Corazón de piedra [Y.M Fem]

♦5♦

Todo el resto del día me daban enormes ganas de arrojar la dona del cabello a la basura y desmaquillarme pero no le daría ese gusto de que me viera destruida.

En el camino a casa solté mi cabello y talle mis labios hasta que estuvieran rojos pero sin pintura.
Del rímel mis lágrimas se encargaron de arruinarlo.

Estaba en mi habitación escuchando canciones de One Ok Rock, no sé por qué cuando me sentía triste me gustaba escucharlos.

—Tal vez debería dejar de intentarlo.

El ruido de algo golpeando mi ventana me sacó de mis deprimentes pensamientos sobre cortar mis venas con galletas de animalitos.

Me levanté asomando mi rostro cuando me da una piedra en el ojo.

—¡Ah mierda!

—Lo siento,lo siento, lo siento.

Puse de forma instantánea mis manos en mi ojo golpeado y con el sano mire al culpable, era Jungkook.

—¿Qué carajos, kook?

—Noona disculpe, vine hablar con usted.

—¿Y por qué no llamaste a la puerta como la gente normal?

—No lo sé.

—Este niño.

Suspiré y baje para poder abrir la puerta.

—Jungkooooook

Él se puse en mi vista con una sonrisa apenada.

—Noona en verdad lo siento.

—Sí, sí. Como digas, pasa.

Lo deje entrar y ambos tomamos asiento en la sala.

—Ah...

Lo mire con una ceja alzada.

—¿Qué?

—Se ve muy... Mal.

—Me arrojaste una piedra en el ojo ¿qué esperabas?

—Am no creo que sólo sea eso. Su cabello es un desastre, tiene rastros de lágrimas y lo digo por el rímel todo corrido. Más el rojo en su ojo por la piedra.

Mierda.

—Ah es que verás, me puse a escuchar música sad.

—¿Y por qué?

—Pues porque tenía ganas(?

—¿Y por qué?

—Pues porque sí.

—¿Y por-

—¡Ay ya! Niño no seas enfadoso-. Ambos empezamos a reír.

—Noona es que se veía muy mal al salir de la escuela, todos notamos que estaba triste.

—Ah son cosas tontas.

—Jimin nos dijo lo que pasó. Lo que sucede es que decidimos reunirnos pero usted ya no estaba cuando íbamos a invitarla. Así que mientras caminamos a su casa hablamos sobre lo que pudo pasar para que se fuera así sin despedirse, Jimin nos contó lo que dijo. ¿Fue eso?-. Dijo apenado.

—Mmm sí. Me sentí mal por lo que me dijo. Es algo tonto ya lo sé pero soy un poco insegura, sabes.

—Lo entiendo, Noona.

—Y pues eso.

—Bueno pero ¿No irá? Los demás están aqui a la vuelta esperando.

Hice un ruidito mientras pensaba si ir o no. Tenía que limpiarme la cara y luego aguantarme la vergüenza.