Poco tiempo después del anuncio llegaron camiones enormes llenos de militares vestidos de blanco, se hacen llamar Agentes de La Paz. Érica, la alcadesa del Distrito 12, ha ido a las casas de los futuros tributos. Nuestra casa no es de las más pequeñas del distrito. Tenemos suerte ya que a mamá le pagan bien por dar clases, ya sea con comida, materiales o dinero. Papá trabaja en la mina por las mañana y de sastre por las tardes, siempre se le ha dado bien coser. Creo que somos de las personas más adineradas del distrito (sin tener apenas nada aún así) porque no gastamos mucho del dinero que ganamos, la ropa la hace papá y la comida esencial la usan los vecinos para pagar a mamá, así que lo más caro está cubierto.
Desde el anuncio de los Primero Juegos del Hambre no nos hemos movido del sofá, nadie quiere hablar ni moverse. El silencio es aterrador, hasta que Érica lo rompe llamando a la puerta:- Yo abro - Dice Johan.
La alcadesa es una mujer muy delgada y pequeña. Sus origenes están en el Distrito 11, dicen que a su tía la mataron en los Juegos cuando tenía tan solo 12 años. El tío Finnick me contó que se llamaba Rue, era muy dulce y mi abuela no superó nunca su muerte. Los diferentes acontecimientos ocurridos en los 64 Juegos del Hambre fueron los causantes de la revolución de los distritos, creo que lo que más miedo me da de todo esto es que esperen de mi hermano o de mí que seamos una figura importante como la abuela Katniss. Lo cual también podría asegurarnos la muerte por razones obvias.
- ¿Cómo estáis familia?
Mi madre sigue teniendo lágrimas que recorren sus mejillas.
- Lo siento, no debería preguntar estupideces, está claro que ninguno estamos bien.
Érica es tremendamente sincera, además bastante mal hablada. Es raro que no diga una mala palabra en casa frase. Pero lo que le ha hecho llegar a ser la líder del distrito es su habilidad de conectar con la personas, es la persona más empática del mundo.
Johan es el primero que se atreve a hablar:
- ¿Érica que va a pasar ahora?
- Johan todo está muy confuso. Sois veintidos familias las que cumplís con los requisitos de los juegos. Nueve de ellas tienen hermanos de entre 12 y 18 años. En la urna masculina van haber tan solo veinticinco nombres. Las chicas son casi el doble. Se nota que en este distrito las familias no paran de tener hijos hasta tener un hombre que gane dinero en las minas.Johan me mira de reojo. Puedo leer perfectamente su pensamiento, estará diciendo algo como "genial, id ahorrando para un par de féretros".
Papá y mamá siguen hablando con Érica, mientras Johan y yo nos vamos a la calle, creo que tomar el aire nos vendrá bien a ambos.- ¿Crees que nos vamos a librar de esta? - Me atrevo a preguntar.
- Claro Cinna, en mis planes no entra morir entreteniendo a cuatro ricos.Johan dice siempre lo que piensa, nunca regala los oídos y eso le ha traído problemas en el distrito. Varias veces a llegado a casa con el labio partido o un ojo morado, sobre todo por defender a su amigo.
- ¿Te gusta ese chico Johan, el tal Alex?
- ¿Qué? No Cinna, es mi amigo. Soy un chico solitario, no quiero novios ahora mismo, ni novias. No es mi estilo.Hemos llegado a la plaza, están montando una gran pantalla y todo el distrito está lleno de cámaras de televisión, equipos de sonido y Agentes de la Paz. La pantalla se enciende y aparece un contador regresivo:
"18 horas para la cosecha"
- Parece que mañana saldremos de dudas enano. Vamos a casa, no quiero meterme en problemas antes de tiempo.
En casa escuchamos a Érica aún en el salón:
- Me han dicho que seré la mentora de los chicos, no estoy preparada para ver morir a 4 jóvenes todos los años durante el resto de mi vida. Mira como acabó Haymitch, como acabaron los de mi distrito. No quiero verme con 60 años alcohólica, depresiva y drogadicta.
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LOS JUEGOS DEL HAMBRE: EL FUEGO SIEMPRE SE REAVIVA
Genç Kurgu47 años después de la rebelión del Sinsajo, Marie Snow consigue la presidencia de Panem. Nadie esperaba que la dulce nieta de Coriolanus Snow fuera más despiadada que su abuelo, regresando los temidos Juegos del Hambre.