Loki en el mundo oscuro

Capitulo 2

Kathe se encontraba en su departamento, ya había amanecido. El reloj daba las 7 en punto. En el comedor, donde se encontraba desayunando una saludable ensalada de frutas, junto con una espumeante taza de café y un vaso de jugo de naranja.

Se notaba que el departamento era lujoso, aunque no era muy amplio, ella vivía sola, no necesitaba mucho, estaba bien amueblado, y el decorado era de un gusto exquisito.
Era normal que ella viviera así, trabajar en las oficinas Stark era bastante beneficioso.

Kathe terminaba de desayunar cuando al lado de ella apareció un brillo azul con muchas estrellitas y de ese brillo aparecía Luna.

_Ya estas lista. La torre Stark nos espera

_ Sí, ya estoy. ¿Lograste averiguar algo para destruir a Loki?_ dijo Kathe levantándose y tomando la bandeja en la cual se encontraba el desayuno ya terminado y se dirigía hacia la cocina, la cual se encontraba a unos cuantos pasos.

_ Bueno, los ancianos dicen que será difícil destruirlo, aunque no sea inmortal como todos piensan, su cuerpo es más resistente que la de un demonio, es un ser muy poderoso. Lo que ellos sugieren es capturarlo para congelarlo e inestabilizarlo.

_ ¿Capturarlo? ¿Es una broma?_ dijo dejando la bandeja en el lavaplatos

_ Nunca dije que sería fácil

_ Pero... ¿Cómo se supone que vamos a capturarlo?_ dijo un tanto irritada

_ No lo sé ¿Qué tal si lo seduces? tienes experiencia en eso ¿No?_ se burlo de ella.

_ ¡Oye!_ dijo con una pequeña sonrisa

_ Hay por favor_ en tono burlón_ tus ex no fueron precisamente angelitos ¿Por qué no un Dios?_ continuo burlándose

_ Primero eso no está en discusión, cualquiera comente errores y segundo jamás estaría con alguien como él, es un total y completo idiota que se cree superior ¿Quién se cree que es? ¿DIOS?

_ Bueno... De hecho...él es..._ Luna miro su reloj pulsera eran las 7:30, jadeó pegando un pequeño salto_ Llegaremos tarde. Ya pensaremos luego como atraparlo_ agregó y ella tocó el hombro de Kathe desapareciendo del departamento.

Kathe y Luna aparecieron a unas pocas cuadras del edificio Stark, claro en un lugar donde no había civiles cerca. Se encaminaron, ahora a pie hacia el edificio.Como ellas ya tenían suficiente con tener que pelear con demonios y ese tipo de cosas, obviamente no iba a elegir el puesto de seguridad, querían algo tranquilo, así que se postularon para el puesto de secretaria de los ejecutivos.

A ninguna de las dos le gustaba vestir aquellas faldas de oficina, por lo que vestían pantalón. La mañana se encontraba bastante tranquila, cada una en sus respectivos lugares, ordenando, archivando, nada anormal.

Casi eran las 11 del medio día, y todo continuaba tranquilo, sin embargo Kathe se encontraba un poco inquieta, algo le decía que algo malo ocurriría, no sabía qué, pero podía sentirlo, podía sentir como una fuerza maligna se acercaba y asechaba el lugar, esperando... ¿Esperando? ¿Esperando qué?... De pronto se escuchó una explosión en el edificio, que provenía de los pisos de abajo, esto hizo que Kathe y Luna se sobresaltaran ¿Pero qué carajo había sido eso? Los sonidos de explosión continuaron y cada vez parecía acercarse más y más hacía donde se encontraban ellas ¿Qué demonios estaba ocurriendo? Evidentemente estaban atacando el edificio ¿Pero... por qué? Ellas no iban a quedarse con los brazos cruzados, si estaban atacando fuese quién fuese lo sacarían a patadas de allí...

Ellas se dirigieron rápidamente hacia los pisos de abajo para averiguar que era todo ese alboroto, pero cuando iban a hacerlo, unas cosas extrañas azuladas atravesaron las ventanas del piso en que ellas se encontraban.
Estas cosas eran de un color azul grisáceo, parecía que sus cuerpos eran de gelatina, por lo poco que se veía ya que vestían una especie de armadura, que apenas si se les veía el rostro, eso sí, eran bien feos ¿De dónde salieron esas cosas? ¿Qué eran? Portaban en sus manos unos objetos extraños, parecían lanzas, que disparaban rayos a los pocos civiles que se encontraban ahí. Fuesen lo que fuesen, no eran de este planeta, alienígenas o no, Kathe y Luna no iban a permitir que lastimasen a alguien, por lo que en cuanto aparecieron comenzaron a pelear con ellos.