nuevo capitulo:)

1.4K 61 4
                                    

Hola, sorry la tardanza, aquí va de nuevo:

*POV Nath*

Estoy un poco adolorido por toda la pasión que descargué sobre Christian anoche, me sorprende cómo cada vez se resiste menos. Comienzo a dominar en este juego.

Le doy una cucharada a mi cereal y veo su nombre en la pantalla de mi teléfono. "Jack". Inmediatamente escupo el contenido de mi boca y dejo caer la cuchara sobre la mesa.

-Siempre con tus pucheros- dice Grey del otro lado de la cocina aún sudado y dejándome ver sus recién trabajadas abdominales. -Voy a seguir un rato más niño lindo, avísame si quieres algo- me sonríe con cierta picardía en sus ojos antes de partir de vuelta al gimnasio.

Yo no pude evitar poner mi teléfono boca abajo hasta que Grey salió de la habitación. Abro el mensaje. "Espero que tus nalgas estén listas para mí. 8 pm". Me queda una terrible expresión en el rostro al terminar de leer. -¿Qué querrá este sujeto? ¿Cómo que mis nalgas? ¿Quién se ha creído? y más importante aún, ¿Cómo es que consiguió mi número?...¿Se lo habrá dado el amo? Todas estas dudas me provocan un ligero mareo y caigo de la silla, un zumbido en mis oídos y el piso moviéndose bajo mi cuerpo. Escucho sus pasos venir.

-¿Estás bien? ¿Qué pasó?- me dice Grey agitado y cargándome en sus brazos.

-No nada... me tropecé con las patas de la silla, sabes que soy un poco torpe- dejo salir una risita inocente para disimular.

-Sí, eres torpe, por eso me preocupo por ti- pone mi cabeza junto a su pecho, puedo escuchar su corazón latir rápidamente y le creo sus deseos por cuidar de mí.

Llegamos a la habitación y me coloca sobre la cama de manera delicada, procurando no herirme más de lo que aparento. -Un poco absurdo, las sábanas no me harán daño- me digo. Grey coloca una manta sobre mí y me mira el rostro buscando una respuesta que yo no le daré.

-¿Seguro estás bien? luces un poco pálido.

-Sí no es nada, fue el susto del improvisto, ahorita se me pasa- le respondo rápidamente.

-Mejor te preparo un té- se acerca y me besa la frente. Él sabe cómo consentirme.

-De me...- pero logra interrumpirme. -De menta- me sonríe de nuevo. -Te conozco bien niño lindo- y sale de la habitación.

Tomo mi celular de nuevo y miro fijamente la pantalla. Es como si le suplicara ir a decirle a Jack que se vaya al diablo. ¿Le digo a Grey o no? Si lo hago probablemente se enfade mucho, no le gusta que los demás toquen lo que es suyo y mucho menos si trata de mí, ya no solo soy un accesorio, ahora, según sus propias palabras, soy el dueño de su corazón. Pero si no le digo probablemente lo averigue y se enfade más.

-Dios mío ¿Qué hago?... Creo es mejor no decirle y resolver esto por mi cuenta. Después de todo, qué puede pasar, sólo hablaré con él y le pediré que se aleje, parece alguien sensato, una simple advertencia bastará- le digo con mi mirada al aparato. Grey vuelve.

-Hice que te prepararan un emparedado también, el pan te hará bien en este momento- yo solo le sonrío. -¿Por qué siento que me ocultas algo? me dice con mucha curiosidad en su tono de voz.

-¿De qué hablas? ¿Ocultar? ¿Yo?- con una pésima imitación de alguien relajado.

-Vamos, sabes que puedes decirme lo que sea, y siendo más estrictos, sabes que tienes prohibido mentirle a tu amo- me toma y aprieta mi pompi derecha con fuerza.

-Yo no tengo prohibido nada, esta, ahora es una relación de confianza y si digo que no oculto nada, es porque es así- yo cada vez más serio.

