1 de septiembre

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Alex despertó con la claridad que molestaba en sus ojos azules, se levantó y cuando tuvo un pi en el frío suelo se dió cuenta del gran día que era, se duchó y se puso directamente la túnica emocionada. Su madre le tenía el desayuno preparado y mientras comía cereales entraron por la puerta Anna y su madre, Anna tenía cara de querer dormirse de pie. Se sentó al lado de Alex y puso la cabeza sobre la mesa, pero la despegó en seguida cuando recordó lo que traía para su amiga.
-Tengo algo que puede ser muy útil en Hogwarts.
-¿que es?
Anna sacó una libreta donde apuntó un montón de cosas los últimos meses.
-Rojo: CORRE, te va a matar. Azul: va a entrar en depresión. Verde: está mintiendo. Amarillo: demasiado contenta. Blanco: Hola, estoy casi muerta o desmayada y....no tengo mucho más, pero igual puede ser útil.
-Muy útil, imagínate que me da un ataque de pánico en clase, eres tú quien me va a salvar, ¿no?
-Obviamente, ¿quien si no?
-Am....chicas, no quiero desilusionaros pero...¿que pasa si os toca en casas distintas? a lo mejor no tenéis todas las clases juntas...
-Hablaré con Dumbledore...-dijo la madre de Alex.
-Anna, ¿no crees que es ir demasiado lejos?
-¿¡que?! ¡venga ya! ¡Anna seguro que cuida de Alex como nadie! ¿cuando le den sus ataques de pánico? ¿o cuando vayan a...a....a....? me va a dar algo....¡dame papel!- Alex le dio rápido un papel y una pluma, cogió el tintero y escribió una carta. -Quiero que se lo des a Dumbledore desde que termine el banquete. ¿¡capici?!
-Sisisisi.-dijo con miedo Alex cogiendo la carta de su madre.
-Y que te acompañe Anna.
-Ok...
-Pero hay que avisar a los prefectos antes de que os vayáis, es más, que os lleven ellos.
-Lo daba por hecho mamá.-dijo Anna dejando la obviedad al aire.
 -Se va a hacer tarde...-dijo Anna (la mayor xd) recogiendo el tazón vacío de su hija.
Se agarraron todos a la madre de Alex y desaparecieron, aparecieron en la estación de trenes King's Cross, en una esquina donde nadie las veía, caminaron hacia el andén, las madres empujaban los carritos con los baúles y las niñas sentadas encima riendo. Corrieron entre los andenes nueve y diez, detrás de la pared estaba el andén 9 3/4.
Subieron los baúles y se despidieron de sus madres, cuando Anna abrazaba a Anna (la grande xd) le susurró al oído:-No dejes que le pase nada...ya sabes como se altera.
Anna sonrió y asintió antes de subir al tren. Caminaron por el estracho pasillo del tren lleno de gente hasta ver un vagón casi vacío al final.
-No pienso caminar más, entremos aquí.-dijo Anna tocando la puerta. Abrió la puerta.-Hola, ¿podemos sentarnos aquí....? oh no.-dijo al ver al chico que habían visto en la tienda de túnicas de Madame Malkin.
-Hey, tú eres la chica de la tienda de túnicas.-dijo Sirius señalando a Alex.
-Am....sí...- el pelo de Alex se volvió violeta.
-Wow, me encantan las metamorfomagas,  ¿sabes?
-El pelo morado de Alex significa "déjame en paz, me estás incomodando", ¿sabes?-dijo molesta Anna.-¿tú como te llamas?-le preguntó a otro chico que estaba sentado allí, tenía gafas, a diferencia de las de Anna eran cuadradas. 
-Potter, James Potter.-dijo estrechándoles la mano a las niñas.-Anna, ella es Alex.
Anna se sentó lo más lejos posible de Sirius y sacó el Señor de los anillos. 
-¿te lo vas a leer de nuevo?-dijo Alex extrañada.
-Ps, por supuesto, me gusta demasiado este libro es como que muy....creisi xd.
-Pues sí, como nosotras.-dijo con un gesto extraño Alex.
-No vuelvas a hacer eso.-dijo Anna aguantando la risa.
Los otros tres niños hablaban mientras Anna tenía la nariz metida en su libro cuando sin querer escuchó el pensamiento de Sirius <<¿porqué será tan rara?>>
-Rara la put...-Alex le tapó la boca a Anna rápido. 
-Tranquilizate....no quiero que te echen de Hogwarts antes de si quiera entrar.
-Espera....¿como sabes que pensaba eso?
-Muchos lo piensan.-dijo Alex, su pelo se volvió verde y a Anna casi le da algo.
-¿verde? ¿que significa verde?
-Significa que dice la verdad...
-Es legeremante, ¿verdad?-preguntó James.
-Lo es.-dijo Alex xon la cabeza gacha.
-¡ALEX!
-Da igual, siendo amigos tarde o temprano nos íbamos a dar cuenta, ¿no crees?
-¿somos amigos?-dijo mirando al suelo Anna.
-¡Claro!
-¿Y no te importa que...te lea la mente?
-¿Porque debería importarme?-dijo sonriente James.
-¿ves? todos tan amigos, no hace falta que estés enterrada en ese libro todo el tiempo.
-Puff, claro que sí hace falta, si leo no suelo escuchar los pensamientos de los demás.
-Sabía que eres rara.-dijo Sirius con una mueca.
-¡¡yo sabía que eres estúpido desde que te vi!!-dijo Anna levantando la voz.
-¡¡No es mi culpa que seas una friki!!
-¡¡¡Ni mía que tú seas un cabeza hueca!!!
-¡¡Vete a leer mentes por ahí!!
-¡¡ESO HARÉ!!-dijo cogiendo el libro y saliendo con un portazo.
-No tendrías que haber dicho eso.-dijo Alex molesta.
-¿que mas da?
-¿¡que mas da?! ¡¡es mi amiga!! ¡¡ella no puede evitar leer las mentes!! ¿¡te crees que le gusta que no pueda ni estar en silencio un segundo porque empieza a escuchar los pensamientos de todos??!! ¿¿¡¡no ves que está escuchando los pensamientos de tres personas a la vez, no solo los tuyos!?!-dijo Alex antes de ponerse de pie.-¡¡confío en que le pidas perdón!!
Salió del vagón y fue a buscar a Anna, caminó por el pasillo hasta que la vió sentada en el suelo llorando mientras leía y dejaba caer las lágrimas sobre las páginas.
-Anna....-Anna levantó la cabeza y vio a su amiga preocupada, con el pelo azul.
-¿Porqué estás triste? ¿te han hecho algo?-dijo Anna secándose las lágrimas.
-Es que...si tu lloras yo lloro...
-No llores porque si lloras lloro el doble.
-No lloraré, pero tienes que parar de llorar.
-Ok, ya se hizo algo confuso todo esto.-dijo riendo Anna.
-Vamos de nuevo al vagón, Ann...
-Iré, pero solo porque no te quiero ver enfadada...das miedo Alex...-dijo cogiendo su libro del suelo.
Entraron en el vagón y Alex se sentó al lado de Sirius y Anna al lado de James. Sirius solo miraba preocupado a Anna porque tenía mala cara. Alex al ver que Sirius no decía nada y Anna volvía a su libro, le dio un codazo a Sirius.
-Am.....¿Anna?
-¿que quieres, Black?-dijo seca.
-P..perdona por lo de antes.
Anna pasó de él y volvió a enterrar su cara en el libro.
-EJEM.-carraspeó Alex mirando a su amiga.
-Salud.-dijo Anna, levantó la mirada y vio el pelo rojo de Alex.-Te perdono, pero no vuelvas a decir tonterías.
<<como si fuera tan fácil, ¿tiene idea de lo idiota que soy a veces?
-Me lo imagino y... también siento mi reacción, aunque no me arrepiento de lo que dije.
-¡ANN!
-¿que? solo bromeaba, idiota.
-¿amigos?-dijo Alex emocionada.
-Nah.-dijeron los dos a la vez, Anna le sonrió a Sirius y se metió de nuevo en el libro.
<<Vi esa sonrisa, Ann, no me digas que no sonreíste porque lo vi>> escuchó pensar a Alex.
-No hice tal cosa, Alex.-dijo aún leyendo.
<<¿cuando es la boda? ¿seré la madrina?>>
-Por la tanga de Gandalf, Alex, yo no hice eso, déjame en paz.
-¿están locas?-preguntó James divertido
-Sí, mucho.-dijeron las dos niñas a la vez.
El tren disminuía la velocidad y entre la oscuridad pudieron ver una pequeña estación, bajaron del tren.
-PRIMER AÑO, POR AQUÍ POR FAVOR.-gritaba un gran hombre que agitaba un farol.
Caminaron en silencio por un estrecho camino resbalando a tientas, Anna iba molesta escuchando de vez en cuando algún pensamiento de los niños que caminaban con ella.
-Pronto veréis Hogwarts.-dijo el gigante.
Giraron en una curva cerrada y vieron el castillo a lo lejos.
-¿eso es Hogwarts?-preguntó Anna.
-Es Hogwarts.
-¿me estás diciendo que estamos en Hogwarts?
-¡Estamos en Hogwarts!
-Hay que asimilarlo Alex....eso es Hogwarts, estamos en Hogwarts, eso nos combierte automáticamente en estudiantes de Hogwarts....
-Sujétame, creo que me voy a desmayar.-dijo Alex.
Sirius sonrió con esa conversasión, le pareció realmente adorable, James...estaba demasiado ocupado mirando el castillo embobado y no había escuchado nada.
-Júrame que seguiremos siendo una naranja cuando entremos ahí.
-Juro solemnemente que seré la media naranja de mi amiga mientras existan el Sol y la Luna...
-Eso lo has sacado de un libro.
-¿que mas da? quedó genial de mi boca.-dijo Alex altiva.
Se subieron a unos botes que los esperaban en la orilla del lago.
-¡No más de cuatro por bote!
Anna y Alex se agarraron fuerte del brazo y se subieron a un bote, James y Sirius se subieron con ellas.
Navegaron por el lago y Alex fue a meter la mano en el agua, pero su amiga le hizo quitar la mano y rompió el silencio.
-¿¡estas loca?! ¡¡está lleno de criaturas!! ¡te pueden arrastrar a lo hondo!
-Es bueno saberlo.-dijo Alex asomando la cabeza por un lado del bote.
<<¿Porqué siempre tiene que saberlo todo?>> se filtró en su cabeza el pensamiento de Sirius.
-¿Te molesta que estudie, Black?-dijo con un aire de suficiencia.
-No, pero no vayas de lista por ahí, las listas no caen bien.
-Pues seré la más lista, no me interesa caer bien.-dijo prepotente.
-Ann...
-Oh, casi se me olvida, ¿sabes quien si que no cae bien? ¡las manzanas! 
-No me puedo creer que le hayas llamado manzana.
-Le he llamado manzana.-dijo Anna con suficiencia.
-¿me tengo que ofender?
-Se me olvidaba que ellos no lo entienden.-dijo Anna frotandose la frente.-Significa: aburrido, soso, ordinario y mojigato, y yo no me hablo con los mojigatos.
-Pues no me hables.-dijo harto.
-No pensaba hacerlo.
Sirius le sacó la lengua y Anna sonrió.
-¿otra vez?-preguntó Alex.
-¿que?
-¡lo has hecho! ¡dos veces!
-Creo que tienes alucinaciones.-dijo riendo Anna.
Todo se quedó en silencio de nuevo, los botes habían llegado al castillo, subieron por una escalera de mármol hasta una gran puerta donde les esperaba una mujer alta con pelo negro, llevaba una túnica morada y gafas de media luna.
-Buenas noches, al atravesar esta puerta, seréis seleccionados para una casa, a saber: Gryffindor, Slytherin, Ravenclaw y Hufflepuff, seréis puesta en cada una de ellas según las cualidades que ronden vuestra mente, Y...¡señorita, deje de tocar los cuadros!-le peleó a una niña pelirroja.-...En fin, detrás de mi, por favor.-dijo la bruja abriendo el gran portón.
Entraron en un gran salón con cuatro largas mesas colocadas paralelamente y una al fondo llena de adultos que supusieron que era la de los profesores.
-Cuando sean nombrados, se sentarán para ser seleccionados.-dijo la bruja coogiendo un sombrero viejo y descosido.
-Abney, Abraham.
-RAVENCLAW.
-Black, Sirius.
-...... . . .GRYFFINDOR.
-Clayton, Alexis.
-hum..........GRYFFINDOR.
-Dennis, Hannah
-.....HUFFLEPUF
-Elton, Travis.
-HUFFLEPUFF
-Evans, Lily.
-...GRYFFINDOR
-Finnigan, Richard
-GRYFFINDOR.
-Miller, Anna.
-..................................Hum.....creo que lo veo....¡sí! RAVENCLAW.
-Lupin, Remus.
-....GRYFFINDOR.
-Potter, James.
-GRYFFINDOR.
-Petigrew, Petter.
-Am....¿donde pongo yo a este...? ya sé, GRYFFINDOR.
-Pakirson, Perseus.
-SLYTHERIN.
La ceremonia de selección terminó y Anna se sentó en la mesa de Ravenclaw triste  viendo como Anna hablaba con Sirius, James, la niña pelirroja y un chico castaño con ojos miel.
Alex miró a su amiga por un momento, sacó algo del bolsillo de su túnica y señaló con energía la carta de su madre.
Un señor barbudo hizo el silencio en la sala y dijo las normas de la escuela. En los platos apareció la comida, Alex comía contenta. Sirius le fue a quitar algo de la nariz a Alex y ella se sonrojó mucho (imagina un tomate, bien, ahora ponle pelo castaño que cambia de color y ojos verdes/azules, así exactamente estaba Alex)
Anna comía pollo asado tranquila intentando no escuchar ningún pensamiento, cuando estaba en sitios así tarareaba una canción, en ese momento, mientras tarareaba una voz le interrumpió.
-¿hola? ¿estás bien?
-Oh, sí, perdón, ¿me decías algo?
-Am...sí...soy Abraham.-dijo el niño que había hablado. Tenía pelo azabache y ojos azules, iba peinado con bastante gomina y sonreía ladeadamente mientras ofrecía su mano a Anna.
-Anna.-dijo dandole la mano, el niño la cogió y besó su mano.
-Am...¿que se supone que haces?-dijo retirando la mano.
-Oh, no sé, lo vi en una película, al parecer a las chicas os encanta.
Anna frotó su frente y miró sonriente al niño.
-Creo que te tendré que enseñar como funcionan las chicas.
-La verdad que sí, sois como....aliens babosos y feos.
-Y los chicos sois malolientes y horribles.-dijo con una mueca divertida.
-Me caes bien.-dijo riendo.-¿amigos?
-Hum.....bueno, está bien.
Siguieron a los prefectos por las puertas después de cenar, Alex le dijo a Anna antes de separarse en las escaleras que se verían en el despacho de Dumbledore. Una vez llegaron a sus respectivas salas comunes, les pidieron a sus respectivos prefectos que le llevaran a hablar con Dumbledore.
Se encontraron en la puerta del despacho después de subir por una escalinata escondida.
-¡Anna!¡Felicidades por ser Ravenclaw! ¡sabía que serías de allí!
-¡felicidades a ti tambien! Una pena que no nos tocara juntas...
-Da igual.-dijo tocando a la puerta.
-adelante.-se escuchó al otro lado de la puerta.
Pasaron al despacho y Dumbledore estaba sentado en su escritorio como si las estubiera eperando.
-Buenas noches....am.....me dijo mi madre que le dieramos esto.-dijo Alex dándole la carta.
La leyó y sonrió.
-Bueno, si lo que cuenta aquí la señora Clayton es verdad...será mejor que no se separen, ¿no creen?
-¿en serio ha colado?-dijo Anna incrédula, Alex le metió un codazo y Dumbledore rió.
-Bueno, usted cogerá el horario de Gryffindor, Señorita Miller.
-Está bien....am...¿buenas noches?-dijo Alex antes de salir por la puerta, los prefectos seguían allí para volver a las salas.
-No me creo que lo hayamos conseguido.-dijo Anna.
-Ese viejo está loco.-dijo con un gesto divertido Alex.

You & Me ❤✨^[Era de merodeadores]^Donde viven las historias. Descúbrelo ahora