Sirvienta de los Uchiha's [+18]

Pídelo

Tragué saliva y le miré confundida, ¿Sacar qué? Su tono no era frío como la mayoría de veces, esta vez era simplemente tranquilo.

-¿Uh?

Aquella mirada de inocencia solo provocaba que el pelinegro se exitara con mayor facilidad. El chico tomó las delicadas manos de la pelirosa y las colocó en su bóxer a lo que la chica finalmente comprendió.

Sus mejillas iban adquiriendo color, bajó tímida y lentamente su bóxer dejándo ver la gran erección del pelinegro.

Hizo una mueca de sorpresa, alejó sus manos colocándolas en su pecho. Joder, menuda polla. La pelirosa había quedado sin palabras mientras el pelinegro no podía esperar más, veía aquel tono rojo en las mejillas de la chica y solo quería que ocurriése ya.

Colocó sus manos en el miembro de su amo a petición de este, era completamente inexperta, no sabía qué hacer. Comenzó a masturbarle de arriba a abajo lentamente sin saber mucho lo que estaba haciéndo.

-Joder, solo mételo en tu boca.

Miró al pelinegro y luego miró su miembro nuevamente, relamió su labio y se acercó lentamente a este, abrió su boca y lo introdujo en esta. Empezó con movimientos lentos, solo había metido menos de la mitad ya que solo eso le alcanzaba, no creía que pudiera meterla por completo. Lamía lentamente con su pequeña lengua.

Sacaba un helado de la bolsa de golosinas que Naruto me había dado. Comencé a lamerlo para evitar que se derramara, lamía sus dos extremos de abajo y luego lo lamía por completo.

Comenzó a lamer el miembro de su señor con tal insistencia al recordar esa escena, introdujo nuevamente menos de la mitad en su boca.

El pelinegro hacía su cabeza hacia atrás disfrutándo de aquello, gruñidos y respiraciones salían de su boca.

-Joder _tomó a la pelirosa del pequeño cabello haciéndo que introdujése por completo el miembro en su boca_

La pelirosa emitía sonidos, sentía como si estuviése ahogándose, pero quería seguir haciéndolo. Luego de un tiempo el pelinegro agarró fuertemente y acercó aún más a la pelirosa, se vino en su boca soltándola de golpe provocándo que ésta cayera sentada hacia atrás.

El pelinegro dirigió su mirada a la pelirosa, estaba en una pose de suma tentación, estaba con sus piernas dobladas apartir de sus rodillas, estas estaban al lado izquierdo, se sostenía del piso con la mano derecha, mientras que con la izquierda retiraba parte del semen que había caído en su rostro.

La pelirosa alucinaba tras aquel momento, sentía su interior completamente mojado, respiraba agitadamente. El pelinegro la jaló de la mano haciéndo que se levantáse, la sentó encima de él provocando que ambos se mirásen. Hizo las bragas de la chica a un lado con sus dedos y colocó su pene en la entrada de la chica haciéndola gemir.

-S..señor.

-¿Qué?

-Y..yo _hacía su mirada hacia un lado completamente roja_

No hacía falta que emitiera más palabras ya que el pelinegro entendió perfectamente. ¿No se suponía que esta chica era una prostituta? Había notado que no sabía nada del tema, ya que antes lo había demostrado, pero lo comprobaría una vez que estuviera dentro de ella.

-Controlalo tú _dijo_

La pelirosa se sorprendió, él ¿La dejaría tomar el control de la situación?

Colocó sus manos en la cintura de la chica mientras ella enrollaba sus brazos alrededor de su cuello.

Comenzó a deslizarse hacia abajo introduciéndo el miembro en su interior, lo hacía lentamente mientras gemía en el oído del pelinegro sin compasión.

Unos instántes después ya estaba completamente dentro, comenzó a moverse lentamente hacia arriba y hacia abajo adecuándose, luego lo hizo más rápido provocando gemidos entre ella y él.

Si que era verdad, ella era virgen, el pelinegro no lo podía creer, estaba tan estrecha. Los gemidos de la pelirosa se intensificaban cada vez más hasta que el pelinegro no pudo aguantarse.

Se levantó con ella encima, había enrollado las piernas a su cadera, la presionó a la pared mientras colocaba sus manos en el trasero de la chica. Se besaban sin control, sus lenguas tenían una pequeña guerra la cual él ganaría. La penetraba una y otra vez, lo hacía velozmente y luego disminuía la velocidad.

-Oh, Señor _gemía cada letra en su oído_

Aquello no hacía más que exitar al chico, la arrojó a su cama mientras la pelirosa solo quería que la penetrara más.

-S..señor.

-Pídelo.

-Oh señor _decía entre gemidos mientras acercaba su pene a la entrada_ fólleme _el pelinegro introdujo su miembro por completo sin moverse una vez estuvo detro_ hágame suya, porfavor.

El chico colocó las manos en la cintura de la chica mientras él se encontraba de pie y comenzaba a penetrarla lentamente.

-Joder, rápido.

Rió ante tal comentario y lo hizo aún más lento al ver la reacción de desesperación en la chica. Se deleitaba con los pechos de la pelirosa, eran firmes y redondos, agarraba uno con fuerza mientras que mantenía su otra mano en la cintura de la chica. Cada vez que apretada uno de los senos la pelirosa soltaba un quejido junto con un gemido. Colocó nuevamente la mano en la cintura de la chica y la penetró rápidamente hasta que ambos llegaron al clímax, la pelirosa soltó un gran gemido mientras el pelinegro caía sobre ella sin aplastarla.

Ambos tenían sus respiraciones sumamente agitadas, la pelirosa en un tierno acto comenzó a acariciar el cabello del chico provocándo en este un raro sentimiento.

Clavó sus colmillos en el cuello de la chica provocando un quejido y que ésta la jalara un poco el cabello, se alimentó de aquella sangre que tanto anhelaba para luego lamer la herida que había provocado haciendo que cicatrizara rápido. La cargó y la colocó a un lado de la cama mientras se quedaba dormida.

Se dió un baño y se colocó unos pantalones de pijama, acarició el rostro angelical de la pelirosa y se acostó a su lado.

-Joder _vió la hora en el reloj_ ¿Siete de la mañana? Mierda _se levantó y se arrodillo a recoger su uniforme y zapatos_

-Te bañas aquí _decía una voz masculina sin voltearla a ver_

Entró al baño y cerró la puerta, decidió bañarse bajo la regadera ya que la bañera tomaba más tiempo, la prendió y dejó que el agua se deslizara por su cuerpo.

-S..señor _gemía mientras él la pegaba contra la pared y la penetraba rápidamente_

Pasaba las manos por su cabello para que el agua penetrara con mayor facilidad.

-Joder _decía mientras me tomaba de mi pequeño cabello haciéndo que introdujése por completo el miembro en mi boca_

Terminé de ducharme y de vestirme, debía ir a mi habitación a cambiarme por un uniforme nuevo. Salí de la habitación componiendo la falda de mi traje.

-¿Sakura?