-Bien como digas, te creo, además esos berrinches solo hacen que me ponga duro- me arrebata la mano que iba a tomar la taza y la coloca sobre su pene erguido bajo el pants deportivo. Puedo sentir sus venas palpitar. -Vamos sabes que lo deseas. Ya es tiempo de enseñarte quién manda aquí- me jala hacia él bruscamente tomándome del pelo y coloca sus labios sobre los míos, me deja beber el calor de su boca y probar el deseo que exhala de ella. La agresividad de sus acciones hacen que me excite. -Lo haré, seré su sumiso una vez más, lo necesito, necesito que esa virilidad me castigue- pienso.

-Vamos, muéstrame qué tan malo he sido- lo reto con mis palabras y me destapa de un solo golpe y abre mis piernas buscando reclamar lo suyo. Lo siguiente es verlo quitarse los pantalones y quedar al desnudo bañado con la luz del amanecer entrando por la ventana. Ahora su erección está dentro de mí y esta vez yo no me mido con mis gemidos, braman placer y dolor. Sólo logran encenderlo más a él. El amo desahoga su lujuria en mí durante un rato hasta que es hora de irse.

-Lo mejor es que hoy descanses, te veo en la noche para reconfortarte si es que aún lo necesitas- me da otro ataque de besos y sale a trabajar.

Estuve horas meditando lo que haría, caminando de un lado a otro y por fin me decido. "¿Dónde?" le escribo respondiendo su mensaje. Pasó sólo un minuto cuando mi teléfono suena de nuevo. -La oficina de Grey- sabe cómo hacerme enojar este sujeto, pero no me queda otro remedio que acceder y le respondo un desinteresado "OK".

El chofer avanza velozmente, le he pedido acelerar la marcha, no quiero que nadie me reconozca o al coche. Cristian regresará de su cena de negocios muy tarde, -mejor suerte no pude haber tenido hoy- le digo al chofer que no entiende de qué le hablo por lo que mejor me quedo callado y miro por la ventana la fría noche. Llego y subo por el elevador. Mis labios sudan por el estrés, Jack sin duda tiene un poder sobre mí, pero es imperante no demostrárselo.

-Me has hecho esperar- una tenebrosa voz habla por la espalda y solo veo dos ojos saliendo de la oscuridad, no queda ningún empleado en el piso.

-Nnnn. No. ¿Y eso qué? Escucha, sólo vine para decirte que no quiero nada que ver contigo, ni ahora ni nunca, Cristian es mi pareja y lo será siempre, no importa lo que pase, yo sólo lo quiero a él ¿entiendes?- se ha acercado a mí y escupe el humo de su cigarro en mi nariz. Toso fuertemente.

-Vamos, no me digas que sólo estás aquí para hablar, si lo que realmente quieres está aquí, entre mi piernas-

-Sabía que era una tontería venir- me doy la media vuelta y camino hacia la salida cuando me asalta por detrás sujetándome de tal manera que no puedo mover un músculo. -Suéltame, me estás lastimando- me coloca un vendaje en las manos que me hace parecer arrestado. Me avienta contra un escritorio y desabrocha mis pantalones.

-No mientas, si hasta te pusiste tu pantalón más apretado para mí. Vamos. ¡Dílo!, ¡dílo!, dime que me deseas- me grita al oído y me coloca una fuerte nalgada. Comienzo a llorar. -Oh no, no temas, yo estoy aquí para consolarte- me baja el calzón hasta las rodillas, se pone de cuclillas y me planta un beso en los glúteos. -¿hueles eso?- me dice por detrás con un tono bastante pervertido. -Es el delicioso aroma del deseo pidiendo ser satisfecho- se pone de pie nuevamente y baja su cierre dejando al aire su gigantesco pene que puedo ver inclinado desde mi posición. De pronto un rayo de esperanza aparece. Escucho abrirse las puertas del elevador y una luz blanca me ciega los ojos por un momento.

Antes de finalizar este capitulo quiero darle mil gracias a el autor de este nuevo capitulo MagicOL

Les agradeceria muchisimo que lo siguieran y le dieran un vistazo a su ultima historia

Les agradeceria muchisimo que lo siguieran y le dieran un vistazo a su ultima historia

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Sin nada más que decir, de nuevo gracias a magic, por este nuevo capitulo :D

50 sombras mas oscuras [yaoi] [gay] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora