Experimento Homosexual

Día 14

Avances: Ningún avance. 

Anotaciones: Ayer le envié la carta a Dean mediante Key y creo que ella lo obligó a leerla.
Aún no me contestó pero supongo que debo dejar de lado mi intensidad e intentar darle un poco de tiempo.
Hoy arreglaré mi curriculum para buscar trabajo. 

Datos: - - -

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Estaba frente a la computadora de mi casa arreglando lo último sobre mi currículum con Key, quien me aconsejaba en el tema. 

—¿Crees que tendré suerte?—le pregunté nervioso cuando finalizamos de una vez por todas. 

—Yo creo que sí ¿Tienes que llevarlo o...?

—Hay uno que debo enviarlo a la página oficial de la empresa, los otros debo llevarlos en persona—le conté con mis manos temblando. 

No había nada que me atemorizara tanto como el fracaso. 

—Pues hazlo. 

—Sí, lo haré. 

Sin embargo no moví ni un dedo y Key me miró extrañada mientras esperaba que me animara. 

Para intentar aplazar el envío del curriculum decidí cambiar de tema a algo que últimamente me había llamado la atención. 

—¿El dinero que me ofrecías era real?—le pregunté intentando saciar mi curiosidad. 

—Lo era ¿Quieres que te...? 

—¡Claro que no, tonta!—la frené antes de que mi Seth ambicioso dijera que sí—Solo tengo algo de interés porque era bastante dinero. 

—¿Y eso qué?—preguntó mi hermana a la defensiva. 

Sus ojos marrones parecían abrirse de par en par e hizo una mueca molesta. 

Era exactamente como cuando yo quería ocultar algo.

—Es extraño para una estudiante tener esa cantidad de dinero—solté lentamente—Sabes que no le diré nada a nadie, Key... Es solo que me preocupa que andes en cosas raras.

—¿Y recién ahora te interesa? Al principio solo te importaba tu pago. 

¡Excelente! ¡Uno intenta tener la paciencia para cambiar pero evidentemente hay gente que no lo permite! 

Suspiré, intenté tranquilizarme y acepté su respuesta. 

—No debes decirme si no quieres. 

Un silencio se estableció entre mi hermana y yo y supe que si había podido soportar no soltar un insulto cuando me había contestado de esa forma, seguramente podría enviar un curriculum. 

Cuando toqué el botón de enviar tuve unos segundos de gloriosa seguridad. 

—¡Ya está enviado!—dije algo aliviado. 

—También estoy haciendo algunas cosas mal—murmuró sorpresivamente Key mirando el suelo—¡Pero no tan mal como tú! Nadie puede cometer los errores que tú... 

—Está bien, está bien ¿A qué te refieres entonces? 

—Hay alguien... Esta persona haría cualquier cosa por verme sonreír y tiene mucho dinero, así que todo lo que pido me lo da—me contó entre susurros para no ser oída por ninguno de mis hermanos que pasara por ahí—Está financiando mis experimentos porque al parecer yo le gusto mucho... Y aunque ya le aclaré que no me gusta de esa manera... 

—Deberías dejar de hacerlo—le contesté opinando sobre la situación—No aceptes ese dinero, no está bien. 

—Lo sé.