Una Demonio Entre Caballeros ( nanatsu no taizai x saint seiya the lost canvas)

Capitulo V PRESAGIOS DE UN DESTINO INCIERTO

3 AÑOS DESPUES

Se podía ver un tranquilo pueblo, y a lo lejos en un bello y pacifico prado con un hombre que meditaba, que sentía la naturaleza fluir a través de él, en otro sitio cercano, un niño quien intentaba atrapar su comida con las manos, pero le era difícil, ya que los peces se le escapaban.

Alguien lo sujetó de su ropa, levantándolo de donde estaba, era Ilias de Leo, y el niño, el pequeño Regulus, su hijo.

Regulus: ¡Padre! – dijo con sorpresa.

Ilias: ¿Qué estás haciendo? – preguntó.

Regulus: Intento atrapar mi cena – respondió viendo el riachuelo, con los pequeños peces pasando en el mismo.

Ilias puso a su hijo en su hombro y se arrodilló en el agua, acercando su mano a la misma, en un instante dos peces se posaron en su mano, el niño vio esto con asombro, la manera en que su padre logró tal cosa.

Regulus: ¿Cómo hiciste eso? – pregunto sin salir del asombro.

Ilias: Los peces que tengo a aquí, decidieron que era su hora, y vinieron a mi – le respondió.

El pequeño no comprendía la forma en que su padre se comunicaba con la naturaleza, le era difícil comprender eso, pero una interrogante surgió en Regulus.

Regulus: Pero padre, tú eres vegetariano, ¿por qué dos peces? – menciono confundido.

Su padre lo miró.

Ilias: La tierra me ha anunciado que alguien vendrá de visita – solo eso dijo.

Regulus: ¿La señorita Gina?, o ¿la señorita Jericho? – preguntó alegremente.

El mayor negó.

Ilias: No es ninguna de ellas – respondió sereno.

Regulus: Entonces, ¿quién? – preguntó queriendo saber.

Ilias: Paciencia hijo mío, y lo sabrás – dijo mirando a una dirección.

A lo lejos Hasgard venía llegando, al anochecer mientras conversaban Hasgard le pregunta que, si ese niño era su hijo, y donde estaba su madre, a lo que él responde que ella regresó a la tierra. Hasgard le explica que el Santuario lo necesitaba Athena todavía no había descendido y los Espectros comenzaban aparecer, así que se necesita del Santo de oro más poderoso Ilias de Leo, así luche a la par de la Amazona más poderosa, o como el Santuario la conoce, la dama de honor de Athena, al escucharlo él evade la conversación, algo que molesta a Hasgard quien decide que aunque sea por la fuerza lo llevará con él, Regulus interviene diciendo que su padre no ha hecho nada malo, Hasgard detiene su ataque pero advierte que no se va ir hasta que Ilias regrese al Santuario.

Hasgard: Por cierto, la señorita Gina, Jericho y Señor Melrad vendrán mañana – le digo.

Regulus se puso feliz e Ilias analizaba lo dicho por el joven, pero, el niño fijo su vista hacia el santo de Tauro.

Regulus: ¿Quién es Melrad? – preguntó.

Hasgard: Es un amigo y compañero de armas de la señorita Gina – respondió.

Ilias: Si, ella me comento sobre él, en una de sus visitas – mencionó.

Hasgard: Ella le contó muchas cosas acerca de ella, incluso su hogar, y pretende quedarse aquí, como si lo que le contó no fuera nada, ella confió en usted, y ahora está lejos de todos nosotros – le recriminó – a nosotros nos está costando ganarnos esa confianza que le puso, ¿siquiera estuvo de acuerdo? – cuestionó.

Ilias lo miro serio.

Ilias: Comprendió mis motivos, lo hablé con ella con anterioridad antes de irme – le dijo con seriedad.