P R Ó L O G O

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Luego de regresar de su escuela cerca a casa, un tierno y adorable niño que responde al nombre de: Kai, ingresa a su vivienda con la pequeña mochila en la espalda, la que deja a un extremo del sofá más largo, y camina al baño para lavarse las manos.

Al salir se dirige a la cocina para hablar con su madre, a quien no encuentra por ninguna parte. En ese momento, su abuelo se hace presente llevando al niño hasta la sala y sentándose a su costado.

—Abuelo, ¿dónde está mamá? —pregunta preocupado ya que normalmente siempre estaba para la hora del almuerzo.

—Sophia ha salido un instante al mercado, no debe tardar en venir —contesta con una pulsera en la mano —. ¿Alguna vez te conté el significado de tu nombre?

—No que recuerde —se distrae a su vez viendo el dije en la cadena plateada —. Dímela abuelo, por favor —pide el niño curioso de la historia.

—Kai es estrella en un idioma un poco antiguo y desconocido —le comenta ante la expectativa del menor —. Es por eso esta pulsera y sus distintos dijes.

—Oh, es bastante hermosa —dice recibiéndola de su abuelo—. ¿Me la puedo quedar?

—Por supuesto —acepta el más viejo —. Es toda tuya.

—Muchas gracias —agradece con el mando cambiando de canal.

—Ahora, quédate aquí esperando a Sophia, que no tarda en llegar —señala incorporándose para ir a su habitación —. Voy a dormir un rato.

El niño asiente y el anciano sale de la sala, sólo que en vez de ir a su cuarto lo hace al de su nieto, para poder encontrar algo que le sirva, siendo este objeto el oso de felpa pequeño de Kai, del cual se apodera y lo lleva a su recámara.

Ahí dentro esconde un USB con información valiosa, el pasaporte para viajar a América, un manojo de billetes de cien dólares y todas las esperanzas de librarse de esto en lo que está metido y en donde también lo está su familia por su mala decisión. Con un plumón le dibuja una "X" en la espalda para no confundirlo con otro similar que tiene su nieto. Dejándolo así como está encima de la cómoda.

♡ ♡ ♡

Esta mañana los niños, por orden de la profesora, fueron llevados a los juegos del parque detrás de la escuela. Mientras que algunos se divierten en los columpios, junto  a su grupo de amigos, él lo hace a un lado más distante, sentado en un banco de madera color verde, agarrando con fuerza su osito de peluche, distraído en sus ideas y pensamientos.

Un pequeño niño más alto que él, de nombre: Soobin, logra disipar a un señor encapuchado, con una pistola en mano, escondido entre los arbustos, apuntando hacia el peluche de un niño sentado en la banca. Revisa la situación por un segundo y después avanza hacia el menor.

Antes de disponerse a retirar una paleta del bolsillo, Kai acaricia la cabeza del oso y retira la pulsera de su cuerpo, guardándola en su bolsillo. Al instante, un niño de la misma edad que la suya, camina hasta él y le arrebata el peluche a un tirón, para desecharlo en uno de los tachos de basura, ante una mirada penetrante y molesta del menor, quien no comprende del porqué de sus acciones.

—¡Oye! Era mi peluche favorito —confiesa intentando levantarse.

Detenido por Soobin, quien coge de su cintura, rodeándolo con sus cortos brazos, impidiendo que dé un paso más, mientras escucha el llanto de su compañero de clases, mismo que golpea su pecho con todas sus fuerzas.

—¡Te Odio! —dice con furia, pues le había quitado el regalo que su madre le hizo hace dos años — Y si esperas que te agradezca algún día por esto, nunca lo haré. ¡Vete!

Soobin hizo lo que le dijeron una vez se aseguró que ya estuviera a salvo, un poco triste por todas las palabras del niño, en un instante pensó en decirle la verdad, pero su corazón no lo permitió, lo que le hizo alejarse sin decir algo.

En ese momento, al interior de la casa del pequeño, unos hombres vestidos de negro irrumpen en el lugar, apuntando a sus padres y al abuelo con sus armas, esperando que el líder de ellos encuentre el USB que tanto necesitan. Después de un rato de búsqueda en vano, al no hallar lo que quieren, quien es el jefe le ordena al resto de sus complices matar a los demás.

Los cuerpos inertes yacen en el suelo. Un par de horas más tarde se hace presente la policía, con el área ya cercada por una cinta de colo amarilla con letras negras, y dos de ellos retirando a quien fue la madre de Kai. Un hombre con bata de médico revisa todas las pistas que lo conduzcan hasta él, o los asesinos.

A la salida nadie fue a recoger al pequeño Kai, por esa razón quien es su maestra, la miss Sowon, se ocupa de hacerlo, sujetándolo de la mano y caminando mientras le cuenta una historia. Al llegar a su casa y ver el panorama, a Sowon se le cristalizaron los ojos, y con el dolor de su corazón se acerca a los policías a preguntar lo que ha sucedido.

Lo que imaginó se hizo realidad, y para su mala suerte el pequeño alcanzó a escuchar su charla con el oficial. Kai rompió en llanto, se introdujo en su casa y se sienta al fondo de su cama, abrazando sus piernas, con su espalda pegada a la pared, quedándose dormido al instante, con las esperanzas, cada uno de sus sueños, y su corazón hecho pedazos. Definitivamente, Kai no sería el mismo y eso se encargaría de descubrirlo y experimentarlo Soobin.

Mi Vecino Es Un Anti-fan (SooKai/KaiSoo) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora