

Bel: Yo... siento haber faltado... es que no me sentía bien...

Aly: Pasa eso y a la enfermería Deep... algo mucho mejor que un frio y húmedo camarín.

Bel: No de esa forma...

Aly: ¿Qué paso Bel? James me conto que estabas peleándote con las chicas otra vez.

Bel: Aly... no era con ellas, era con... el.

Ali: Mmm ya veo, me pregunto cuándo te vas a dar cuenta... ¿estás mejor?

Bel: Aly, nos conocemos como hace mil años, dime algo que me sirva no frases a medias.

Aly: Esta bien campanita, como yo lo veo... tu estas todo el tiempo peleándote con el chico Mathers, es mas sacan chipas con solo mirarse... y yo digo que toda esa energía podrías ocuparla de otra forma... ósea pierdes mucho tiempo metiéndote con el de la forma equivocada... dios me van a matar si se entera de mis consejos pero...

Bel: ¿Qué?

Aly: ¿No has pensado que en vez de desear que se muera simplemente lo deseabas?

Bel: ¡No! nunca en este vida... ¡Aly! El es... ha estado con casi todas las chicas de esta academia... quizás que tenga... ¿has visto como van las chicas tras él? ¿Yo te parezco alguien tan patético?

Aly: No, claro que no... Oye ahora tengo una clase y no puedo quedarme mas pero, campanita, tu dale una vuelta a mis palabras en tu cabeza, y no grites... mira que tu no me dijiste que el chico no te gustaba... vamos Bel es atractivo no?

Bel: ¿Y James qué?

Aly: Es mío! Pero piénsalo, es el segundo chico más guapo del planeta.

Maldición hasta Aly pensaba que él estaba bueno, me quede hasta que las clases terminaron en el camarín, escribiendo tonterías por qué no escribiría nada bueno con semejante lio en La cabeza.

Cuando volví al cuarto solo Carly me interrogo pero Katy y Tay estuvieron atentas a las respuestas, todas querían saber el motivo de la pelea y era lo único que no podía decir, era un poco difícil decir... por lo que me dediqué a criticar a Marshall y a sus gatas, hasta que todas estuvieron acostadas y listas para dormir, solo que yo no podía, miraba el techo y pensaba en todo una y otra vez, en el mirándome con esos ojos.. en el besándome con sus labios rosados... en el aguantando sus gritos... en el odiándome con esa mirada, en mi siendo la verdadera pe-rra de la historia, maldición no podía estar tranquila con todo lo que paso, tenia culpas, muchas culpas, había sido injusta, como podía criticarlo si no estaba demostrando ser mejor que él, ni siquiera mejor que sus zorras, me levante y salí al pasillo, por suerte no estaba el celador y yo iba en un diminuto pantaloncillo negro que usaba para dormir y una sudadera muy pequeña... pero ya estaba en el pasillo y si no iba ahora no tendría valor después, cruce el pasillo y golpee la puerta... ¿y si estaba con alguna chica? ¿Si el...? Bel solo vas a disculparte y nada más, solo discúlpate y ya luego, luego te vas a dormir, el grito desde dentro "ya voy" y no se escuchaba nada mas, dios estaba perdiendo el valor, el ruido de cómo soltaba el seguro me erizo la piel y tome una gran bocanada de oxigeno...

Marshall: ¿Bel!?

Bel: Yo... vine a... vine a...

¿Pero que tenia este chico en la cabeza? ¿Cómo se le ocurría abrir la puerta en bóxer?

solo con bóxer pero Oh dios esos músculos... Dios tenía el moreno camionero y parecía tan sexy... pero él estiro los brazos agarrándome de la cintura mientras me llevaba al interior de su cuarto y cerraba la puerta, estábamos a oscuras...

Bel: Hey... ¿Qué haces?

Marshall: Venia el celador... ¿no viste la luz de su linterna?

Bel: Yo... tengo que irme.

Maldición, levante la mirada de su abdomen y agradecí que estuviéramos a oscuras o el vería lo roja que estaba, pero no pude evitar mirarlo una vez más, de pie a cabeza, y cuando llegue a su rostro el parecía algo molesto, tenia los labios y el ceño fruncidos, pero no había arrogancia en su expresión...

Marshall: Ya me has mirado? Ahora dime ¿Qué quieres?

El estiro los brazos para dar más dramatismo a su última pregunta, algo natural cuando se veía tan enfadado como el parecía estar... y se veía tan... sexy... Pero en ese momento y por impulso avance tres pasos y cruze los brazos por los hombros de él mientras lo besaba, ya no lo aguantaba necesitaba estar muy cerca de él, y al parecer el también.

*Acéptalo, eres mía*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora