Capitulo 19

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NOTA ANTES DE LEER:  Esta historia solo le faltan dos capítulos 20 y 21 mas un epilogo y finalizaremos con esta historia dando le prioridad a Eres mi luna.

Abdías

Dos semanas han pasado desde que exterminamos la amenaza de sublevación, y con ellas se fue el calor del acoplamiento. Tengo tanto por lo que sentirme contento. Ya poco a poco hemos eliminados nuestros enemigos, formamos grupos para que terminaran la obra, esas manadas que se aliaron a la de Hunter tenían que desaparecer para que no intentaran en un futuro cercano volver a levantarse contra nosotros.

Y las personas que tanto amo están a mi lado, mis suegros que siempre los he visto como unos padres, los más cercano que alguna vez alguien llego a mí. Zoe para mi es la hermanita que nunca imagine tener, estamos tratando de darle las mejores terapias para que pueda volver a hablar. Deseo tanto escuchar su tierna voz.

Mi Eli, mi luna es lo más hermoso que nunca me permití intentar pensar que podría estar con un ser tan bello y dulce. Pero nuestro amor estaba destinado, la diosa luna tenia nuestra historia de amor bien escrita y esperando el momento para comenzarla a redactar.

No quiero siquiera mirar atrás porque ese es mi pasado, un lugar donde no le deje cabida en mi vida a mi luna por la que ahora respiro.

Llegue a creer que era merecedor de todo el desprecio y odio que fui víctima, siento que las etapas de mi vida tuve que acelerarla para poder ser la persona fuerte que soy. Pensé que no era apto para recibir amor, si ni siquiera tuve el amor de mis padres. Me abandonaron en la puerta de una iglesia y nunca más me buscaron.

Soñaba con el día en que una mujer se presentara y me dijera que era su hijo, pero al pasar el tiempo comprendí que nunca sucedería. Deje de soñar con un mundo mejor.

Pero hoy quiero permitirme soñar, hay tantas cosas que deseo para mi vida. Comenzando con formalizar la relación con Elizaveta y en un futuro no muy lejano que podamos tener hijos. Nuestros hijos.

Miro el hermoso anillo que compre para mi luna, desde que lo vi supe que era para ella.

Apresuro a guardar el anillo en mi bolsillo cuando escucho la puerta abrirse y sé que es mi luna que entra llenando la estancia con su dulce olor que me enloquece.

- Mi amor, llego esta carta de Washington de una manada vecina de la del alfa Asher.- dice mientras me pasa la carta y se sienta en mi regazo. Arrugo el entrecejo.- ¿Que sucede amor?

- Qué es muy raro que envíen una carta, esas cosas formales siempre se hacen cuando hay un problema muy serio que se necesita mi presencia de emergencia.

- ¿En serio?- asiento.- ¿Pues qué esperas para abrirla? Si quieres me retiro para...

- Está bien la abriré. No es necesario eres mi luna, puedes saber lo que está sucediendo. Que espero no sea nada grave.

Rasgo el sobre y extraigo el papel desdoblándolo y procedo a leerlo. A medida que avanzo no doy crédito a lo que se estipula en este pedazo de hoja.

- No creo que eso sea cierto. Me huele a gato encerrado.- dice mientras me mira detenidamente.- creo debes de investigar antes de tomar alguna decisión.

- ¿Sabes? Tengo la misma sensación, conocimos a Asher y no puede ser que una persona pueda engañar a tantas personas. Además de la cordiabilidad que trata a sus hijos y sus hombres, además de los demás alfas como interactuaban con él.

- Sí, pero este Michael no se reporto ni para excusarse y mucho menos envío soldados. Es como si no le importara lo que sucediera y me parece sospechoso que ahora solicite tu presencia.- me detengo a analizar lo que dice mi luna y tiene toda la razón, que será eso que busca este sujeto.

- Llamare a Wen para que me averigüe todo lo necesario sobre este sujeto, algo dentro de mi me dice que él quiere perjudicar a Asher aunque no se aun porque.

Llamo a Wen pidiéndole urgentemente información, antes de siquiera contestarle al susodicho quiero saber con quién estamos entablando conversación.

- Amor.- me saca de mis pensamientos.

- Si mi luna.

- Nuestro vínculo aun no está completo.

- ¿De qué hablas?

- Que mi madre me dijo que los demonios tienen una forma particular de vincularse. Es casi como los hombres lobos pero es en esta vena que se llama amoris.- sostiene mi mano trazando la línea en mi dedo anular.- se debe hacer un pequeño corte en el dedo anular de los dos y chupar una pequeña porción de la sangre que conecta con el corazón. Para completar se debe decir la frase "Acepto ser tu cielo, tu amor y también tu infierno" y de esta manera el enlace funcionara.

- Es sencillo. ¿Pero por que el dedo anular? Que tiene de especial.

- Según mi madre es una creencia de que esta vena conecta con el corazón. Y que es la misma razón por la que se considera este dedo para llevar los anillos de boda.

- Entonces ¿cuando quieres que nos vinculemos?

- Enlacemos- me corrige.

- ¿No es lo mismo?- a mi percepción solo es un sinónimo.

- Jaja. Quiero que sea especial, no como nuestra marca que fue imprevisto y en un baño. – me paso la mano por el pelo recreando ese momento y si fui un completo salvaje pero quiero reivindicarme.

- Tienes razón mi vida, haré que este enlace sea memorable para ambos y que siempre recordemos con una boba sonrisa en nuestros labios.- su sonrisa es el combustible que mi cuerpo necesita.- Déjalo en mis manos.

- Te amo mi amor.

- Yo te amo más.

Lo que inicio como un inocente beso de confirmación a nuestras palabras, desato un creciente deseo que crepitaba como el fuego en una chimenea consumiendo la leña.

Nos dejamos llevar de esa sensación de querer sentir más cerca de lo que se podía nuestros cuerpos en llamas puras. Olvidando las tensiones, el trabajo abrumador de estas semanas y concentrándonos en sentir y desbordar ese amor que bulle desde lo más profundo de nuestros pensamientos.

Agotados y sudorosos yacemos en el sofá mientras nos abrazamos, justo en ese momento los dioses me iluminan depositándome justo esa brillante idea que buscaba.

Una cita con todo.

En el lugar donde nos unimos como un solo cuerpo. La cabaña.

Una cena romántica.

Un anillo.

Y el enlace.

Todo englobado da como resultado una noche inigualablemente mágica.

CelesteFer

EL REY PROMETIDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora