*Acéptalo, eres mía*

Capitulo 8

Los tres volvimos a la terraza hasta que me acurruque junto a él, Jake tenía más espacio pero yo me quede junto a él..

Bel: Marshall busca a Katy y dile que tengo sueño…

Jake: Ven conmigo y te enseñare donde…

Marshall: No te molestes Jake ya la llevare yo.

Avance pero iba mal, borracha, vi a Katy y camine en esa dirección, pero la chica estaba con su novio y a Marshall lo detuvieron… con un fuerte apretón en el brazo.

Jake: ¿Qué haces?

Marshall: ¿Tienes algún problema en los oídos? Llevo a Bel a dormir…

Jake: ¿Quieres los favores de Bel, Marshy? Me estas fastidiando Mathers y…

Marshall: La emborrachaste por sexo, pero amigo, eso no va a pasar.

El me agarro del brazo y me hizo avanzar hasta las escaleras. Yo iba quejándome y al llegar al pasillo del cuarto nos quedamos mirando uno al otro, lo empuje dentro de mi cuarto, y lo bese hasta quedarme dormida.

La conciencia me estaba reclamando, me estire para despertar los músculos pero alguien estaba tumbado junto a mí, de un salto quede sentada y mire a mi lado, mientras que Marshall Mathers se desperezaba… no podía apartar los ojos de él, ¿que hacia junto a mi? Me levante intentando escapar pero al quedar de pie me di cuenta que solo llevaba ropa interior, un brasier verde manzana de encaje que seguro mostraba más de lo que quería que el viera, y unas pantaletas a juego…

Bel: ¿Tu y yo no…?

Marshall: Tu te quitaste la ropa solita…

Bel: ¡Pero no te quedes ahí! ¿Dónde está mi ropa?

Lo cual fue un error, el se levanto en bóxer… y empezó a recoger cosas del suelo… su ropa… la de ambos… Vi los restos de una camiseta.. Oh Dios le había arrancado la camiseta a Marshall!!.

Levante la mirada y lo vi recoger un calcetín y note que en su espalda habían marcas… líneas rojas eran mis uñas que habian destrozado la camiseta… oh Dios lo habia besado una y otra vez había caído como todas las otras, maldición pero cuando el besaba te llevaba al paraíso… bien estaba segura que nada mas había pasado pero… era mi final, el no lo dejaría pasar… estaba perdida.

Marshall: Esta es mi camiseta… tu…

Bel: No me lo recuerdes.

Marshall: Vuelves a estar de mal humor… no es que me sorprenda pero pensé que después de…

Bel: Oh cállate.

Marshall: Okey, Bel sabes que somos adultos y…

Bel: Y nada, bien Marshall me tienes en tus manos… Dios como pude ser tan es-tupida… tenias que ser tu… como pude…

Marshall: Carajos...

Bel: ¿Perdón?

Marshall: Estoy intentando que esto sea lo menos raro posible, pero sabes, da igual lo que diga. Seguirás pensando que soy el diablo.

Bien no me esperaba esto, no esperaba que Marshall dijera esas cosas, ahora estaba sentado con una cara de tristeza que jamás le había visto, parecía abatido… agarre mi blusa y me la puse para sentirme un poco menos violenta… mi pantalón estaba en las manos de él, avance como un animal asustadizo y estire la mano para agarrar el pantalón pero él estiro su mano sin mirarme…

Bel: Escucha Marshall esto… bueno…

Marshall: Quédate tranquila que no abriré la boca, nadie sabrá por mi nada de esta noche… claro si es que puedes creer en mi palabra.

Bel: No me queda de otra.

Le dije casi sin pensar, en voz baja como si hablara con mi misma mas que con el ¿Por qué demonios no me miraba? Se calzo los jeans y sus zapatos, y salió lo más rápido que pudo.

Y como era de mañana un sábado no vi a nadie por el pasillo, Carly, Tay y Carly dormían en sus camas, asi que me acoste en mi cama sin dejar de revivir esa noche.

Estuve todo el fin de semana pensando y pensando, no podía sacarme el sabor de Marshall de los labios pero me daba rabia pensar que era una más de las patéticas que suspiraban por sus besos, por su toque, pero no iba a mendigar como las otras… por qué no era más que una más.. Una mas en la larga lista del paraiso Mathers. De pronto Tay interrumpio mis pensamientos:

Tay: ¿Qué tienes? Llevas así todo el día… no es que me importe mucho pero… ¿te paso algo?

Bel: No por?

Tay: Es que.. en la fiesta de Carly te desapareciste toda la noche y ahora parecieras como si tuvieras un problema…  ¿Necesitas algo?

Bel: (Retroceder el tiempo, pensé)…    No nada, gracias por preguntar…

Tay: Bien, para cuando quieras lo digo en serio.

Ahora sí que estaba intrigada, ¿Taylor siendo amable conmigo? Bueno nunca nos llevamos tan bien como grandes amigas ya que siempre hubo distancia entre las dos así que ¿Por qué se interesaba? Maldito Marshall esta era su culpa, de él y sus besos, y aunque hubiera desaparecido todo el fin de semana, mañana lo vería en clases, y esperaba que no dijiera ni una sola palabra de lo habia pasado porque lo mataría.. y lo mataria en sentido figurado si era necesario.