Infiltrada en Durmstrang

Capítulo tres. || Primera temporada.

Isabelle: Podemos hacer el trabajo de vampiros, nos subirán la nota porque son seres extintos y es difícil sacar información. - sugirió ladeando la cabeza.

A Alexander obviamente no le gustó la idea.

Alexander: ¿Eres tonta o te lo haces? - suspiró rodando los ojos - Ya te dije que nuestra familia se encargó de todos los vampiros en el mundo, estan muertos, punto. Además, hay poca información. - recordó bastante harto.

Isabelle sabía que toda la familia Lightwood había matado a los vampiros hace años, pero ella aún tenía esperanza de que quedara al menos un vampiro deambulando entre los humanos para resolver todas sus dudas. Aparte, Isabelle era una gran fanática de los vampiros, lo que la hacia totalmente diferente a su hermano. Alexander odiaba a los vampiros con todo su ser, como debería hacer Isabelle por las acciones de su familia, pero igualmente, él no odiaba a su hermana, sólo le molestaba un poco que fuera tan fanática.

Isabelle: Pero ¿que hay de la marquesa? - alzó una ceja.

Cogió a su hermano de la oreja, haciendo que él soltara un quejido lastimero por su parte y fueron por los pasillos así hasta llegar a la biblioteca, algo que a Alexander se le hacía algo humillante.

Isabelle: Ya verás, de la marquesa si que hay mucha historia, además nadie lo hará sobre los vampiros, por eso presentaremos el mejor trabajo.

Alexander rodó los ojos. Llegaron hasta el escritorio de la bibliotecaria. Isabelle estaba muy ilusionada, sin embargo, Alexander obviamente no tanto.

Isabelle: Hola, queremos información de la marquesa de los vampiros. - le dijo a la bibliotecaria.

Alexander: Izzy - puso su mano en el hombro de su hermana -, estará en la sección prohibida. - la bibliotecaria asintió con la cabeza.

Isabelle: Señora Krzystof, ¿desde cuándo hay una sección prohibida? - preguntó con el ceño fruncido.

Alexander se dio una palmada en la frente.

Alexander: Izzy, eres imposible. Todas las escuelas mágicas tienen una en su biblioteca.

Krzystof: El señor Lightwood tiene razón, aunque os dejaré pasar porque sé que no tenéis malas intenciones.

Alexander: Es para un trabajo de Artes Oscuras, mi hermana insistió para hacerlo sobre los vampiros.

Isabelle contuvo la risa y le sonrío a la bibliotecaria.

Isabelle: Gracias.

Ella y su hermano entraron a la sección prohibida, Isabelle más emocionada que nunca.

Isabelle: Ser un Lightwood tiene sus ventajas. - susurró entre risas y guiñó un ojo, pero Alexander seguía tan inexpresivo como siempre.

No había ni dios, todo estaba tan callado que podían escuchar sus respiraciones.

Alexander: Accio libro de vampiros. - dijo Alexander con su varita en alto y de mala gana.

Isabelle: Alec, ¿tu no querías hacer esto, o si? - alzó una ceja.

Alexander: Acabaremos antes. - un libro bastante viejo y polvoriento fue a parar en las manos de Alexander.

Isabelle lo cogió y lo abrió por la mitad en la mesa

Isabelle: Transición, sed de sangre, leyendas antiguas... - iba leyendo mientras pasaba páginas.

Alexander: Así nunca encontrarás información de la mar...

Isabelle: ¡Aquí está! - lo interrumpió emocionada - La marquesa de los vampiros, llamada Kasandra Greengrass, fue una vampiresa con habilidades que otros vampiros son incapaces de hacer. - empezó a leer, Alexander escuchó de mala gana.