Madison Lawrence
Había llegado a casa, después de tener que soportar a todos en el colegio realmente estaba exhausta. Aunque al llegar a casa la cosa no cambiaba demasiado.
Mi madre estaba tirada sobre el sofá de su cuarto, con jeringuillas al su alrededor "droga", ella consumía desde que tengo memoria.
Nueve años atrás
- ¡Estoy harta de ti! ¡No te soporto más hago el esfuerzo por ella, pero tu siempre vuelves a acostarte con la misma mujer! -dice mi madre, llorando no era la primera vez que los veía discutiendo.
Mi madre ni siquiera le deja responder, sale corriendo antes de que el le dijera algo.
La sigo, ella está inhalando pequeña linea blanca, parece azucar. ¿Por qué ella lo absorbe? Según mi abuela el azucar en muchas cantidades es malo y no quiero que ha mi madre le pase nada.
Una tos hace que salga de mis pensamientos, me acerco a ella despacio y la sacudo para ver si no le ha pasado nada. La muevo ligeramente y ella empieza a despertar.
- Madi es tu padre, el estaba con alguien más- Su voz sale ligeramente ronca.
La levanto, y ella me abraza
-Madi cariño, siento tanto comportarme así...pero es que no puedo más-
- Esta bien madre, no te preocupes por mí estoy bien- Le digo.
Llevo a mi madre a su dormitorio, le saco cuidadosamente la ropa hasta dejarla en ropa interior para poder bañarla. Después de hacerlo la dejo durmiendo, y me voy al patio.
Estoy cavando una tumba, tan grande que probablemente entre una persona. Pero aún no meto a nadie, solo lo he probado con animales. Realmente he pensado que se sentiría matar a alguien.
Voy hacía mi dormitorio después de matar a unos cuantos ratones, en esta casa hay muchos de ellos. Y la verdad ya me hacía falta
Escucho unos pequeños gemidos que vienen del baño, y no hace falta que vea quien es por que lo se exactamente.
Ruedo los ojos mientras me encierro en el dormitorio, cojo mis audífonos y me voy sumergiendo en un profundo sueño.
••••••
Camino por los pasillos, está lleno de gente y ellos no dejan de mirarme como si fuera un ¿extraterrestre? Si es la palabra indicada.
Voy directo a mi casillero, y me doy cuenta que esta al lado del chico callado Andrew.
- ¿Qué? Tengo algo en la cara para que me mires de esa forma- Le digo.
- Que te hace pensar que te estoy viendo a ti-
Probablemente por que tiene su mirada puesta en mi.
- Realmente no me importa así que....- Antes de haber terminado la frase se ha marchado.
Reviso mi horario y la primera clase que me toca es Ciencias, me quedo un rato pensando si debería ir o no. Al final decido ir a divertirme un rato.
Ya en la clase la Sra. Jackson, empieza a explicar el tema sobre las células.
-Y bien chicos haremos un trabajo en grupo -Toda la clase empieza a celebrar- pero las parejas la haré yo así que no se emocionen
Empieza a dictar los nombres de las parejas hasta que llega al mío
- Madison Lawrence con Sophie James-
Mire a la chica que la Sra. Jackson había nombrado. Era pequeña rubia y con unas gafas que le cubrían toda la cara.
- Podría hacer el trabajo yo sola.
Vi que la rubia había bajado la cabeza haciendo un puchero
- Lo siento Madison pero el trabajo es para todos.
Asenti rodando los ojos.
Ya era el almuerzo y estaba planteándome ir a comer al baño la chica pelirroja no dejaba de verme, y ha eso le sumamos la mirada de los otros tres chicos.
- Emmm hola - alcé la mirada y vi los ojos de la chica rubia
- ¿Qué?
- Yo venía a preguntarte si podríamos hacer el trabajo en tu casa - dijo rascándose la nuca
- En mi casa no - respondí
No quería que viera a mi madre drogada y a mi padre teniendo sexo en la sala de estar.
- Si...claro yo...pensaba que podríamos hacerla, en la tuya ya sabes de seguro estás sola y tus padres son tan geniales que te dejaron la casa sola- dijo.
Pero esta chica que series había visto para decirme eso. Antes de que volviera ha abrir la boca le hundí la cabeza en la sopa que me habían dado en el comedor. Aguante la respiración al igual que ella.
Sentí que alguien me agarraba la mano, abrí los ojos y me di cuenta de que era Andrew.
Y su padre el director estaba detrás de él.