My Bad Boy. (Calum hood) PAUSADA

Capitulo 20

¿Acaso había escuchado bien? ¿su--su chica?

— Vámonos—me agarró de la mano y me llevó por el pasillo—

— ¿Tienes hambre?—llegamos a la cafetería—¿Quieres algo?—negué con la cabeza—

— No haz comido nada—me regaño—

— ¿Cómo que soy tu chica?—dije de repente—

— Pues si—se sentó en una silla—¿Algún problema?—me senté frente a él, solo nos dividía la mesa—

— Bueno.. no, pe-pero.. si Maddie se entera, ¿que tal—

— Ella no se va a enterar—interrumpió—y si se llega a enterar ¿Qué?

— Pues ustedes andan saliendo, no creo que se vea bien..—Puso sus palmas en la mesa agresivamente haciéndome sobresaltar—

— Ella..—trató de tranquilizarse—ella no es mi novia, no es nada mio.. ¿entendido?

— Entendido, pero no es para que te pongas así.

— ¡Es que me molesta! Me molesta que piensen que la quiero, solo es una aventura.. nada mas—exhalo frustrado—

— ¿Entonces no la quieres?

— ¿Acaso no entendiste todo lo que te acabo de decir?—dijo apunto de perder la paciencia—

— Si, pero.. no entiendo.

— Eso no es una novedad..

— Es que—lo ignoré—te besas con ella y la tratas mal.. pero no la quieres y a mi, bueno..No me tratas como a ella eso es seguro—solté una risita—entonces tu.. ¿tu me quieres?

No sé como pude decir eso, Calum cambio su cara a una de tranquilidad, puso sus manos detrás de su nuca y subió los pies a la mesa haciéndome ver una imagen relajada de él.

— Bueno, eres muy guapa y te me haces interesante—me analizó con la mirada—

— ¿Crees que soy interesante?—murmuré perpleja—

— Si—sonrió de lado—

Después de ese episodio, decidimos cambiar de tema.. bueno, fue mas bien él, estuvimos platicando y riendo toda la hora. Una vez que ya no esta frustrado ni de mal humor suele ser muy divertido. Me invitó el almuerzo y se sentó a mi lado, me miraba cuando comía no se si era por que nunca me había visto comer o.. no lo sé. Estábamos tan cerca que podía sentir nuestras respiraciones mezcladas, y justo cuando pensé que me besaría tocaron el

timbre, jamás había odiado tanto el timbre en mi vida. Me acompaño al salón de mi siguiente clase y se despidió de mi con un beso en la mejilla, casi me derrito. Esa clase me tocó con Jaby, Niki, Anita y Tania; parece que ellas se habían vuelto muy amigas, me invitaron a un club el sábado, osea mañana, no quería ir pero me convencieron. Tocaron el timbre.

— Nos vemos—me despedí de las cuatro, cuando me jala alguien del brazo —

— Hola _________—me dio una falsa sonrisa—

— Oh, hola Lina..—le sonreí igual—

— ¿Puedo hablar contigo un momento?