- Hace dos años -
Eleanor se había despertado temprano para prepararle el desayuno a Harry, era el último día que le habían dado como plazo y aún no podía confesarselo.
¿Se marcharía sin decirle?
Puso el plato con fruta picada en el comedor y regresó por el omelet y la jarra de jugo de naranja.
Harry salió de su habitación y le sorprendió ver la mesa servida, Eleanor llevaba dos semanas en su departamento y normalmente el se encargaba de hacer de comer.
-Te he preparado el desayuno.
-Gracias- Harry se sento con una sonrisa- ¿A que se debe esto?
-Es mi manera de decir gracias por estas dos semanas- se sento enfrente de Harry y le sirvió un poco de jugo- No se que haría sin ti.
-Vivir en la calle... ¿Qué te pasa Eleanor? - Harry se sirvió fruta- Estás muy rara y callada.
-Nada... Hoy visitaré a mi hermano en su escuela- sonrió- Voy a cenar con el... Así que posiblemente no estaré cuando vuelvas.
-¿Donde van a cenar? Pasame la dirección para acompañarlos
-No, no es necesario... Estas muy ocupado y llegas cansado ademas mi hermano va a querer privacidad... Lo siento, te veré en la noche.
-Esta bien- sonrió- Voy a pasar por un supermercado y traeré nieve y papas, veamos una película.
A Eleanor le dolió el corazón por mentirle solo pudo asentir.
-Tiempo actual-
Harry se arrodilló a un lado de Eleanor y la miró en silencio mientras acariciaba su cabello y mejillas, casi podía jurar que la chica sufría aún en sus sueños.
El no había planeado enamorarse de la misma mujer que su mejor amigo, pero Eleanor se había ganado su corazón tan fácil tanto que ahora le dolia verla tan débil y derrotada, suspiro y limpio una lagrima que derramó por su mejilla sin pensar, enserio le dolia verla de esa manera, siempre la había visto como alguien fuerte e independiente, sonreía y era amable con todos, hasta con las personas que no lo merecían, su sonrisa estaba clavada en su corazón.
Y ahora ya no estaba.
-Yo te protegeré Eleanor...- sollozo- Te daré la libertad que te mereces... Pero tal vez no pueda darte felicidad... Voy a cumplir mi promesa de protegerte... Aunque sea de la persona a la que le hice la promesa...
Harry sabía que se acercaba el final de su amistad con Louis, era algo que no iba a poder evitar por Eleanor.
No cedería esta vez, no bajaría la guardia... No perdería de nuevo a esta mujer.
Ojala se hubiera dado cuenta hace dos años y no la hubiera dejado ir ni salir de su departamento aquella vez,se sintió horrible esperar toda la noche y que no volviera y se sintió aún peor ver que se había llevado todas sus cosas.
Lo siento Louis, esta vez cumpliré mi promesa.
.....
Cuando Eleanor despertó se encontraba en su cama... ¿Cómo había llegado ahí? Lo último que recordaba era haberle confesado a Harry toda la verdad...
Se sento de pronto... ¿Le había dicho toda la verdad a Harry? ¿Al mejor amigo de Louis? ¿Acaso se había vuelto loca?
La puerta se abrió dejando ver al chico castaño, traía una bandeja en las manos.
Le había preparado unos panqueques.
¿Qué tramaba?
-¿Qué es esto?
-Tu desayuno.
-¿Qué diablos estás haciendo? - lo miro- Yo...yo...yo me volví loca ayer... No se porque dije todas esas mentiras absurdas.
-¿Eran mentiras? ¿Enserio? Yo creo que mientes ahorita.
-¡Harry!
-Esta bien Eleanor... No le diré a Louis.
La chica solo lo miró.
-Si tu no estas lista no se lo diré... Me alegra que ahora tengas a un aliado en esto- se sento a su lado en la cama- Debiste haberte sentido muy sola estos dos años... ¿Porque no me dijiste ese día? Antes de desaparecer.
-Tenía mucha vergüenza- tomo un pedazo del pan y se lo llevó a la boca- Siempre he creído que el dinero no puede comprar a las personas... Y muy fácilmente me trague mis palabras.
-Era tu hermano... No el dinero.
Harry tomó un pedazo de pan y se lo comió.
-¡Hey! Eso es mío.
Harry sonrió al escucharla un poco más animada.
-¿Qué voy a hacer ahora?
-Louis sabe la dirección de este departamento...- Harry suspiro- Se la dije antes de venir aquí, le he dicho que no estabas...
Eleanor sintió desesperación de nuevo.
Harry tomó su cara entre sus manos e hizo que lo mirara a los ojos.
-Ven a vivir conmigo.
-¿Qué?
-Piénsalo Eleanor... Sería el menor lugar que Louis te buscaría, es absurdo que regresaras a mi departamento después de la manera en que nos gritaste a ambos, el y yo siempre nos vemos en la oficina o en restaurantes... Y ahora soy un aliado para ti- sonrió- Es fácil... Ven a vivir conmigo.
