Capitulo especial dedicado a persefoneartemis, nuevamente espero que te guste, perdón de nuevo por la tardanza disculpame TwT
"Consuelo..."
–¿Amor? ¿Hola? Tierra llamando a la diosa del amor, ¿Sigues ahí?–preguntaba la creadora de la medicina, pasando su mano frente a los ojos de su amiga la cuál apenas despertaba de su ensoñación.
–Oh si, perdón que...¿Que decías médico?–pregunto algo embobada la pequeña morena, sin despegar su mirada de un punto en específico, este al parecer ubicado justo a la derecha de la mesa en la que ambas se encontraban tomando una taza de té, la azabache volteo hacia donde su mejor amiga miraba y con cierto disgusto volvió a mirar a la albina enfrente suyo, la cuál tenía plasmada en el rostro una sonrisita algo boba, mientras que sus pupilas se encontraban bastante dilatas y brillando ecsecivamente.
–Amor demonios, si vas a seguir así preferiría que te paras de una maldita vez y ya le declararás lo que sientes a ese jodido poste viviente–soltó bruscamente la de mecha verde para seguido beber un poco del té negro que habían preparado los cupidos. Sin embargo esa declaración logro sacar de su hipnosis a la menor, la cuál en unos segundos ya se encontraba sonrojada hasta las orejas y miraba avergonzada a su acompañante.
–Lo siento médico, enserio perdón, pero tú muy bien sabes que cada vez que trato de decirle lo que siento algo nos interrumpe–menciono la menor mientras comenzaba a comer un pastelillo glaceado.
–Yo diría que alguien–nuevamente dejo caer de golpe la azabache–el que Vida aparezca cada vez que lo intentes me parece inusual, ¿no lo crees?–la albina soltó un ligero suspiro y volteó de nuevo a mirar hacia su derecha, donde nuestro querido Dios de la muerte se encontraba charlando amenamente con Sabiduría, desde que las cosas se arreglaron acerca de que Vida ya no rechazaba al joven de ojos ámbar todo se calmo, sin embargo el más alto decidió guardar distancia con su contraparte, de alguna manera el hecho de que en inicio Vida no lo quisiera ni un poco cerca, lo lastimo tanto como para tomar tan impactante desición.
–¿Crees que...¿Crees qué Muerte aún ame a Vida?–interrogo la pequeña albina a la mayor, que con algo de dolor le miraba, era la Diosa del amor, pero hasta ella había caído ante los pies del propio sentimiento que está misma manejaba, pero parecía que las cosas no eran tan simples.
–No lo sé, pero el riesgo es algo que se debe de tomar para lograr algo, intenta hablar con él–sugirió Médico, mientras Amor regresaba a mirarla con unas pocas lágrimas que comenzaban a inundar sus ojos, lo cual el partió el corazón a la mayor–es que...es que ya no a querido reunirse conmigo a tomar el té–su voz comenzaba a entrecortarse poco a poco– y tampoco me mi-mira a los ojos cuando lo...lo saludo, no se que sea lo que siente, no sé si acaso fui tan obvia, y...y él no siente lo mismo, pero prefiere ser sutil con su respuesta por no querer lastimarme–la voz de la menor se quebró completamente al terminar de decir lo que pensaba, la azabache hiba a levantarse a consolar a la más pequeña, pero cuando decidió levantarse alguien ya estaba al lado de la menor mirándole con suma preocupación.
–A-Amor ¿Te encuentras bien?–pregunto evidentemente preocupado Muerte, al mismo tiempo que se ponía a la altura de la pequeña Diosa, incandose a su lado, miren nada más, hablando del Rey de Roma y el que se asoma.
La menor volteó a mirar a él mayor y algo sonrojada al ver la cercanía entre ellos seco sus ojos con delicadeza–s-si solo me me mordí la lengua al comerme un pastelillo–se excuso la menor, pera después comprobar lo que dijo, aunque no sea esa la razón por la que llore, al mostrar su mano izquierda que sostenía el pastelillo con glass y algo de chocolate rebanado encima, al ver eso el de mecha ambarina soltó un ligero suspiro, sinceramente no le sorprendió que fuera eso la "supuesta" razón por la que la pequeña chica estuviera llorando, ya que en ocasiones era realmente torpe, pero esa torpeza solo la hacia ver más adorable a los ojos de nuestro querido poste vivi- ejem perdón del palo andan- cof cof ya ya perdón me equivoqué de nuestro querido Muerte.
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¡No soy tuyo! ¡Ni de nadie! AMOLAD
Fanfiction-¡Aléjate de mi! ¡no te me acerques!-decia o más bien gritaba aquel chico de ojos ámbar a su "contrincante" de piel acanelada, el cual solo le miraba sobándose una mejilla algo extrañado. -¡Oye! Tranquilo no te voy a hacer daño, si fuera así ya te h...