VESUBIO: UN AMOR SEPULTADO © ANÁNKE #2 YOONMIN

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- ¿Por qué sigues insistiendo Nam? - Jin quien estaba sentando sobre una manta, bajo los suaves y cálidos rayos del sol, seguía sin entender porque su pareja desea esculpir al acompañante de su primo y no a él.

- Ya te lo había dicho Cariño, sus rasgos son más suaves y su anatomía es pequeña y delicada... Sólo es perfecto, sería una de mis obras maestras. - Comentó el moreno mientras hacia un boceto de su pareja.

- Pues tendrás que buscar a alguien más Nam, estoy seguro de que YoonGi te dará un rotundo no. - respondió el chico dejándose caer en la manta mirando el cielo azul y las nubes blanquecinas que lo adornaban.

- SeokJin, no te cambiaré por nadie, tú me apoyaste siempre e incondicionalmente, solo lo veo como una musa diferente, no es nada del otro mundo. - Aseguró dejando de lado su boceto y su lápiz para acercarse y abrazar al mayor.

- Nam, sólo procura que no te mande a decapitar, aún quiero vivir mi vida contigo. - Giró sobre sí para esconder su rostro entre el cuello del menor, abrazándolo con necesidad, se estaba volviendo dependiente a tenerlo cerca, era como su pequeña fuente de felicidad, cordura y amor. Se sentía muy seguro y amado a su lado.

[...]

SeokJin y NamJoon acaban de llegar a casa de YoonGi, el artista estaba completamente anonadado ante tantas piezas únicas e inigualables que se encontraban en el lugar.

- Por favor pasen a la oficina del senador, el vendrá dentro de poco. - Una de las empleadas guió por el lugar a la pareja hasta dejarlos frente a la puerta indicada.

El solicitado venía de la dirección contraria, mientras trataba de arreglar su desordenado cabello, la razón, acababa de terminar una sesión de besuqueo intenso con JiMin, hasta que a su maravilloso primo le dió por interrumpir su segundo momento íntimo del día.

- ¿Qué mierda quieres?, no te ofendas NamJoon, pero que mi primo venga significa miles de problemas para mí, así que espero comprendas que no me cargo mucha paciencia con nadie. - el moreno asintió algo apenado, con el genio del hombre frente a él no sabría si lograría salir vivo de allí.

YoonGi entró en su oficina, algo más calmado debido a que no había sido bombardeado por comentarios inapropiados o pasados de tono por parte de su primo.

- No me mires a mí, si vas a pelear con alguien es con Nam, pero no quiero que lo mates, solo escúchalo y lleguen a un acuerdo como hombres civilizados. - Ésta vez fue Jin quien habló con madures, tratando de ponerse al margen de toda la situación, suficiente tenía con que su hombre quisiera esculpir a otro hombre desnudo en vez de a él.

- Aah, ¿Sí? - YoonGi posó su mirada en el hombre de mayor estatura, sus facciones estaban tensas, algo le decía que lo que estaba a punto de salir de la boca del contrario lo haría enojar.