Jimin es el jefe de un gran clan mafioso llamados "JinGom!. Yoongi es un policía de alto nivel que investiga al clan de Jimin mientras que busca a su ex amigo por una culpa guardada de años.
Las manos de Hoseok temblaron, se sentía inútil estando parado allí pero la razón lo valía. Siempre creyó que las personas que dejaban ir a otra mentian al decir que amaban a quienes dejaron, desde pequeño creía fielmente en que cuando uno ama no dejaría ir nunca a la persona que ama si tiene la oportunidad de aferrarla a su lado pero él no era egoista, mucho menos ciego y podia ver que Jimin no era felíz con él.
El timbre sonó y Yoongi soltó la cuchilla, se lavó las manos, las secó, se quitó el delantal se cocina caminando hasta la puerta de su departamento y observó por la perilla.
Hoseok suspiró pensando una y mil veces lo que le diría a Yoongi. Sentía que debía hacerlo. Ya habían pasado dos semanas desde que había terminado con Jimin a pesar de que este continuó actuando como si fuesen la pareja perfecta.
-Hoseok, que sorpresa verte por aquí. ¿Sucedio algo? ¿Necesitas algo?- preguntó Yoongi curioso.
-Hola, Yoongi, solo... dijiste que podíamos ser amigos y yo quería saber si aún deseas eso- el pálido asintió y sonrió.
-Pasa. Estaba preparando el almuerzo- Hoseok entró con tranquilidad y observó el departamento, un hogar cálido con colores neutros, la decoración parecía de departamento de soltero pero los coloridos juguetes en el suelo delataban la paternidad del dueño. -¿Como has estado? ¿Como va la família?- preguntó volviendo a colocarse el delantal y con Hoseok siguiendolo.
-Bien. Estamos bien, ayer fui a ver a mi madre, se siente realmente bien ser... normal- Yoongi rió y se lavó las manos para volver a su preparación de aquella ensalada.
-Siempre fuiste normal pero diferente. Ya sabes, cada uno tiene lo suyo- dijo Min sintiendo paz sabiendo que Hoseok aceptaba su amistad, era difícil ser el amigo de su primer amor pero debia de actuar como un adulto y con madurez. -Estoy preparando un ensalada con carne al vino tinto. ¿Te parece bien?- Jung asintió y se acercó dudoso hasta donde Yoongi estaba.
-¿Necesitas ayuda?- preguntó y Yoongi negó terminando de cortar las verduras.
-Ahora solo tengo que hacer la carne pero eso es fácil. Me hace felíz que aceptes mi amistad- Hoseok mordió su labio inferior, no se aguantaria mas tiempo sin hablar.
-Jimin y yo terminamos- hablo repentinamente. Yoongi sintió un escalosfrios recorrer su cuerpo. ¿Si se sentía bien? Una parte de él sí pero ese sentimiento no era bueno, no cuando Jimin podría estar pasandola mal y también su nuevo amigo.
-Lo siento- dijo Min evitando el contacto visual con Hoseok.
-Terminé con él por ti- Yoongi se sorprendió y dejó de hacer lo que hacía. -¡No! ¡No es lo piensas! Yo lo hice pensando en ti.- Hoseok se maldijo internamente por ser tan bruto y rió rascando su nuca. -Me refiero a que consideré tu amor por Jimin- el pálido continuó desempacando la carne y luego la lavó con sus propias manos.
-Te pedí que olvidaras eso. Yo no haré nada en tu contra. Respeto tu família, Hoseok- dijo colocando la carne la sartén para comenzar a buscar las especias.
-Te propongo luchar por Jimin, ambos. Tu por tu lado y yo por el mio.- propuso aun sabiendo que tenia la batalla casi perdida.
-¡No hare éso! ¡Jimin te ama y se supone que somos amigos! ¡Los amigos no se pelean por la misma persona!- dijo Yoongi dejando todo de lado.
-No puedo decirte mis verdaderas razones porque eso es algo que no me incumbe. Solo diré que me parece justo que luchemos por Jimin.- Min suspiró y tenso su mandíbula.
-Jimin no es un premio, no es objeto, a Jimin no te lo ganas siendo el más guapo. Él es como una galaxia, no tiene dueño y nunca lo tendrá, él solo es un regalo de la vida. No me pidas que pelee por él como si fuera solo la luna, yo seré la luna para Jimin, una simple roca que brilla por gracia ajena.-dijo apuntando a Hoseok.- En la Via Láctea la estrella más importante es el Sol, ese eres tu, Hoseok, eres el Sol de la galaxia a la que me gustaria pertenecer pero no estoy en órbita. Espero que entiendas porque trato no ser demasiado brusco contigo y conmigo mismo.- volvió a su trabajo y Hoseok se quedó pensando en lo que Yoongi habia dicho.
-¿Sabes cual es la diferencia entre perdedor y fracasado?- preguntó Hoseok pero Yoongi no respondió. -El perdedor pierde el juego, el fracasado ni siquiera lo intenta- Yoongi suspiró y se giró hacia Jung.
-Debes de estar loco como para ser felíz y arruinar la felicidad que compartes con la otra persona. Yo le ofrecí mi felicidad, mis sueños, mi vida y él no lo aceptó porque quiere ser feliz contigo. No sea idiota, vuelve a casa y sé ese hombre que eligió como su compañero de vida, besalo, dale un abrazo, dile que lo amas, hazle el amor, tu que puedes hacerlo, a ti que te cree cuando le dices que lo amas, dicelo millones de veces.- dijo lleno de impotencia.-Dejame olvidarlo, por favor- Hoseok empujó un poco a Yoongi sin intenciones de hacerle daño.
-Jimin no se olvida, estúpido.- el pálido rio sin gracia alguna y continuó cocinando.- Se que lo que voy a hacer es algo muy feo pero yo también prometí velar por la felicidad de Jimin así como tu.- Min intentó no prestar atención a las palabras de Hoseok.
-Me corté las alas con Jimin, no quiero volar para después caer, el golpe es fuerte y duele bastante- dijo sacando el vino de su pequeña bodega aunque nunca bebía alcohol de esta ya que consideraba la bebida como colección.
-Jimin te ama pero siente que sería demasiado canalla de su parte pedirte una oportunidad después de lo sucedido entre ustedes.- Hoseok sacó de su bolsillo la tarjeta de reservación del restaurante que habia visitado esa mañana.- Yo cuido de Dong, hasta niñera gratis tendrás, no tienes excusa- dijo ofreciendo la tarjeta a Min.
-Hoseok... es tu família- dijo aun dudando de aceptar.
-Pero es tu historia de amor.- DongPyo entró a la cocina frotando su barriguita y al ver a Hoseok saltó en su lugar.
-¿Jimin vino contigo?- preguntó buscando a su objetivo con la mirada.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
