Chaotic love

La agonía de no recordar

Ante tal visión, intenté calmarme sin mucho éxito. Di un rápido repaso por la habitación y pude localizar mis prendas de ropa.

Desperdigadas por todo el suelo. Como si me las hubiera quitado con prisa.

¿Qué hecho podría haberme hecho querer quedarme desnudo a toda costa?

Tal vez fuera el calor, eso es. Me moría de calor y me quité la ropa.
Después recordé que estábamos en Diciembre.

Tras analizar la situación mientras que el chico que tenía al lado seguía durmiendo plácidamente como si no hubiéramos cometido algún acto probablemente no muy puro e ilegal (este tipo de encuentros solo estaban autorizados entre parejas asignadas) y que si nos pillaban ahí podíamos ir a la cárcel ese mismo día. Me imaginaba las portadas de los periódicos, anunciando a toda Corea como un crimen se había cometido en la noche de la boda más importante del año. No podía dejar que pasara.

Me levanté para ponerme la ropa más rápidamente posible e irme de ahí porque lo último que quería era despertar al actor y tener que hablar sobre lo ocurrido. Estaba decidido a no volver a hablar con él ya más. En la vida.

Cogí mi móvil, que también estaba tirado en el suelo y comprobé que tenía el buzón lleno de mensajes y llamadas de Jimin.

00:00
Jimin: Donde estás?
00:20
Jimin: Pensaba que estarías con Yoongi y Hoseok pero me acaban de decir que no te han visto en toda la noche
00:55
Jimin: Tae llamame porfa, tengo que hablar contigo
1:40
Jimin: Mira te voy a matar
Jimin: Perdón es que estoy nervioso
Jimin: Ya pronto iremos a la suit nupcial
Jimin: Es muy majo pero no quiero hacer nada con él
2:00
Jimin: Está en el baño sos
Jimin: si salto por la ventana crees que morire? Solo estamos en el piso 80
Jimin: Uno de los dos igual pierde la virginidad hoy y tu sin responder muy bonito te parecerá
2:55
Jimin: vale 😭 es muy mono el tampoco quería hacer nada pero NOS HEMOS ROZADO LA MANO
Jimin: Su mano es super suave tengo que preguntarle que crema usa
Jimin: está ya durmiendo y quiero tocarle la mano pero no me puede dar permiso ahora
3:15
Jimin: estaba mirando su mano y me he fijado en que llevaba un anillo y por un momento me he preguntado a quien estaba casado
Jimin: es a mi LOL no me acordaba
Jimin: buenas noches, te odio

Tragué saliva mientras leía los mensajes. Realmente era un amigo horrible. Guardé el móvil y asegurándome que no se me olvidaba nada (a parte de mi virginidad) me deslicé por la puerta y cerré cautelosamente. Miré hacia los lados del pasillo por si había alguien que podría verme, pero al comprobar que estaba desierto, caminé hacia donde supuestamente debía estar la habitación que me correspondía y en la que debería haber dormido.

Ya en la habitación intenté conciliar el sueño de nuevo ya que después de tal fiesta, no empezaría haber movimiento hasta después de mediodía. Me era imposible, todo recuerdos y flashbacks del día anterior acudían a mi mente, atormentándome. Intenté recordar más allá, pero la última memoria que tenía era su risa. Su risa.

Me tumbé boca abajo y con la almohada acallé un quejido de desesperación. Ojalá nada de esto hubiera pasado.

Estaba jugando con el móvil para mantenerme entretenido cuando alguien llamó a mi puerta.

— ¿Tae? — dijo la voz correspondiente a mi mejor amigo.

Jimin abrió la puerta sin esperar respuesta. Se quedó en el umbral, observándome con la ceja alzada.

— Estás vivo.

Yo me acomodé en la cama intentado buscar excusa alguna.

— Yo... Eh, lo siento. — pude decir.