Recuerdos de una vida olvidada

114 8 14
                                    

El carruaje seguía con su camino, solo que esta vez tenía 3 nuevos pasajeros a bordo.

—¿Era necesario que subieran? ¿No pudieron irse caminando?— Ike reprochó con cierta molestia.

—No seas amargado Ike, aún así ya casí llegamos.— Fox replicó, todos estaban muy cansados como para discutir.

—Y dime, Link. ¿Como llegaste a este lugar? ¿Tiene mucho que estas aquí?— Aquel que se hacía llamar Capitán Falcón, desde hace unos minutos parecía estar bastante interesado en Link.

—Yo... Si tiene poco que estoy aquí y se podría decir que fue un accidente.— El rubio respondió apenado y nervioso, a pesar de no verlo, podía sentir la mirada de Ike sobre el. Por esa razón ya no quiso seguir con la conversación.

—Ya estamos aquí.— Cloud dió la señal para que todos bajarán.

Todos observaron a el frente, donde se podía ver un camino despejado, con unos pilares que daban paso a un puente de madera, el cual estaba sostenido por una cadenas puestas en el pequeño muro que cubría todo el lugar.
Al cruzar el puente se podía ver unas puertas, que conducían a un pasillo completamente cerrado, dando una pista de que tan ancho era el muro, al pasar por este se podían visualizar otras puertas que daban paso a la ciudadela principal, la cual era mucho más grande que la de el Reino secundario.

Link estaba maravillado con el lugar, todo esto mientras la gente no dejaba de ir de un lado a otro, parecía que la ciudadela no tenía un solo momento de descanso. El ambiente era muy movido y en cualquier lado podía apreciarse la felicidad y alegria de la gente.
Los demás le indicaron que en otro momento podría pasear, que ahora era momento de acudir al castillo.

Sus nuevos acompañantes decidieron separarse, indicaron que lo mejor sería hacer un poco de tiempo para después ir a dar su informe a la reina, por lo que se despidieron con la esperanza de volverse a ver pronto.

Los 3 chicos restantes, se movieron hacia la zona norte, pasando una plaza con una bonita fuente que estaba adornada con el símbolo de la familia real. De ahí subieron unos pequeños escalones hasta llegar a una gigantesca puerta custodiada por dos grandes guardias. Cloud inmediatamente mostró la carta del rey, por lo que los dejaron pasar sin ningún problema.

Al entrar pudieron observar un majestuoso jardín, lleno de la vegetación más variada y hermosa posible, parecía ser muy amplio, ya que rodeaba a todo el castillo entero.
El castillo por su parte, igual era enorme e impresionante, nada parecido a el que Link ya había visto.

—Tenemos que subir a la cima, ahí está la reina. No te distraigas.— Cloud advirtió a Link, para después tomar la delantera y guiar a los demás.

Link obedeció la orden de Cloud y trataba de mirar solo la espalda de este, pero era casi imposible no quedar asombrado ante todo lo que tenía para ofrecer el lugar. En su camino logró observar grandes salas con decorados preciosos y demás lujos que no creía que fueran posibles. Veía grandes ventanales con figuras talladas en ellos, grandes comedores con varios sirvientes que iban de un lado a otro con mucha rapidez e incluso algunos cabelleras que servían al reino pasaban con su equipamiento. Igual se veía el acceso a balcones con vistas hermosas y distintas salas las cuales intuyó, que eran habitaciones o tenían diferentes propósitos.

Después de unos minutos, finalmente llegaron a la cima, donde se encontraba el trono real. Se encontraba un enorme balcón con vista a toda la ciudadela completa, incluso a más lugares del reino, hasta donde alcanzará la vista.

Después de eso, por fin entraron al lugar prometido. Era una sala que tenía un ambiente diferente al resto, estaba completamente silenciosa y parecía ser un recinto muy respetado, incluso como si se tratase de algo sagrado.

Super Smash Bros: Un nuevo inicioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora