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-PUTA MADRE KYLIE QUE HICISTE-Grito realmente furioso.

Comenzó a darme de cachetadas.

-SABIA QUE NO DEBIA CONFIAR EN TI, ESTO TE SALDRA MUY CARO

-Basta Christopher-Dije entre lágrimas-Mi papá ya viene por mi, déjame ir, vete y déjame aquí, la policía junto con mi padre llegarán en cualquier momento...

-No mi Reyna, tu vienes conmigo, pero óyeme bien Kylie, está me la pagarás caro

Chris se metió al clóset y saco cinta.

Se acercó a mi y comenzó a atarme los pies y manos.

-NOOOOO, POR FAVOR CHRIS

Me dejó acostada en la cama, yo solamente lloraba mientras veía como sacaba sus cosas más importantes de la habitación, el era inteligente.

Intentaba no dejar ningún solo rastro de nosotros.

-Por favor papá, llega pronto-Dije entre lágrimas.

Después de varios minutos Chris regreso y me tomo en brazos.

-Preparate Kylie, lo peor aún está por venir-Dijo mientras me ponía en el asiento trasero del auto.

El continúo y siguió subiendo cosas.

El tomó su celular y se paró frente al auto, en realidad no sabía a quién llamaba.

Segundos después regreso con Dodger y lo subió al asiento del copiloto.

-Espero que estés feliz-Dijo subiendo al auto.

-Por favor Chris-Dije entre lágrimas.

-YA CÁLLATE

Me sentía pésimo, me sentía de lo peor.

Chris encendió el auto y arrancó.

ESTABA TAN CERCA DE ESTAR EN LOS BRAZOS DE MI PADRE, TODO ME SALIA MAL.

MI VIDA ESTABA DESTINADA A DESTRUIRSE EN MANOS DE CHRIS EVANS.

Lloraba sin control, esto era horrible.

Condujo hasta una tienda.

Se detuvo y volteo a verme.

-Dejame ir Chris, por favor-Dije entre lágrimas.

El corto un pedazo de cinta y la puso sobre mi boca.

-En un momento regreso, intentas algo y te juro que está vez viajaré a Los Angeles para para matar a tu padre

Chris bajo del auto, intentaba buscar una forma de desatar mis manos y pies.

Cada vez me sentía más débil y sin fuerzas.

Me estaba desesperando y estaba entrando en un ataque horrible de pánico y ansiedad.

Volteé a mi costado, no podía creer lo que veía.

Mi piel se herizó por completo al ver a mi padre parado a unos 20 metros de mi.

Comencé a llorar aún más, no encontraba la forma de hacer algo para que el notará mi presencia.

Era imposible hacer algo con los pies y manos atadas, no podía ni gritar gracias a la cinta que Chris había puesto en mi boca.

ME ESTABA VOLVIENDO LOCA, SENTIA ALGO HORRIBLE EN MI CORAZÓN.

Mi padre estaba tan cerca de mi pero no podía verme.

Me senté sobre el asiento y le di la espalda a la puerta, puse mis manos sobre el seguro y está se abrió.

Como pude bajé del auto y me puse pie aún con los pies atados.

Al parecer todo estaba a mi favor, con mi hombro y haciendo muecas puede quitar la cinta de mi boca, di pequeños brincos hasta pasar el auto que estaba aun lado y ser visible para mí papá.

Mis lágrimas salían sin control, por fin, por fin tenía a mi padre tan cerca de mi.

-¡PAPAAAAAAAAAAAAAAAA!-Grite en un llanto-PAPAAAAAA ESTOY AQUÍ

Mi padre volteo a verme, podía ver su gran impresión en el rostro.

Sin pensarlo corrió hacia a mí y me abrazo.

-Mi niñaaaaa, mi bebé, mi chiquitaaaaa-Decia entre lágrimas mientras me abrazaba y me llenaba de besos.

No podía sentirme mejor...

Inocencia Robada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora