Sunshine CTH Terminada

Extra

Mi pulso se aceleraba por cada segundo que pasaba. Las luces estaban apagadas y el intro de Babylon comenzó a sonar haciendo que el bello en mi cuello se erice. Comencé a gritar con euforia al igual que todo el público presente. Mis ojos estaban llenos de lágrimas para cuando ellos aparecieron. Mi vista se nubló y no pude dejar de gritar y llorar cuando él apareció justo en frente de mí. Comenzamos a cantar las canciones, era tan emocionante estar aquí hoy junto con Jeanin. Ella por su parte no paraba de gritar hacia Luke.

Cuando Luke empezó a hablar yo no pude evitar que mi vista fuera hasta el ángel frente a mí. Era tan irreal que él fuera de verdad y estuviera ahí. Pero jamás me imaginé que él fuera capaz de mirarme, le sonreí sin saber qué más hacer. Aunque él no lo supiera era la luz de mis ojos y la razón por la cual yo seguía con vida y el que me notara ahora era el mayor logro que iba a tener en mí vida.

Estaba tan aturdida y tan emocionada por el concierto que no paraba de llorar, cantar y gritar.

"¿QUIÉN QUIERE BESAR A CALUM?"

Cuando Michael preguntó eso yo simplemente pude levantar la mano mientras sonreía en su dirección, tal vez fue idea mía pero yo sentía que había logrado captar su atención. Tal vez estaba algo incómodo de que su primera visión sea una chica con los mocos por afuera.

Apenas sí me di cuenta cuando Andy llegó a mi lado. Se acercó directamente a mi y habló.

-Disculpa, mi torpe amigo de ahí arriba- señaló hacia Calum- me pregunta sí puedes darle algo con lo que pueda él contactarte

Me quedé petrificada. ¿QUÉ? ¿ACASO ERA UNA BROMA? Jeanin dio un golpe en mi hombro y yo reaccioné mientras asentía con la cabeza. Andy me dió un papel y un bolígrafo en dónde escribí mi número de teléfono.

Andy se fue y yo pude sentir la mirada de todas las chicas presentes.

-Acabas de ocasionar drama- me dijo Jeanin

La miré, una sonrisa se me escapó de labios y me encogí de hombros

-Mas vale que valga la pena.

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Intenten imaginar cómo fue para mí el saber que nadie sabía quién era la chica a la que le había pedido Calum el número de teléfono. En parte era un alivio así no tenía que soportar drama.

Pero imaginen como fue para mí el que él decidiera hablar conmigo. Todo mi cuerpo temblaba de adrenalina durante los mensajes, parecía una broma muy pesada, pero sin duda lo disfrutaba.

Sucedieron las primeras llamadas, él y yo teníamos demasiada frustración y se notaba. El hecho de saber que yo podría tener una oportunidad en su cama no hacía más que despertar mis deseos de poder besarlo y ¿Por qué no? Tal vez tener un buen polvo. Eso era lo único que él mostraba más cuando hablábamos, yo a veces le cambiaba de tema para saber sí era capaz de aguantar la frustración. Pero por dentro deseaba tanto cómo él ese encuentro.

En casa era todo un caos, Josh, mi ex novio, había estado abusando de mi en constantes situaciones, aún después de ya haber terminado meses atrás, haciendo que mi autoestima decayera y mis ataques de ansiedad subieran. Cuando finalmente tuve el valor para hablar al respecto y demandarlo él salió ileso y me culparon a mi por el tipo de ropa que vestía. Todos estaban en mi contra, así que lo que hice fue intentar terminar con todo. Pero fallé en el intento y estuve internada en el hospital por días.

Al despertar me di cuenta de la cantidad de veces que Calum intentó contactarme así como el hecho de que habían aceptado mi solicitud a un concurso de literatura. Atendí primero a mi ángel. Él pensó que me había enojado lo que había dicho en una entrevista, pero por el tiempo que habíamos hablado lo conocía un poco, lo suficiente, como para saber que solo lo había hecho para no arriesgarme al odio.