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Tomé la caja de juguito y salí de la cafetería a pasos lentos, caminé a mi cabaña para buscar algo. Al llegar escuché la voz de mi hermana, preferí no darle importancia. Rápidamente busqué el libro que había estado leyendo anoche, al encontrarlo lo cogí. Me di la vuelta y caminé a la salida, antes de salir pude escuchar una pequeña parte de la conversación de mi hermana.
—Estoy muy bien, gracias por preocuparte. Yo igual te amo, mamá.
Suspire pesadamente, mientras seguía caminando a pasos lentos hacia el lago.
En unos minutos llegué, esperaba encontrarme con el chico tan insoportable. Era buena compañia, no lo negaría. Mi aburrimiento se esfumaba en cuando él llegaba, por así decirlo era un objeto para entreterme, aunque suene mal.
Era el hámster frenton que disfrutaba ver girar en una ruedita.
Solté unas carcajadas, si alguien me viera pensaría que estaba loca.
—¿Estas bien?—pregunto una voz a mis espaldas
Apenas escuche su voz supe perfectamente que era él.
—Estoy bien—dije al darme vuelta
—¿Y esa risa de loca maniática?—preguntó con tono burlón, sentí la vergüenza invadirme pero intente no demostrarlo
—¿Y tú con ese gorrito? ¿Esta nevando y no me he enterado?—me burle
—El gorro no es solo por la nieve, también por frío.
—Y aquí está apuntó de caer granizo—hablé sarcásticamente—. Estamos a 32° grados y tú vienés con gorro, no me jodas.
—Apenas llegó y ya me estas criticando, insultando y burlandote de mí.
—Dios, que dramático. No soportas nada, eh—me guiño el ojo
Pasó a mi lado a pasos lentos, sin siquiera responderme. Me di la vuelta y lo miré con confusión.
—¿Y tu ukelele?—le pregunté
—Hoy no tenía ganas de tocar—dijo mientras daba vueltas
—¿Cómo vas con el libro?
—Bien.
—No te vaya a dar sed de tanto hablar—me Miró con confusión, al parecer no me había entendido, yo apenas y me entendí
—Mañana comienza la semana de juegos.
La semana de "juegos". Como su nombre lo dice, una semana de puros juegos. Hacen varios equipos mixtos y los hacen competir en diferentes juegos. ¿El premio? Es una fiesta en honor a los ganadores, el premio es una mierda.
Antes me gustaba participar, competir o simplemente me emocionaba la idea de ganar algo en mi vida, pero ahora lo veo como algo absurdo.
Perder tu tiempo para que el premio sea una puta fiesta que puedes hacer tu mismo, no veo la gran cosa en eso.
