Prólogo.

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No podía evitarlo. Evocar su recuerdo se convirtió en una costumbre. No podía evitar recordar su cabello pelirrojo, sus ojos azules, sus pecas, su tan perfecto aroma de Lirio y Nardo.

Creí que con los meses su recuerdo sería inexistente. Que equivocado estaba.

Sadie Sink, volveré a verte y no pude superarte. Y sinceramente espero y tú no lo hayas hecho tampoco.

Amor sin límites. -FADIE.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora