C. 6

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Zayn colgó el teléfono sintiéndose extraño. Primero Harry lo llamó avisándole que había reprobado y por lo mismo no podría jugar contra Columbia. Lo había regañado de una forma dura y le había colgado el teléfono. Y cuando creyó que el rizado le había vuelto a llamar es Niall quien le había llamado.

– Por poco no le contesto... – murmuro Zayn viendo aun el aparato – ¿Por qué me siento tan extraño aun cuando he estado hablando por teléfono y no en persona con él?

– ¿Esta alguien contigo Zayn? – escucho una voz femenina que se acercaba.

Zayn embozó una ligera sonrisa al ver a la mujer que entraba en la sala totalmente vestida de blanco, quitándose el pequeño gorro de enfermera que aun adornaba su cabeza.

– No Doniya, no hay nadie más conmigo

La chica sonrió al verlo y se acercó para darle un beso en la mejilla.

– Como escuche que hablabas, pensé que había alguien contigo... ¿O es que estabas hablando solo? – dijo la chica sonriendo.

– Estaba hablando por teléfono con un amigo.

– ¿Con cual de tus únicos dos amigos Zayn? – cuestiono la chica sonriendo.

– Uno que no conoces...

– ¿Uno nuevo? Eso sí es sorpresa – dijo la chica riendo dirigiéndose a la cocina, mientras Zayn la seguía – Sabes Zayn, no entiendo ¿Por qué tu siendo tan guapo, tan simpático y tan bueno, no tienes más que dos amigos? Bueno, ahora tres amigos. – Zayn solo se encogió de hombros – Será ¿Por qué eres muy serio? ¿Por qué no hablas más hermano?

– No tengo nada que decir – dijo Zayn saliendo de la cocina para poner la mesa.

– ¡Claro que tienes mucho que decir! – grito Doniya a su hermano.

Quizá era cierto, pero nunca había conocido a nadie con quien le interesara hablar. Todos eran aburridos, a excepción de Harry y Liam. Harry era divertido, y fue al primero que conoció cuando llego al país, el primero que le tendió la mano y desde entonces no se había separado y se habían convertido en los mejores amigos...

//* * *//

Aquella mañana estaba lloviendo y corría un viento ligeramente frío. Se había sentido asustado al estar en una nueva escuela, un año más abajo del grado en el que debía estar, con niños que hablaban de una forma extraña, no sabía que tanto le estaban diciendo. Y al no responderles, todos lo excluían de sus juegos considerándolo tonto o retrasado. Uno de aquellos niños constantemente le empujaba llamándolo de una forma que no entendía, pero que intuía debía ser un insulto. Nunca le había dicho nada y se limitaba solo a observarle de forma fría.

Después de unas semanas de estar en aquella escuela, en una esquina del salón vio a un niño relativamente nuevo. Sabía que estaba en su misma clase, pero era uno de los que más hablaba y de los que más reía. Ese día lo vio llorando en un rincón y él niño que siempre solía molestarlo, ahora se dirigía a ese niño de cabellos chocolatoso corto con la firme intención de molestarlo. Sin saber por qué, se levantó del pequeño banco en que siempre permanecía y se atravesó al paso del niño grande como le decían todos. El otro niño había intentado empujarlo, pero por primera vez le había respondido algo. Había usado la misma palabra que él le dirigía y le había dado un fuerte empujón lanzándolo al suelo. El niño grande había llorado y desde entonces no volvió a molestarlo.

– Hola, me llamo Harry y tú ¿Cómo te llamas? – pregunto Harry con lágrimas en los ojos acercándose al niño que le había salvado del niño grande.

Pero el niño de ojos mieles le veía sin entender, sin decir nada.

– Me llamo Harry y ¿Tú? – volvió a repetir. Pero de nuevo el otro niño se quedó en silencio – sé que puedes hablar te escuche diciéndole idiota al niño grande. ¿Por qué no me dices tu nombre? – Pero de Nuevo el niño no decía nada – ¿No me entiendes?

Juego de dos ➳ larry & ziall [adaptación]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora