Aquí Estoy Yo ✔ || Christopher Velez

Día 20

Mel__JERCZ este capítulo va dedicado para tí, te lo mereces. Gracias por todos tus comentarios, disfrutó leerlos ❤

Ayer la había pasado bien, Christopher sabía cómo distraerme y lo apreciaba.

Pero hoy volvía a sentirme mal, al levantarme miraba a Lindsay hablando con sus amigas animadamente.

Sus palabras seguían en mi mente, me dolía demasiado.

No lloraría, no más. O al menos eso intentaría.

Amarre los cordones de mis Converse, me puse de pie y salí de la cabaña.

Mi mirada era de inseguridad, lo sabía por que lo sentía.

Mire a mi alrededor, Christopher no estaba por ningún lugar. Tendría que volver a ir a su cabaña o simplemente ir a la cafetería y esperarlo.

¿Por qué se despertaba tarde? Era yo quien debía levantarse tarde pero ahora ni podía dormir bien.

Caminé hacia la cafetería, me sentaría en una mesa sola y lo esperaría, no buscaría más problemas, no lo soportaría.

Entré en la cafetería y fui a buscar mi desayuno, busqué una mesa vacía, por suerte la encontré, caminé hacia ella con mi desayuno, mirando el suelo.

Tomé asiento y deje la bandeja de comida sobre la mesa, mi mirada seguía baja y no la levantaría.

Podía sentir la mirada de algunos y escuchar sus murmuros, eran idiotas debía ignorarlos.

No comí nada, solo esperaba a que Christopher llegará.

Minutos después, Christopher tomó asiento a mi lado.

—¿Estás bien?—preguntó apenas se sentó enfrente mío

—Por supuesto, estaba esperándote.

—Lo sé. Perdón por la tardanza, últimamente me he levantado muy tarde—asentí

Comencé a desayunar en silencio, mirando mi comida. Sentía la mirada de Chris mientras él comía, pero no le daría importancia.

—Chris, ¿por qué no vas con tus amigos?—pregunté al recordar que él era más social que yo, tenía muchos amigos, era fácil de notar

—Me gusta estar contigo.

—¿No te aburre? Digo, casi ni habló.

—Tu presencia me tranquiliza—revolví mi comida mientras me quedaba callada ante lo que había dicho

Me sucedía exactamente lo mismo con él.

De alguna u otra forma, ese chico tan insoportable me daba tanta tranquilidad.

Así me sentía con Lindsay.

Sentí como mi pecho comenzaba a doler, no podía olvidar nuestra amistad de un día para el otro.