—¿A quien creen que bese Osorio? —cuestiona María mientras nos observaba. Tiene ligeras manchas de pintura por su cara y ropa, habíamos tenido una pelea que había comenzado Diego, mi cabello era un desastre y que decir de mis mejillas.
Nos encontrábamos en casa de María terminando de pintar el puesto el era de un olor rojo y en letras doradas con luces blancas decía "Stand de besos" según Azul sonaría más cool y sería hacerse notar, nadie protesto. En mi opinión, se me hacía algo ridículo.
Pero algo que no podía dejar pasar era la insistencia que demostraba María con respecto a Emilio ¿Qué le importaba si iba o no? Me abrumaba de sobremanera.
—No lo sé, tengo entendido que no le gusta nadie —responde Diego sonando casual —Tuve oportunidad de charlar con su hermana hace unos días lo cual es raro —hace una mueca —No se como llegamos al tema de Marcos pero me dijo que estaba disponible pero no para cualquiera —suspira—. En fin, no creo que se vea interesado en asistir al puesto si alguien no me llama la atención.
—¿Por qué? —cuestiona Melissa frunciendo el ceño —No le veo nada de malo, aparte todos los alumnos están invitados —mezcla un poco de pintura de la acuarela que tiene en sus manos—. Hay un rumor de que Roy si asistirá, debo admitir que ese grupito me interesa —sonríe socarrona.
—No se por que les interesa tanto —bufa Azul —Si van o no, es su problema no el nuestro —niega con la cabeza—. Es mejor que no se hagan ilusiones chicas —mira en dirección donde esta María y a Melissa.
—Emilio ira —afirma María un poco molesta —Ira por que yo estaré ahí —Diego se ríe y ella lo fulmina con la mirada—. Ya lo verán.
—Cortalo —dice Diego mientras sigue riendo—. Tal vez vaya pero no por ti.
—¿Tu que sabes? —masculla furiosa.
—¿Tu que opinas? —me pregunta Andrés ignorando la pelea que se estaba comenzando a crear, ha estado igual de callado que yo desde que empezó este dilema estúpido pero de inmediato todos me miran.
—No tengo nada que decir, si va o no me da igual.
Continuó con mi labor de colocar bien las luces, todos se miran entre sí y no dicen nada más, no tengo tiempo de quemarme la cabeza pensando en Emilio besando a alguien más.
No después de que ayer me haya cancelado nuestra ida al cine por ir con Isis al zoológico, fue tan extraño en la manera que me trató que llegue a pensar que estaba enojado ¿Pero por qué? Pude notar que se estaba comportando distante y me dolió, me dolió demasiado.
Cuando me lo dijo quise llorar, quise gritar y quise borrarle la sonrisa a la estúpida de Isis que se encontraba detrás de Emilio.
Por un momento llegué a creer en Romina pero que iba a saber ella si era una niña.
[...]
Estoy frente a mi casa después de terminar el puesto de besos en casa de María, ya esta todo listo solo falta esperar el día en que llevaremos acabo el proyecto. Me encuentro ansioso más por que Azul nos hizo saber que varios grupos le habían confirmado su asistencia.
Cruzo la puerta y mi mamá se acerca a paso veloz hacia mi, me tenso de inmediato.
—¡Emilio esta aquí! —susurra eufórica —Ya lleva 2 horas esperándote —sonríe—. Creo que es algo importante.
Oh por dios.
—¿Dónde está? —murmuró nervioso.
—En la sala, yo los dejó solos y actúa normal —dice con la misma sonrisa de antes y se aleja por el pasillo, mi mamá sabe lo mucho que Emilio me gusta y se que está feliz por mi.
Mis manos tiemblan, mis piernas flaquean pero me obligó a caminar lo más casual posible, cuando llego a la sala observó que Emilio está sentado en uno de los sofá y automáticamente mira en mi dirección, no puedo descifrar su mirada así que solo me lamo los labios.
—¿Hola? —mi voz sale fría y me encuentro sorprendido.
—Hola —saluda tímido, palmea el lugar que queda a su lado y rápidamente me siento ahí.
—¿Qué pasa? —pregunto, estamos tan cerca que puedo sentir su perfume el cual es mi favorito.
—Quiero disculparme por mi actitud idiota de la otra vez, no lo merecías Joaquín es solo que... —hace una pausa, se muerde el labio —Es solo que me dijeron algunas cosas —me mira a los ojos y me pierdo un momento en los suyos—. Es por eso que decidí venir para saberlo de tu propia boca.
Frunzo el ceño.
—¿Qué te dijeron? —cuestióno algo preocupado.
—Qué te gusta Diego y qué sólo me hablabas por lástima —susurra lento, abro la boca y la cierro puedo notar el conflicto que trae.
—¿Quien te dijo eso? —estoy demasiado furioso, sea quien se lo haya dicho ¡¿En qué diablos estaba pensando esa persona?!
—Lo de Diego me lo dijo María —admite cabizbajo—. Lo de que me hablas por lástima me lo dijo Isis —comienza a jugar con sus manos.
¡Desgraciada oxigenada! ¡¿Y que cual era el problema de Maria para inventar ese chisme?!
—Emilio —me atrevo a tomar su quijada para obligarlo a verme a los ojos, mi piel quema por su contacto —Me caes muy bien, no te hablo por lástima me encanta pasar tiempo contigo y sobre lo de Diego... —me muerdo el labio, siento que en cualquier momento me va a sangrar—. Igual es mentira ¡Es mi amigo! Diego está interesado en alguien, pero no en mi.
Parece relajarse, su cara se suaviza.
—Tú me importas mucho Joaquín —sus mejillas de ruborizan —Eres la persona más hermosa que he conocido jamás —mi corazón comienza a latir con fuerza—. Tu compañía es maravillosa.
—Gracias Emilio —sonrió—. Pienso lo mismo de ti, pensé que no querías verme nunca más.
—No podría —admite mientras una risita se le escapa —Es por eso que he venido por mi cuenta, me atormentaba el hecho de que no te gustará hablarme o que estuvieras con alguien que no... —traga en seco—. Tu entiendes.
—No, no lo hago —nos miramos a los ojos por unos largos minutos.
—Joaquín, tu me...
—¡Emilio! —grita Ren eufórica y lo abraza, me separó abruptamente ya que Ren comienza a dar pequeños saltos sobre él.
—¡Tan preciosa e inoportuna! —grita Emilio mientras sonríe con Ren en brazos.
Emilio me mira por un momento y se acerca demasiado que solo cierro los ojos. Deposita un beso en mi mejilla.
Mi tapó la cara con mis manos, apuesto a que parezco un tomate en estos momentos.
—¡A Joaco le gusta Emilio! —chilla Ren, Emilio suelta una carcajada—. ¡Y a Emilio le gusta Joaqu... —le tapa la boca y Ren comienza a retorcerse de la alegría.
—Callate Renacuajo —dice Emilio mientras comienza a hacerle cosquillas.
No puedo evitar sonreír, suspiro y me siento demasiado feliz. Estoy feliz por tener a Emilio en mi vida.
...
Se gustan, dig0Ahrre con la que barre. ❤️😂
En multimedia deje un edit que me hizo una chica y me encanto demasiado, es la primera vez que alguien me hace un edit de una de mis historias y lo aprecio mucho ¡muchas gracias corazón! ❤️🙊
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Puesto de Besos [Emiliaco]
FanfictionDonde Joaquín y sus amigos necesitan crear un proyecto grupal único e inolvidable.