Mi Vecino Es Un Anti-fan (SooKai/KaiSoo)

C A P Í T U L O 6

El Idol no necesita ser un adivino para saber quien causó todo esto, con verlo es más que suficiente, y él conocía a la persona detrás del caótico fin de semana que pasó al extremo del país, y como si todos sus males no fueran bastantes, le hizo lo mismo a Beomgyu, y todo eso era algo que no dejaría pasar por alto una vez más.

Hace una semana, Soobin decidió pasar sus tres días libres, en casa de su asistente, más que nada era porque le urgía un tiempo para si mismo, lejos de su odioso vecino, quien ni se inmutó por su partida en ningún minuto, siendo sincero consigo, existía más probabilidad de que elaborara una fiesta como celebración porque se había ido.

De una forma muy similar al de la última vez, es como supo la situación, por una seguidora que publicó su historia en Instagram, totalmente alegre y ansiosa por "conocer a su Idol", el cual anda algo perdido respecto a esto, mostrando su boleto a la cámara, el cual señala que será mañana a las cuatro, siendo lo único que ha alcanzado a ver, bueno eso y que el de la chica es premium, en otra frase, tenía acceso a un saludo, el abrazo, fanmeeting y entre varias cosas exclusivas más.

Beomgyu se impresionó bastante cuando recibió el mensaje de uno de sus mejores amigos, Soobin, el que le informaba que viajarán en la madrugada y que no demore mucho. El menor, lejos de molestar o incomodarle la indicación, hace lo que le dicen y alista su maleta al instante, aún con los rastros de sueño y cansancio presentes.

Los dos solistas, y el asistente del mayor compran pasajes del primer vuelo cuyo destino sea esa ciudad. A velocidad corren hasta la zona de embarque, entregan los boletos y suben al avión, el que está algo vacío en la clase económica. Para ese entonces Soobin le había ido explicando la situación, obviando la parte que involucra a Kai.

—Pero es tan simple como ir a la empresa y decirle todo al jefe —a Beomgyu la escena le pareció un tanto absurda, ya que la solución era muy sencilla de conseguir—. ¿Por qué no lo hace?

—Lo mismo me pregunto yo —se dice a si mismo el asistente, recibiendo un golpe ligero en su hombro de parte de Soobin.

—No es necesario que intervenga —dijo el cantante en tono formal, pues en horario de trabajo no se le está permitido hablar de modo distinto, e, hipotéticamente, están en uno—. Ya te comenté hace una semana la razón de todo.

—Escúchame, Gyu —dijo Soobin—, apenas lleguemos iremos a un evento. Sólo canta dos canciones. Te recomiendo la última y la más popular, quedarán excelentes.

—¿Y que harás tú? —pregunta un poco preocupado— ¿Estarás ahí? ¿O te quedarás fuera?

—Pongámoslo así —menciona explicando mejor el panorama—. Serás quien abrirá un evento que fue hecho para mí, y en el que no deberías de estar.

—Ya voy entendiendo —revela el artista—. No se angustie, juro que lo haré perfecto.

La pareja bajó del transporte, y al instante, muchísimas fans fueron a su alcance, algunas con carteles en mano, otras con regalos, etc. Si había algo que quisiera Beomgyu en ese segundo, de seguro que un seguidor se lo daría. Junto con su club de fans, se trasladaron hacia el estadio del evento.

Todo salió a pedir de boca, bueno fuese, en realidad resultó mucho, mucho, mejor, fue perfecto, tanto para él como para sus seguidores presentes, mismo que en redes lo consideran "el Idol perfecto" para con sus fanáticos, porque a pesar de las adversidades, consiguió de forma hermosa salir adelante. En parte diciéndolo por su historia.

Aunque, en realidad, le dieron su título por lo que pasó en su show, hace algunas horas. Una chica, de veinte años, que se encontraba al medio de la gente, se desmayó de un momento a otro, al parecer se le bajó la presión, pues su cuerpo estaba frío. Cuando el cantante se dió cuenta, detuvo la canción y se acercó a la joven, a quien cargó y, la subió al escenario.