Tower of god oneshot's (en español)

La epopeya de la banana legendaria.

— ¡Tortuga, el gran Rak te jura que la banana legendaria existe! — escandalizó el cocodrilo, mientras discutía con Khun. Baam se limitaba a reírse.

— ¡Cómo va a existir tal cosa, cocodrilo! ¡No existe una banana legendaria! — le refutó, estresado por el comportamiento del cocodrilo.

— ¡Claro que existe! ¡Te contaré la leyenda! — anunció, y Khun bufó sabiendo lo que venía.

Hace mucho tiempo, miles de años, dentro de la torre, dicen que el rey Zahard sembró una cáscara de plátano, y de allí creció un árbol de plátano que tiene las bananas más deliciosas que han existido jamás.

— ¿Por qué carajo el rey Zahard plantaría un árbol de plátano? — preguntó Khun, enfadado.

— ¡Porque a todos nos gustan los plátanos, tortuga! ¡Desde una tortuga tonta como tú hasta el rey de las tortugas! — argumentó Rak, alegando — ¡Déjame continuar!

Muchos han intentado conseguir 1 sola banana de ese árbol de plátano, pero cuentan que está vigilado por ¡El monstruo de las bananas! Y que nadie ha podido vencerlo. ¡Pero yo, Rak WrathRaiser, la venceré y conseguiré el mayor tesoro de esta torre!

— ¡Dejen dormir, imbéciles! — sonó en la habitación de al lado la voz de Hatz.

— ¡Sí, no hay peor cosa para el cutis que la falta de sueño! — sonó la voz de la princesa Androssi desde el techo, en la habitación que estaba justo arriba de ellos.

— ¡Cállense todos, carajo! — desde la habitación del otro lado gritó Ran, impaciente.

— ¡Lo sentimos! — se disculpó Baam en nombre de los 3 en esa habitación.

— Eres demasiado bueno, tortuga negra. — se quejó Rak, pero Baam lo tomó como un halago.

— ¿Quién se supone que te contó esa tonta leyenda? — inquirió Khun.

— La tortuga Lesso, por supuesto. — respondió.

— Ahg, ese es otro idiota — comentó Khun —. Vámonos a dormir de una vez.

— Estoy de acuerdo. — acordó Baam, mientras se acomodaba en su cama. Khun fue a la suya propia después de apagar las luces, y Rak no tuvo de otra que hacer lo mismo y acostarse en su cama.

— Me pregunto por qué las paredes de este hotel son tan delgadas... — comentó Baam, para luego bostezar y dormirse.

Rak, por su lado estaba incómodo. En ese momento dormían de paso en el piso donde según la leyenda se encontraba la legendaria banana. Eso lo alteraba, pensando que jamás podría volver para alcanzar la banana.

¡Tenía que hacerlo por sí mismo!

Así que tan pronto como vio que era buen momento, salió de la habitación entre la oscuridad. Se movió entre el silencio del hotel mientras bajaba por las escaleras, calentando para cuando tuviera que enfrentarse con el gran monstruo banana.

— Al fin un digno oponente. — pensó, mientras salía del hotel.

De repente, toda la calle que estaba frente al hotel desapareció y se convirtió en un montón de escaleras que llegaban a lo más alto de una gloriosa montaña. El instinto de bestia de Rak le dijo que su objetivo estaba en lo alto de esa montaña.

Pero antes debía pasar por ciertos enemigos.

Repentinamente, a su lado apareció una... ¿Cocodrilo?

Era básicamente una misma criatura que Rak, pero en versión femenina. Con versión femenina me refiero a que tenía cabello rubio y los labios pintados de rojo, mientras su cara tenía maquillaje.