Capitulo 3

75 3 0
                                    

_ Kathe..._ la voz de Luna le resonaba en la cabeza.

La oscuridad se desvaneció poco a poco al abrir los ojos y encontrarse con el rostro preocupado de Luna.

Luna la había visto caer, y la había orbitado en un edificio abandonado y un poco destruido por los "Chitauris", allí Luna le curó su herirá antes que su alma abandonada su cuerpo. Las imágenes en su cabeza pasaban rápidamente, el ruido de las explosiones, los gritos de la gente, ellas dos volviendo al combate, su laboriosa pelea con los extraterrestres, los "Chitauris" cayendo...

Kathe abrió los ojos, encontrándose en su propia habitación. Todavía continuaba soñando con aquel evento. Había transcurrido como un año de aquel día, los medios habían notificado que un grupo de superhéroes: El Capitán América, Hulk, Thor, dos agentes de Elite (Natasha y Clint) y por supuesto Ironman había salvado el día. Claro que los medios no mencionaron nada sobre quien comandaba el ejército de Chitauris, lo único que dijeron y que sabían, por supuesto, era, que había sido un ataque alienígena.

Kathe y Luna a pesar de que buscaron y buscaron no volvieron a saber nada sobre aquel Dios Loki. ¿Habría muerto en la batalla? ¿Lo habían logrado capturar? ¿Habría huido tras su humillante derrota? Eso no lo sabía, aunque estarían alertas de cualquier indicio de su presencia, tal vez nunca sepan que fue del destino de aquel Dios.

Kathe se semi-incorporó quedando sentada en su cama, dio un vistazo rápido a su cuarto, todo estaba normal, la ventana seguía cerrada, solo se apreciaba la tenue claridad colándose entre los espacios horizontales de la persiana. Ella se quitó las sabanas de encima y bajó los pies al suelo, para luego colocarse las pantuflas e incorporarse para salir de la habitación.

Se dirigió directo a la cocina, para preparase un espumeante café, todo parecía que sería un gran día, sin embargo Kathe se encontraba muy inquieta, además de los constantes sueños de aquel evento, podía sentirlo, era un presentimiento igual al que tuvo cuando atacaron los alienígenas, ella sabía que algo importante ocurriría...

Mazmorra de Asgard

Al final de un largo pasillo de arquitectura rustica iluminado con antorchas, detrás de un ventanal con un poderoso campo de energía, se encontraba una habitación sencilla de paredes blancas, amueblado con los elementos básicos: una cama de dos plazas cubierta con cobijas lujosas, dos mesas, una que era usada para comer y otra pequeña en la cual se encontraban elementos alquímicos y por supuestos dos sillas.

En aquella habitación tan simple, se encontraba prisionero nada más ni nada menos que el mismísimo Dios Loki. A pesar de todo lo que había hecho, Frigga lo seguía queriendo y tenía la esperanza de aquel Loki que ella crió volviese, y fue gracias a ella, que él todavía seguía con vida, ya que Odín no podía perdonar todo lo que había hecho y lo hubiese fusilado por sus crímenes si no fuese que Frigga hablo por él y convenció a Padre de todo que le perdonase la vida. Por esa razón Loki contaba con pequeños privilegios como una cómoda habitación, ya que Frigga se había encargado de eso para que pudiese pasar los años que le esperaban cómodamente, aunque custodiado por guardias que lo vigilaban a través del ventanal.

Meses en la misma habitación sin poder salir, viendo a los mismos guardias día tras día, se estaban volviendo un tanto fastidioso, ya estaba arto de leer los mismos libros (unos de sus tantos privilegios), el único consuelo que tenía era que por lo menos había una persona que todavía creía que había algo bueno en él (grave error), solo una persona lo iba a visitar de vez en cuando, la misma que le envió sus libros, su madre o mejor dicho su madre adoptiva, que se aparecía en su habitación- prisión como una especie de holograma, Frigga era la única que hasta ahora se acordaba de él, transmitiéndole su amor y desilusión, era la única que lo dejaba pensando, a veces bastante, en todo lo que había hecho, sin embargo la vocecita oscura siempre estaba allí, en su cabeza, susurrando, recordándole lo que era, muchas veces no podía evitar dar vueltas por la habitación para pasar el tiempo, en esos momentos es donde se centraba en sus pensamientos, en sus oscuros pensamientos, recordando los momentos que paso con Thor, siendo la sombra de su grandeza, viendo como todo Asgard lo prefería, y él, aun siendo el príncipe no consiguió obtener el respeto que se merecía...

Loki en el mundo oscuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora