Serie de mini-historias de Sakura con motivo al evento #MultiSakuMonth2020

MadaSaku. Te seguiré esperando.

Ella no sabía cómo fue que acabó en el cuerpo de una niña, porque su vida había terminado.

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Después de que su familia había hecho un trato con el clan Senju, comenzó a vivir en una aldea.

Aunque no compartía lazos sanguíneos con el clan Uchiha, Sakura sentía una conexión muy importante con ellos.

Especialmente con el líder del Clan.

Uchiha Madara le había salvado la vida, le dio una oportunidad de ser una persona libre y siempre estaría en deuda.

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Su nombre es Haruno Sakura, tiene 10 años. Aunque su mentalidad era de una mujer de 25 años.

Conservaba su nombre original pero este no era su vida.

¿Será que fue salvada de nuevo?

No estaba segura de cómo pasó todo. 

Trató de encontrar respuestas en una aldea donde ya había vivido pero los cambios en ella la sorprendieron. 

Primero que nada, Sakura se dio cuenta que Senju Hashirama ya no era el Hokage actual, sino un tal Sarutobi Hiruzen.

Así que había viajado muchos años en el futuro y las personas que conocía, ya no estaban.

El complejo Uchiha ya no existía y solo había un Uchiha sobreviviente de una masacre impulsada por otro del mismo clan.

¿Ahora que iba a suceder con ella?

Siempre vivió para ayudar y proteger al clan que la cuidó desde pequeña. 

¿Y ahora qué?

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—¿Pasa algo Madara-sama? —pregunta Sakura al verlo salir molesto de un local de armas. —¿Madara-sama?

Sakura lo sigue hasta llegar a las cercanías del Clan Uchiha. Algo le habían dicho a Madara para verlo así de molesto.

—¿Madara-sama?

El hombre de cabello oscuro se detuvo para después girar hacia Sakura.

—¿Hay algo de lo que tengas que decirme Sakura? —la joven de ojos jade solo niega. No tenía nada que ocultarle a Madara. —Entonces, ¿Por qué el hombre de la tienda de armas me ha dicho que han pedido tu mano?

—¡¿He?! —exclama Sakura sorprendida.  —¿Qué tontería está hablando Madara-sama?

Madara solo suspiró.

—Me sorprendí, por el hecho de que el señor de la tienda me felicitara por tu compromiso de matrimonio.

—Es una tontería Madara-sama. —exalta Sakura. —Yo nunca abandonaría al Clan Uchiha, además mi deber es estar a su servicio.

Madara sonríe. 

—Eres una hermosa y buena mujer, Sakura. —gira volviendo a su camino. —Vamos a casa.