Te amo Charlie Beckendorf

Chuck

POV. CHUCK

Hola, soy Chuck Laverhood y te aseguro que tengo todo lo que tú sueñas. Tengo 17 y voy a Riddle. Mis padres son millonarios y vivimos en una mansión en San Francisco. Recientemente llegó una nueva llamada Silena que esta buenísima, pero es la única que se resiste a mis encantos. Ni siquiera la he besado aún, pero tampoco ayuda que se junte con Charles Beckendorf ya que él y yo tenemos una historia complicada.

----------------------------------Recuerdo-----------------------------------------

Los dos teníamos 16 y estábamos en la cafetería, y a mí me gustaba una chica llamada Nicole, pero a ella le gustaba él. Entonces cuando ella me rechazó, yo la tomé del brazo y la atraje hacia mí, pero cuando me iba a ir con ella, llegó Charles y me pegó un puñetazo acompañado por un "¡SUÉLTALA!" y yo me agarré la cara y la dejé ir. Pero ahí no se acaba la historia, porque yo me paré y nos empezamos a pelear. Después terminamos en el piso y los profesores llegaron y nos retaron (¿cómo se atreven, acaso no saben con quién están hablando?) y nos suspendieron. Gracias a eso mi padre me dejó sin auto por un año. 

En cambio a él su abuela (porque no tiene padre ni madre, nadie sabe quienes son), lo recompensó con un auto, por defender a esa chica. 

--------------------------Vuelta a la normalidad------------------------------

Ahora la suerte la tengo yo, porque Silena me dijo que quería ir al baile juntos. Y sinceramente ella debe ser la chica más linda que jamás he visto. 

POV. SILENA

Después de decirle a Chuck que iría con él al baile, me fui al tiro para no tener que soportar su cara de "GANÉ". Entonces me llega un mensaje el móvil:

(cursiva: Charlie, subrayado, Silena)

Oye, Silena, ¿ya tienes pareja de baile?

SÍ, sí tengo. Es Chuck. SI sé que no te agrada pero quiero ir con él.

Okey, no hay problema. Solo cuídate.

Si obvio, no te preocupes. Tú cuídate también.

POV. CHARLIE

Después de tener esa incómoda charla por Whatsapp, me fui a buscar a Percy, porque hoy todos, menos Silena, nos íbamos a su casa. Lo encontré... bastante ocupado: Estaba en el medio de un círculo de gente, peleándose con Luke Castellan. La rivalidad entre ellos dos era conocida, a decir verdad todos estábamos esperando a que pasara esto. Se estaban agarrando a puñetazos, patadas, de todo. Pero yo como buen compañero hice ademán de sacarlo de ahí, pero él se negó y dijo.

-Déjame matarlo- dijo con demencia en sus ojos.

- Suéltalo,- pero después pensé y me di cuenta de algo- pero tú nunca te peleas, porque tienes un trato con.. oh- ahí fue cuando me di cuenta de que algo serio había pasado- ¿qué dijo?-

- Dijo que Annie...- se interrumpió a sí mismo- le llamó tonta y que estaría mejor con él.- dijo enojado-

-Ohhhh, okey..- le respondí- vámonos, no nos queda nada aquí- 

- Si,si...- respondió él-

Y me lo lleve de ahí. Nos fuimos caminando hacia su casa, porque vivía muy cerca del colegio. Ya ahí nos acomodamos y finalmente le pregunté:

- ¿la extrañas?- le dije tratando de sonar comprensivo-

- Sí- dijo el borrando esa usual sonrisa de su rostro- y mucho, la extraño tanto como Leo a Calipso...-empezó a decir Percy cuando una voz de afuera lo interrumpió-

-HOLAAAAAA- se escuchó la voz de Leo- ¿estaban hablando de lo genial que soy?- dijo cuando se apareció por la ventana esperando a que le abran-.

-Hola Leo- dije- al tiro abro..-empecé abriendo la puerta- pasen..-

Venía con Frank. Los dos tenían aspecto de haber estado en una pelea. Tenían rasguños por todo el cuerpo y la ropa rasgada. Tenían barro en las rodillas y en la cara.

- ehhh, ¿puedo preguntar... qué les pasó?- dije totalmente calmado (noten el sarcasmo)- se ven un  poco... como decirlo... desaliñados-

-oh esto... -empezó Frank-no es nada-

- sí... la cosa es que... bueno, ¿conocen a los amigos de Luke?- dijo Leo. Nosotros asentimos- Bueno Chuck y Micheal empezaron a burlarse de ustedes... y bueno...- dijo Leo-

-Ah, okey-dije entendiendo el mensaje- Gracias.

Ellos asintieron y se fueron a dar una ducha en el baño de Percy. Después todos nos sentamos en la mesa y empezamos a hablar del baile, porque también nos habíamos reunido para ver qué nos íbamos a poner y eso. Y fue ahí que me preguntaron qué iba hacer con Silena. Sinceramente no sabía, pero no podía dejar que vaya con Chuck. Ellos intentaron tranquilizarme, aunque sin mucho éxito. Después hablamos del campamento:

- Entonces...-empezó Leo- ¿es verdad que vamos a volver después del baile?-terminó con  un brillo en los ojos.-

-Parece que sí,- le respondí de la misma manera- ojalá, porque no aguanto más aquí-

-Lo mismo- respondieron todos al unísono, con cara de soñadores-