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Después de unos minutos más dándose besos, ambas bajaron, algunos seguían bailando, bebiendo y jugando.

Y bueno, YoonJi se la pasó escondiéndose de sus ex's y Jimin nadas más riéndose de ella.

Al final, Jimin se quedó junto a los chicos a ayudarle a Yoon a recoger un poco la casa, luego de eso ambas quedaron solas después de que sus amigos se fueran.

—¿De verdad estaría bien quedarme?

—Claro que sí, preciosa.

Sonrio besando su sonrojada mejilla mientras le pasaba una pijama.

—Bueno, Unnie.

—Debo admitir que amo que me llames así-.La pequeña río.

—Pues eres mi mayor.

—No parecías respetarme antes, Jiminnie-. Le dijo en tono burlesco.

—Sí, pues sucede que ahora somos amigas.

—¿Que se besan?

—Yah~ no hables de eso-. Desvió la mirada sonrojada.

—De acuerdo, ven a dormir-. Río.

La pequeña rubia se acosto a su lado tímidamente.

—Puedes abrazarme si quieres, de ninguna manera me molestaría eso.

Negó sonrojada, pero aún así Yoon se acercó a ella y la abrazo de los hombros, haciendo que la rubia escondiera su cara en el cuello de su "amiga."

—U-Uh estoy demasiado avergonzada.

—Y yo demasiado feliz.

La rubia salió de su escondite y la miró con ojitos brillantes.

—¿Feliz?

—Sí, por fin llegué a ti y hasta me das besitos.

Jimin sonrió sonrojada.

—Unnie... Tal vez sí me gustas pero me da miedo.

—¿Quieres hablar de ello, bebé?-. Recorrió un rubio mechón tras la bonita orejita de su pequeña.

—Mmm no...

—Lo entiendo, no te voy a presionar.

—Unnie... Mi ex pareja fue un asco.

—Me lo imaginé.

—Pero de verdad un asco-. Sus ojos se llenaron de lágrimas.

—¿Quieres que le parta la cara?

—No, él te hará daño-. Sollozo.—Por eso no quiero que nadie se entere de esto.

—No puede hacerme daño, no se lo voy a permitir. Ni tampoco que te lo siga haciendo a ti.

—Yo ya estoy bien, no he estado cerca de él de nuevo.

—Mmm bueno me refiero a que te sigues sintiendo mal y creo que no estás bien, sabes a qué me refiero.

—He ido a terapias... Pero aún me cuesta trabajo.

—¿Fue tan malo? Lo que te hizo...

Ella asintió lentamente.

—Lo odiarias.

—Todavia no sé que te hizo pero ya tengo ganas de partirle la cara.

Jimin rio negando y se acomodo en el pecho de su Unnie.

Si su bonita rubia no le decía nada, ella se encargaría de encontrar respuestas. A como diera lugar.

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Corazón de piedra [Y.M Fem]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora