Sirvienta de los Uchiha's [+18]

Cinco

-Pero nada, Madara _tomé a Sakura entre mis brazos_ ¿Vas a quedarte ahí mirando?

Ambos pelinegros bajaron al sótano, donde suelen llevar los cargamentos, y la dejaron sobre el suelo.

-Vale _cerraban la puerta y caminaban hacia la habitación del mayor_ Entonces _buscaba entre sus cosas_ recuerda, Sasuke _le acercaba un látigo_ solamente cinco veces ¿Vale?

-Solo dame eso _intentaba quitárselo_

-Sasuke, solo en el área inferior de su cuerpo_le tomaba de la barbilla con fuerza para que le miráse_ y cinco latigazos, ¿Entiendes?

-Vale _le entregó el objeto_

PRESENTE

Tragué saliva.

-Uno _un latigazo se impregnó en mis glúteos fuertemente provocándome gemidos de dolor_ S...Sas..

-¡Cuenta! _gritaba_

Mi mandíbula temblaba al igual que mis manos, mis ojos se cristalizaban y lágrimas recorrían mis mejillas.

-D..Dos _me golpeó nuevamente_

Pasaron alrededor de diez minutos, la pelirosa fue una eternidad entre gemidos, quejidos, súplicas y sollozos.

-C..Cin... _su voz temblaba_ Cinco.. _agarraba con fuerza las cadenas de sus manos_

Por la cabeza del pelinegro solo podían pasar imágenes de la chica entregándose a su hermano. Dió otro latigazo, esta vez en su espalda.

-!S..Sas..! _el pelinegro intesificaba los golpes_ P..Por...Porfavor _sus ojos se habían tornado color rojo_ S..Sasuk....Sasuke _rogaba por que paráse_

Le golpeó por unos seis minutos más provocándo que su espalda sangráse. Desató una de sus manos y la empujó provocándo que cayése de la mesa hacia el suelo, soltó un quejido de dolor al sentir sus glúteos lastimados contra el piso.

-¿Le disfrutaste tanto? _cerró su puño apretando con fuerza el látigo_

-S..Sasuke _estiró su mano para tratar de tocarle_

Estiró su mano para tocar el brazo del pelinegro, se sentó sobre él e introdujo su miembro en su interior.

-Oh, Tobías sama _gemía en su oído_

Entraba en la habitación y miraba a su hermano de espaldas y a su "amada" sobre él mientras le mordía el lóbulo de la oreja.

-¿Y ahora qué haras Sasuke sama? _una sonrisa brotaba de la boca de la pelirosa para proseguir a devorar los labios de su hermano.

Sintió un cálida y temblorina mano en su brazo que le sacó de su pensamiento, inmediatamente dió un latigazo que se impregnó en el seno de la pelirosa.

El símbolo en el ojo del pelinegro evolucionó al igual que la expresión en su rostro, estaba completamente fuera de si, comenzó a dar latigazo tras latigazo, sin fuerza medida, sin lugar asignado, sus oídos escuchaban los gritos y súplicas de la pelirosa pidiéndo su perdón.

El cuerpo de la pelirosa ha dejado de temblar, sus lágrimas se han detenido, las súplicas y quejidos no salen más de entre sus labios su mirada completamente perdida en la nada.

-Si se la dejo pasar, lo hará una y otra vez, Madara. Debo ponerle un alto.

-Te duele más a ti de lo que le dolerá a ella, ¿No es así, hermanito? _se cruzaba de brazos_

-Calla _tomó el objeto_ es lo que debo hacer, es una sirvienta.

El pelinegro daba su último latigazo y soltaba el objeto dejándolo caer en el suelo mientras sus ojos volvían a la normalidad, miraba el cuerpo sin movimiento de la pelirosa y salía por la puerta.

-Has tardado más de lo que.... _pasaba de los regaños de su hermano, con la mirada perdida y en silencio_

El mayor entró en aquella habitación encendiendo todas las luces, observó el lugar en busca de la pelirosa, le miró tumbada en el suelo, sin decir palabra, sin hacer movimiento, sin nada. Se acercó y miró su cuerpo, completamente destrozado.

-Sasuke _gritó_

Centré mi mirada en unos negros zapatos que habían entrado en aquel lugar, no podía moverme, el dolor había paralizado mi cuerpo, la voz no salía de mi garganta, mis cuerdas se habían agotado de tanto gritar. Levanté mi mirada para encontrarme con el señor Madara, mientras escuchaba pasos de fondo, alguien venía.

-S..se _hacía un esfuerzo por hablar_ s..señor _se acercó y se agachó_

-S..Sakura _tragó saliva_

-M..Máteme _decía en un susurro antes de desvanecerme_

El cuerpo de la pelirosa empezaba a convulsionar de dolor.

-U..Un _se levantó inmediatamente y salió del sótano hacia la sala_ ¡Un doctor!

Confirmen que tod@s odiamos al Sasuke.