Vll

3.3K 364 160
                                    

Fue deshaciendo lentamente el agarre sobre los hombros de Itachi al darse cuenta de lo que había hecho. Los labios de Itachi se movían suavemente sobre los suyos, y lo peor de todo era que…lo estaba disfrutando

-"Quítate"- Naruto lo apartó sumamente avergonzado. No quiso mirar atrás, ya no le importaba si la profesora regresaba pronto. Por segunda ocasión escuchó las múltiples ovaciones, esta vez del grupo. Incluso algunos aplausos. Su rostro ardía excesivamente. Trató de convencerse de que solo fue un impulso, un arrebato en conjunto con los nervios que ya lo venían atormentando desde que se enterara que tenía que ir al salón de Itachi

Salió a toda carrera del salón, derrapando al dar vuelta en el pasillo. Recordó la nota de Deidara y se debatió mentalmente entre regresar a dársela o simplemente huir como actualmente estaba haciendo, nunca se había sentido tan confundido como ahora

Decidió armarse de valor, fingir que no había pasado nada. Si tan solo tuviera un hermano gemelo al cual adjudicarle esos tropiezos

El salón era un completo desastre cuando finalmente Naruto se decidió a devolverse sobre sus pasos. Había varias bolas de papel en el suelo. La mayoría de los estudiantes estaban de pie, algunos conversaban y otros tantos se dedicaban a hacer más grande el escándalo dentro del aula

-¡Eh!, comadreja, ya volvió tu pasiva- rió Hidan, señalando hacia la puerta. Naruto desvió la mirada para buscar a Itachi. De no ser por el alboroto, le habría roto la nariz a ese estúpido, así lo suspendieran un mes completito

-Naruto- Sasori se abrió paso entre sus compañeros pero antes de que pudiera interceptar al chico rubio, Itachi ya estaba frente a él. Aspiró derrotado, necesitaba acercarse a Naruto, Itachi tenía mucha más ventaja ahora. Tal vez podría convencerlo de que desistiera en conquistar a Naruto con el tema de la graduación. Aunque sabía de antemano que eso no era ningún impedimento para Itachi, su amigo vivía frente al instituto, en una casa bastante grande y acogedora. Como olvidar todas esas veces que se reunían con los demás miembros de Akatsuki para realizar los proyectos más complejos de la clase de ciencias

Lo más prudente era mantener distancia, al menos de momento, hasta que encontrara la manera de acercarse a Naruto evadiendo cuestiones conflictivas con su compañero

-¿Podemos hablar ahora?- quiso saber Itachi, viendo fijamente los brillantes ojos azules, no se arrepentía en lo absoluto de haberlo besado. Volvería a hacerlo una y mil veces más, claro que en un lugar más propio y reservado

Naruto negó lentamente con la cabeza, sin terminar de convencerse a sí mismo. Ahora deseaba hablar con Itachi, dejarle en claro el interés que su amigo sentía por él. Aunque, en el fondo…no quería decírselo

-Mi amigo me pidió que te lo entregara- murmuró, mirando a un lado. Itachi alzó una ceja al recibir el diminuto papel arrugado. –A él le…- hizo una pausa, forzándose a continuar. –Le gustas- apenas terminó la frase, volvió a alzar la mirada. Itachi le restó interés a su comentario mientras se disponía a desdoblar el pequeño trozo de papel, su expresión no se alteró ni un ápice y aquello no hizo más que molestar a Naruto

-Bien, dile que le agradezco el extraño interés en mi persona- masculló Itachi releyendo el corto párrafo sobre la hoja. –Pero a mí me…

-"Perdón por el retraso"- comentó shizune, entrando a toda prisa al salón. Los alumnos tomaron asiento tan pronto la vieron atravesar la puerta

Naruto se abstuvo de preguntarle qué era lo que decía el papelito. No le incumbía pero sentía una necesidad casi vital por saberlo. De pronto se arrepintió de haberle confesado a Itachi el secreto de su amigo, aquel que lo llevo a seguirlo hasta su casa y no tuvo el valor para decirlo en su momento

Amor de cristal.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora