You & Me ❤✨^[Era de merodeadores]^

¿en serio?

Las niñas se encontraron en el gran comedor, Anna se sentó con su amiga en la mesa de Gryffindor.
-¿que hace esta aquí?-dijo Sirius con el ceño fruncido.
-ESTA, tiene nombre, y esa no es manera de tratar a la mejor amiga de tu futura mujer.-dijo Anna señalando a su amiga.
-Muy graciosa, Ann.-dijo Sirius.
-Hey, solo Alex me puede llamar "Ann".
-Es verdad, solo yo lo hago.
-Pues acostumbrate a oírlo de nuestra boca.-dijo James poniéndole el brazo por encima a Sirius.-Es lo que hacen los amigos, ¿no?
-Supongo...¿que clase tenemos primero?-preguntó Anna.
-¿tenemos? tú no tienes el mismo horario que nosotros.
-¿se lo dices o se lo digo?-dijo Alex riendo.
-A ver, Black, a mi tampoco me hace gracia soportarte todas las clases, pero me vas a ver a menudo.-dijo riendo.
-Por no decir siempre.-añadió Alex divertida.
-No, dime que no.-dijo Sirius con la cabeza sobre la mesa.
-Ps, si me adoras.-bromeó Anna.
-Buenos días...-dijo el chico que había visto Anna a lo lejos anoche.
-Buenos días, soy Anna.-dijo dándole la mano.
-Remus Lupin,  un placer.
-A ver....a primera hora tenemos....encantamientos con Ravenclaw.-dijo Alex mirando el horario.-Segunda...pociones con Slytherin y luego clase de vuelo con Ravenclaw y Hufflepuff.

Terminaron de desayunar y fueron algo confusos hasta clase de encantamientos. En la clase había un enano subido a una torre de libros. Anna y Alex se sentaron juntas justo en frente de Sirius y James, Remus se sentó con un chico bajito y gordo.
-Muy buenos días, alumnos, soy el profesor Flitwick y este año seré vuestro profesor de encantamientos...
-¿en serio? no nos habíamos dado cuenta.-dijo por lo bajo un niño de Ravenclaw.
-Hey, cierra el pico.-dijo Anna levantándose enfadada.
-Ann....siéntate...-dijo Alex intentando tranquilizarla.
-No, cuando pida disculpas.
-Señorita....
-Miller.
-Señorita Miller, siéntese o le quitaré puntos a su casa...
Anna se sentó molesta mirando al chico de Ravenclaw, antes de sentarse le dedicó una mirada matona de "iré a por ti"
-Bueno, ¿quien puede decirme para que sirve el encantamiento Lumos.
Anna y Alex levantaron la mano.
-Miller.
-Es un encantamiento que enciende la punta de la varita, emite luz cálida y si es mal realizado podría quemar la varita....
-¡Maravilloso! ¡5 puntos para Ravenclaw! ¿sabría usted decirnos variantes de este hechizo, señorita....
-Clayton, y sí. Lumos dúo, Lumos máxima, o incluso incendio serían algunos de ellos.
-¡5 puntos para Gryffindor!
-Si dieran puntos por ser idiota te llevarías el gordo, Miller.-dijo el mismo niño.
Alex se puso de pie y le miró fijamente, su pelo se tornó rojo juntos a sus ojos y el chico tragó saliba en seco.
-¡Ya basta! ¡3 puntos menos para cada uno!-dijo Flitwick acabando con la discusión.
-Profesor...no me parece justo que por un comentario ofensivo hacia mi haya tenido que cobrar ella, si me permite decirle, es algo...¿como decirlo? INJUSTO.
-Señorita Miller, yo no hago las normas.
-Lo sé, pero creo recordar palabras del director "En Hogwarts hay tolerancia y respeto, no quiero ni una sola mofa o comentario ofensivo"-mintió.
-¿dijo eso?
-Oooh, claro que lo dijo, cuando estubimos en su despacho.
-En ese caso le regreso los puntos a Gryffindor, lo siento señorita Clayton.
-¿De verdad dijo eso?-preguntó Sirius.
-Que va, pero no os iba a dejar sin puntos.-dijo con una sonrisa ladeada.
<<igual me he equivocado con ella>> escuchó. Hizo como si nada y apuntó todo lo que decía el profesor.
 La clase terminó y fueron a pociones, no sin que antes Sirius le hiciera el traspies al niño de Ravenclaw haciendo que casi cayera. Anna aguantó la risa mientras iba del brazo de Alex.
-Argh, ahora con Slytherin.-dijo Sirius molesto.
-¿porque lo dices así? Tal vez no sean tan....Slytherins.
Llegaron a clase de pociones y un señor con pinta inconfundible de loco, tenía el pelo blanco mayoritariamente calvo, llevaba la varita detrás de la oreja y una corbata con un nudo mal atado.
-Buenos días.-dijo sonriendo con dientes amarillos.
-Buenos días.-Dijeron las niñas sentándose al frente juntas.
-Ah, no, no, no, no, no, aquí los sitios los elijo yo....
-¿¡que?!-dijeron ambas.
-Si....¡tú!-le dijo a un niño de Slytherin.-¡Con la paliducha!-dijo señalando a Alex.-¡El melenudo!-señaló a Sirius.-¡Con la morena!-señaló a Anna.
-¿¡QUE?!-Dijeron ambos otra vez.-No, no, no, no, no, usted no lo entiende, nos odiamos.-dijo Sirius,
-¡A muerte!-añadió Anna desesperada.
-¡Razón de más para que os ponga juntos!
-¿¡porque?!
-¡Porque me da la gana!-dijo sonriendo mucho más el anciano.
-Viejo loco...-susurró Anna para ella.
Se sentaron y sacaron sus cosas.
-Te advierto, no quiero la más mínima tontería, Black.
-¡¡Buuuuueeeenos días alumnos!!-dijo con energía el anciano.
<<Buenos para ti, no te digo...>> pensó Sirius, a Anna casi le da un ataque de risa pero Sirius le tapó la boca antes de que soltara una carcajada de morsa retrasada.
-Bueno, seguramente aquí no me conozca ni el tato, en fin, profesor Swooptikes a su servicio.-dijo con una absurda reverencia.-¡tú!-dijo señalando a un niño de Slytherin con pelo negro y ojos marrones, tenía la nariz que parecía un cerdo, según la opinión de Alex, que estaba a su lado.-¿sabes que es una cura para forúnculos?
-Am...sí, de hecho sí, es una....¡poción! que...que cura ¿los forúnculos?
-Exacto.-dijo el anciano acercándose mucho al niño.-Si no curase los forúnculos no se llamaría así, ¿no? jeje, 1 punto para Slytherin.-dijo dando bastante miedo.-Vale, pues 10 puntos para el que adivine lo que vamos a hacer hoy.
Todos levantaron la mano  y le dieron la palabra a Alex.
-¿cura para forúnculos?
-¡10 puntos para Gryffindor!
-¿me estás vacilando? este viejo está majara.-le dijo Anna a Sirius con una mueca de locura. Sirius rió discretamente.
-¡Sacad vuestros libros! ¡la página 8! ¡YA!-dijo emocionado.
-Vale, vale, tranquilo.-se le escuchó a un niño de Gryffindor.
-Colmillos de serpiente...¿quieres que te traiga algunos?-le preguntó Anna a Sirius.
-Sí, yo iré buscando cuernos de babosa.-le contestó él.
-Que linda eres, deberías estar en un museo en vez de clase de pociones.-dijo coqueto Perseus a Alex
- Iugh, ponte a hacer tu poción antes de que te meta tal hostia que te deje irreconocible.-dijo asqueada Alex.
Anna ayudaba a Sirius a medir las espinas de puercoespín mientras él sacaba los dos calderos del fuego. Añadieron las púas y removieron durante un rato hasta que se tornó azul. Anna miró a Sirius extraño que le ofrecía chocar los cinco. Finalmente chocaron sus palmas y sonrieron satisfechos, levantaron la mano esperando al profesor, pero no le veían por ningún lado.
-¿donde se ha met....? AAAAAAH.-gritó al girarse y ver al profesor sonriente mirando la poción.
-¡Tiene buen color! ¡y han trabajado de maravilla! ¡5 puntos para cada uno!
-¡que no me toques!-se escuchó gritar a Alex al otro lado de la clase, Anna se levantó y miró a su amiga que empujaba con el brazo a Perseus mientras removía.
-¡PAKIRSON! ¡HAGA EL FAVOR DE CONTROLAR SUS HORMONAS!-gritó el profesor. Alex metió la poción en un frasco.
El timbre sonó y recogieron todo.
-¡ya! ¡vamos! ¡fuera de mi clae! ¡laaaarrrrgo!-gritaba el profesor haciendo aspamientos con los brazos.
Se dirigieron a la clase de vuelo.
-¡No quiero tonterías!-advirtió una mujer con pelo canoso y ojos amarillos.-Ponéos al lado izquierdo de vuestra escoba y cuando se indique llamad a vuestra escoba, decid bien alto: ARRIBA. ¿listos? ¡ya!
Anna y Alex apenas movieron la boca y sus escobas volaron a sus manos.
-Bien...ahora subíos, dad una patada, os eleváis y bajáis.
Se elevaron dando espirales y bajaron al suelo.
-1 punto para cada uno que consiga...no estrellarse con el suelo.
El chico que Ravenclaw que se había metido con Anna se elevó y comenzó a tambalearse y a gritar pidiendo ayuda. Anna aguantando la risa subió e intentó ayudarle.
-Vamos, ven conmigo antes de que te mates.-dijo ofreciéndole la mano.
-¡No me toques friki!
-Bueno...si prefieres caerte....
-¡NO!
-Pues pide disculpas.
-¡NUNCA!
-¡Sube ya antes de que me arrepienta!-dijo molesta. El niño se subió a la escoba de Anna y lo bajó al suelo.
-¡10 puntos para Ravenclaw por sus....valores morales!-dijo la profesora agitando el pelo rizado de la niña.
-Valores morales, pufff...¿para que sirve eso?-dijo el chico de Ravenclaw.
-IDIOTA, ESTAMOS EN LA MISMA CASA.
-¿Que mas da?
-Tengo una seria pregunta...¿todo bien por tu cabeza?-preguntó Sirius.- Quiero decir, es verdad que es una rarita y todo lo que quieras, pero creo que has olvidado el hecho de que ESOS PUNTOS VAN PARA TI TAMBIEN.
-oh, es verdad.
-¿como llegó este a Ravenclaw?-preguntó molesta Alex.
-Creo que no, segurito que es coco.
-¿Que significa eso?-preguntó Remus.
-Que parece muy duro, pero a la hora de la verdad está mayoritariamente hueco.-dijo Alex con una mueca de payasa.